El precio de amar.

Capitulo 3

Estaba en el trabajo, como todos los días.
Sólo que ahora me encontraba limpiando, era lo más agotador.
En todo el día, había limpiado las mesas, los vidrios, las vitrinas, las máquinas del helado y rellenar los espacios vacíos de paletas y postres también. Nosotras le llamabamos el "día maldito", ya que a cada una nos tocaba una vez cada dos semanas.
Por fin iba a terminar, ya me encontraba limpiando el piso. En mi cabeza sólo se escuchaban malas palabras, maldiciones y disparates. Hasta había olvidado la cita que tenía con el chico hermoso, y sí, acepté salir con él.
¿Por qué si no lo conocía? Me inspiraba confianza, por eso acepté salir con él y no tenía miedo.

-¿Te ayudo?-. Su voz me asustó, hizo que me exaltara un poco ya que me encontraba sumida en mis pensamientos.
-No, no. Como crees. Es mi trabajo-.
-Nada de eso, te ves muy cansada-. No sabia si tomar eso como un insulto.
El chico tomó el trapeador y comenzó a limpiar, traté de quitárselo pero no pude.
Unos minutos después terminó y me entregó el trapeador, fui a dejarlo y por mis llaves y celular, pues ya había terminado.
-¿Lista para nuestra cita?-. Me tomó de la mano y me miró a los ojos cuando dijo eso. Sentí unos nervios inmensos.
-Pero no te conozco, ¿y si eres un violador o un secuestrador? -.
-Los secuestradores y violadores no son tan bellos como yo lo soy-. Cuando dijo eso no pude evitar reírme, a lo que él también río. Su risa era hermosa, como él.
-De acuerdo, vamos. Pero primero dime tu nombre-. Terminé de reirme y sonreí, esperando escuchar su nombre.
-Mi nombre es Heechul, el gran Kim Heechul-. Reí otra vez, su ego irradiaba de él pero era divertido.
-Un gusto, Heechul. Mi nombre es Jin ri. ¿Vamos?-. Antes de decir eso, encargué mi auto a Camila y a Krystal.
El chico, ahora con nombre y yo fuimos hasta su auto, con rumbo a nuestra primera cita.