Algo Casi Imposible. | Breddy Meyva |

Capítulo 3.

Algo suena, un horrible sonido se escucha y retumba en mi cabeza que me duele mucho. Después de todo creo que no me he salvado de la resaca. Recuerdo lo que paso ayer, sonrío y creo que me he puesto rojo por lo que hice con Bryan. Tengo que arreglar todo y hablar con Bryan ó dejarlo así y cuando él mencione eso le diré que no sé de qué habla. Tengo dos opciones, dos opciones que me pueden cambiar mi vida rápidamente. Trato de levantarme pero el dolor sigue ahí, no me queda de otra más que volverme a sentar en la cama. El estúpido sonido sigue, me doy cuenta que es mi celular y una llamada de mi madre.

— ¡Freddy! ¿En dónde te has mentido? Te estoy llamando desde hace una hora y tú ni tus luces, quiero ir a tu departamento, cariño. — dice mi madre.
— Me quedé en la casa de Alonso, mamá. — contesto con voz ronca.
— ¿Acaso tomaste, Alfredo? — pregunta mi mamá en un tono serio.
— Sí, mamá. Pero no fue mucho, sólo que ya era tarde y no pude regresar a casa. — después de todo no era mentira. Bryan me dijo que no me podría regresar a casa ya que era tarde.
— Bien, entonces te espero aquí en la casa. Ven con cuidado, corazón. — dice mi madre tiernamente. Ella siempre ha sido muy comprensiva conmigo, siempre me apoya y no me deja caer, por eso y más amo a mi madre.

Al terminar la llamada me levanto de nuevo pero esta vez lentamente, pongo una mano sobre mi cabeza y salgo para ver si hay alguien. Un olor delicioso inunda mis fosas nasales, alguien preparaba Hot-cakes. Visualizo a Alonso en pijama, él es quien cocina.

— Buenos días. — saludo cerrando los ojos con fuerza, el ruido me sigue molestando.
— Buenos días, Freddy. — contesta muy sonriente, Alonso. — Jos, Freddu ya despertó. — dice en voz alta.
— Silencio, Alonso. La cabeza me va a explotar. — digo sentándome en la barra para desayunar, recargo mi cabeza en la barra y pongo mis manos en la nuca.
— ¿Cómo te sientes, Freddy? — pregunta riendo, Jos.
— Estoy para morir. — contesto levantado mi cabeza.
— Toma esto, se te va a pasar muy rápido el dolor. — me da unas pastillas con una vaso de agua, rápidamente. No dudo ni un segundo para tomar esas pastillas.
— El desayuno ya esta listo. — anuncia Alonso. El pelirrojo pone un plato de hot-cakes frente a mí y otro frente a Jos. Después me da una taza de café y a Jos igual. Alonso estaba por darnos la miel y la mermelada pero estaba por caer, Jos rápidamente se para y lo toma de la cintura. Al tener todo bien el ojiazul deja los frascos sobre la barra, Jos se agacha y toma un ¿bat? —
— ¿Qué esto no estaba en nuestra habitación? — pregunta Jos alzando una ceja. Alonso se ríe nervioso y voltea a otra parte. No pude evitar reír, cosas así pasaban muy seguido entre ellos. — Alonso...
— Esta bien; no mentí cuando dije que no dejaría que ninguna chica se acercara a tí, ¿bien? No me gusto la idea de traer mujeres semi desnudas a nuestro departamento, — estoy de acuerdo en eso. — La rubia teñida no quitaba los ojos de tí, pero después te bese y le susurré un "es mió, perra", ella se alejó y no use el bat. Pero tranquilo, no le iba a pegar, sólo la iba a amenazar. — explicó alzando los hombros. Jos y yo soltamos una risa, él de cejas pobladas beso a su novio. Recordé el beso que tuve con Bryan, así que baje mi vista para esconder mis mejillas rojas. Después nos pusimos a desayunar.

•~•~•~•

— Ya llegué, mamá. — avise al llegar a la casa de mi madre. Antes había pasado a darme un baño y recoger un poco el departamento.
— En la cocina, cariño. — responde. Voy a la cocina y la veo ahí, ella estaba cocinando, usaba uno de sus lindos vestidos para embarazada, sí, mi mamá esta embarazada, tiene seis meses. El papá es Mike, él es muy buena gente, se casaron hace dos años. Mi papá falleció cuando yo era niño, así que mi madre fue mamá y papá para mí. Saludé dando un beso en su frente, ella me abrazo.

Estuve platicando con mi mamá durante unas horas, me la pasaba muy bien con ella, Mike estaba trabajando y llegaría en la noche, comí con mi madre mientras platicábamos.

— ¿Pasa algo, Freddy? Te notó distraído. — pregunta alzando una ceja.
— No me pasa nada, mamá. Sólo que no dormí bien, — contesté. Levantó los platos para lavarlos. Al terminar los sequé para después acomodarlos. Mi celular suena, seco mis manos con la toalla que esta a un lado para contestar.

— Hey. — contesto.
— ¿Freddy? — preguntan. — Soy Bryan, ¿puedes venir al departamento? Tengo que hablar contigo. — Esto no puede ser.

* * * * * *

¿Quieren otro capítulo? 7u7

No sé, no sé, no sé :v

Decidí actualizar porque #Yolo \u/

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