Mi Mejor Error (Dean Winchester)

Capítulo 3.

Me puse unas botas negras, unos vaqueros, una camiseta amarilla y una chaqueta gris que me abroché al tope. Picaron a la puerta de mi cuarto.

- Allison, ¿estás lista?

- Sí, mamá. Bajo ahora.

Me hice una cola de caballo y me guardé el móvil en el bolsillo de mis vaqueros. Me miré por última vez en el espejo y bajé las escaleras. Mis padres me esperaban ya listos en la puerta de casa.

- ¿Lo llevamos todo? -preguntó mi madre.

- Sí, cariño -respondió mi padre ya cansado- Vámonos ya.

****

El viaje hasta el lugar de la fiesta no estaba muy lejos, así que no tardamos mucho en llegar. Los árboles estaban adornados con faroles colgados de las ramas creando una iluminación que me volvía loca.

Los más jóvenes bailaban en medio del gran claro del bosque con vasos de plástico en las manos mientras que los más adultos hablaban y hacían pequeños movimientos de baile algo apartados de ellos.

- Mira, cariño, allí están los Harrison -mi madre agarró el brazo a mi padre y le arrastró hacia la zona de los adultos. Él giró la cabeza y me dijo con los labios que no hiciese nada malo, a lo que yo respondí levantando el pulgar.

Me acerqué a uno de los puestos improvisados que habían montado y pedí una cerveza. Me mantuve a una distancia prudencial del cúmulo de adolescentes que bailaban y traté de ver algo interesante en mi móvil que estaba casi sin batería porque me olvidé de cargarlo.

- ¡Allison! -entre la música distinguí la voz de una chica gritando mi nombre. La busqué con la mirada y encontré a Megan, una antigua compañera de mi clase.

- Hola, Megan. ¿Qué tal estás?

- Yo muy bien. Hace siglos que no te veo, ¿qué ha sido de ti?

- No mucho, aún sigo buscando algún trabajo.

- Te comprendo. Estoy aquí cerca con unas amigas, ¿quieres venir?

- No tengo nada mejor que hacer -respondí.

Megan me guió a través de la gente hasta un grupito compuesto por varias chicas y dos chicos.

- Chicas, ¿os acordáis de Allison?

Miré todas las caras y lo primero que se me vino a la mente fue: "zorras elitistas". Con menuda gente se ha juntado Megan. Todas empezaron a asentir con la cabeza mientras ponían su mejor cara de falsedad, como si yo no supiese que les caigo mal.

Dos de ellas me presentaron a sus "novios", me juego el cuello a que esos lo único que tienen de novios es la parte de la cama.

El tiempo pasó y traté de meterme en los diferentes temas de los que hablaban, pero apenas conseguí intercambiar alguna palabra con alguna que no fuese Megan, que ganas tenía de partirles algún hueso.

Miraba a Taylor mientras contaba una historia supuestamente divertida que hasta ahora no me había sacado una sola risa real cuando por detrás de su hombro vi a Dean con un chico más alto que él alejándose de la fiesta con caras serias.

- Megan, acabo de ver a un amigo, voy a ir a saludarle. Quizá vuelva luego.

- De acuerdo.

Las demás ni se molestaron en decirme adiós, cosa que no me importó demasiado. Me alejé de la fiesta como ellos y les seguí intentando ser lo más discreta posible. En un momento dado, al saltar una rama, aterricé haciendo ruido e instintivamente me escondí tras un árbol.