Puede que un día tenga mil sonrisas para repartir y otro día no tenga ganas de nada. Quiero a muchas personas y odio a otras tantas. Para unos sere la mejor amiga del mundo y otros no me querrán ni ver. Tengo muchas cosas buenas, pero también muchas cosas malas. Me gusta contarle mis cosas a la gente en las que confío y que esa gente confíe en mi. Me gusta picar pero no que me piquen. Me gusta reír y hacer reír. Me gustan los pequeños detalles y los grandes momentos. Me gusta recordar viejos tiempos. Me encanta ayudar siempre y cuando sea alguien que se lo merezca. Me gusta actuar sin pensar en las consecuencias, pero odio a la gente que actúa así. Me gustan las tardes tranquilas aunque otras me tire horas haciendo el gilipollas. No me gusta seguir una misma rutina. Le he cogido costumbre a aprender de mis errores que no son pocos, y a reírme de ellos. Suelo ser muy tímida aunque otras veces pueda ser la mas lanzada. Tengo muy poca confianza en mi misma y demasiada en los demás. Puedo ser encantadora por las mañanas e insoportable por las tardes. Tengo miradas que matan y sonrisas que emboban. O todo me da igual o todo me afecta. O te quiero o te odio. Me paso el día soñando despierta, pienso que los sábados son para pasarselo bien y los domingos para arrepentirse. Soy un poco orgullosa y me he callado miles de cosas que podría haber dicho, y me tengo que caer 100 veces, que si no no aprendo.
