Algo Casi Imposible. | Breddy Meyva |

Capítulo 2.

Tocaron fuerte la puerta del departamento, me encontraba viendo televisión en mi cómoda cama, estaba apunto de quedarme dormido.

— ¡Ya voy! — grito desde la habitación. Al abrir me encontré a Alan.
— ¡¿Por qué tocas tan fuerte?! — pregunté histérico.
— Yo también me alegro de verte, primito. — dice con sarcasmo.
— Ya, ya, ya. ¿Qué se te ofrece? — pregunté juntando mis cejas.
— Primero que nada, déjame pasar. — me hizo a un lado y pasó como si él estuviera en su casa. Se sentó en unos de los sillones de la sala, tomó el control remoto de la televisión que estaba ahí y la prendió.
— Al grano, Alan. ¿A qué viniste? — volví a preguntar cruzándome de brazos.
— Vine para que me ayudes a organizar la despedida de soltero de Bryan. — Abrí los ojos como dos grandes lunas llenas. ¡¿Despedida de soltero?! ¡¿En serio?! Eso significa que va a ver viejas semi desnudas, que van a ser contratadas por Alan, conozco perfectamente a mi primo y se lo urgido y pervertido que es. También significa que esas zorras van a bailar para Bryan, algo que me molestaría muchísimo, suficiente tengo con Nath. Así que primito vete a la mierda, y déjame en paz. Sí, eso es un NO.
— Bien. — contesté. Era una muy mala idea aceptar.
— Genial, ahora para organizarnos solo hay que esperar a Jalonso. — era el nombre que yo le había puesto a la relación de Jos y Alonso, a ellos les encantó "Jalonso", y por eso les decimos así. — No tardan en llegar. — tocaron la puerta, esta vez como se debe. Fui a abrir y saludé a la feliz pareja.
— Al fin, alguien se sabe tocar la puerta, no como otros. — dije alto para que Alan lo escuchará.
— ¡Te escuché! — gritó Alan.
— ¡Es lo que quería! — contesté en el mismo modo.
— Ya estamos aquí, ¿qué haremos? — pregunta Jos.
— Vamos a hacerle una despidida de soltero a Bryan, pero necesitamos en donde, en mi casa ya no puedo, los vecinos se quejan de que siempre hago fiestas. — dice Alan, molesto.
— No me digas. — responde Alonso con ironía.
— Bueno, ¿en dónde la haremos? — pregunta, Alan.
— Aquí ni lo piensen, acabo de remodelar el departamento y sabes que no podemos hacer fiestas, — digo rápidamente.
— Bien, será en nuestra casa. — dice Alonso alzando los hombros.
— ¿Seguro? — le pregunta Jos a su novio.
— Sí, pero nadie se va a acercar a tí ó si eso pasa, el nuevo bat será estrenado y no precisamente para jugar béisbol, — contesta Alonso sonriendo. Todos reímos y Jos lo besa.
— Genial, ahora... ¿A quién invitaremos? — pregunta Jos.
— A todos los que quieras menos al estúpido de Jack, — dice Alonso cruzándose de brazos. Jack es el hermano de Nath; es un homofóbico, no puede ver a Jalonso porque empieza a mandarles indirectas muy directas ó a burlarse de ellos. Al igual que Alonso y Jos también lo odio, Alan igual y Bryan, pero él no lo demuestra.
— Lo sé, lo detesto. — dice Alan.
— ¿Cuando haremos todo? — pregunto.
— Dentro de dos semanas y media, tenemos que preparar muy bien todo. — contesta mi primo. Asentí.

•~•~•~•

— ¿A dónde vamos? — pregunta Bryan.
— Ya verás... — contesto. Al genio de Alan (noten el sarcasmo), se le ocurrió hacer la despedida de soltero como una sorpresa para Bry. Así que el plan es que yo pasará por él, dar vueltas por la cuidad hasta que Jos me mandará un mensaje con una clave para avisar que todo estuviera listo, llevar a Bryan hasta la casa de ellos y ahí todos gritarían: "sorpresa". Me llegó un mensaje, era de Jos. Eso quería decir que todo estaba listo. Tomé una ruta nueva para ir al hogar de Alonso y Jos, al llegar los dos salimos del auto.
— ¿Qué hacemos en la casa se Jos y Alonso? — preguntó.
— Espera... — Me apresuré para abrir la casa, Bryan entró tras de mí, todos gritaron "sorpresa" y Bry sonrió.
— ¿Qué es esto? — pregunta sonriendo.
— Una despedida de soltero, amigo. — contesta Alan palmeando su espalda. — Ahora no digas nada y disfruta.

No hay tanta gente como me lo esperaba, sólo eramos amigos. Las chicas llegaron unos minutos después de nosotros, Alonso las aleja de Jos, causándome risa. Bryan se aleja de ellas, eso me tranquiliza, ya que no podría soportar que una de esas zorras se le acerque a mi Bryan. Llevó más de cinco latas de cerveza, Bryan intenta quitarme las latas pero me alejo, tengo que estar medio ebrio para lo que tengo pensado hacer. A la octava cerveza no estaba tan ebrio, pero Bryan ya se la creía. Bailaba con una de las chicas, ella me coqueteaba y yo a ella, fingía tambalearme, hasta que Bryan llego al lado mió, tal y como me lo imaginé.

— Freddy, ya basta. Estas ebrio. — dice Bryan.
— Claro que no, Bryan. — contesto riéndome.
— Es tarde, no puedes regresar así al departamento. Vas a dormir aquí. Vamos, ya hablé con Jos y dice que te puedes quedar en el cuarto de huéspedes. — me toma de la muñeca llevándome con él, la chica hace una seña para que le llamé, me rio y después miro a Alan, estaba con tres de esas chicas coqueteando. Llego al cuarto de huéspedes, Bryan me ayuda a acostarme y me quita los zapatos. Me dice cosas que no logro entender, estoy nervioso por lo que voy a hacer.

— ... Ya mejor duerme, mañana hablamos. — es lo que logro entender. Bryan esta apunto de irse pero lo detengo.
— Bryan, espera. — grité un poco.
— Dime. — voltea a verme.
— Acércate, tengo que decirte algo. — titubeo. Bryan se acerca lentamente, hago una seña para que quede a mi altura, él se agacha y se acerca más, su rostro esta a menos de veinte centímetros de mí, estoy loco por lo que voy a hacer, pero es ahora o nunca. Lo tomo del rostro para acercarlo al mió y junto mis labios con los suyos.

De repente los efectos del alcohol se fueron, Nath dejo de existir al igual que la despedida de soltero, sólo eramos Bryan y yo. Él se quiso separar, pero no lo deje, creo que no le quedo de otra más que seguir el beso, sus gruesos labios rozaban tiernamente los míos, tal vez el también estaba un poco ebrio, por eso siguió el beso ó no lo sé, el beso es único. Lo tomó del cuello, aferrandolo a mí, él pasa sus dos manos a mis costados, pasé mis manos por su lindo cabello, ¿esto está pasando realmente? Muerdo tímidamente su labio inferior, el suelta un leve gemido, pero después todo termina.

— No, Freddy. Esto no esta bien, ¿qué estoy haciendo? Tú estás ebrio y no sabes lo que haces. Mejor me voy. — al decir eso se va, cerrando la puerta tras él. Lo único que puedo pensar es "ouch".

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Aquí el segundo capítulo *-*
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Paz.