Hoy me tocaba trabajar, ¡genial!.
¿Se nota mucho mi sarcasmo?
-A ver, mocosa. Cuéntame todo-. Me dijo Camila, ella habia tenido vacaciones y apenas regresó, por lo que no sabía nada. Yo sólo solté unas pequeñas risas y asentí.
-¿Recuerdas al chico que venía todos los días a comprar helado y cuando se iba lo botaba a la basura?-. Camila asintió totalmente concentrada en mi historia.
-Bueno, resulta que mi mejor amigo le habló de mí, y por eso sabía tantas cosas. Empezamos a salir y bueno, ya llevamos 7 meses de novios-. Sonreí como una tonta al recordarlo, cada vez que pensaba en él sonreía de esa manera.
-Me encanta verte tan feliz-. Me guiñó la hipócrita de Michelle. Me odia y yo la odiaba, pero era demasiado hipócrita como para decirlo.
-No tienes porque mentirme, Michelle. Nunca te ha gustado verme feliz-.
-¿Por qué dices eso nena? Me encanta verte feliz-. Sonrió malvadamente y luego fue a atender a un cliente.
-Perra-. Me susurró Kate, todas la odiábamos.
Al salir del trabajo, se supone que Heechul me recogería.
Pero por alguna razón, no lo hizo.
Pasó media hora, luego 45 minutos y al final 1 hora. Me cansé de esperarlo y me fui caminando.
Llegué a mi casa agotada y le llamé a Heechul una y otra vez. No me contestaba.
Le mandé mio mensajes y tampoco me contestaba.
Me estaba preocupando.
Al día siguiente también fui a trabajar, y volví a llamarlo. Nada.
El dia siguiente fue igual, nada de él.
Así pasó una semana.
Y nada de él.
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El precio de amar.
Storie d'amore¿Quién no se ha llevado una decepción con alguien que ama? ¿Quién no ha sido engañado alguna vez? ¿Quién no ha tenido que derramar lágrimas?, o lo que es peor derramarlas hacia dentro, sin que nadie lo sepa. Copyright: All Rights Reserved.0
