In Your Eyes - Camren

Ultimo Capitulo Parte II

Camila llevaba a Lauren por un sendero de piedras, por lo que Lauren había deducido. Sus zapatos hacían las piedras sonar alto cuando ella las pisaba con un nuevo paso en falso. Por Dios, Camila parecía tener prisa. Lauren la seguiría de buen grado a donde quiera que fuese si no estuviera vendada. Ella era nueva en esas cosas de caminar a oscuras y ya lo odiaba. Si tener los ojos temporalmente cubiertos la sacaba de sus casillas, sería una vieja quejumbrosa si fuera como Camila. Admiraba a la menor por haber acogido sus defectos y no lamentarse y culpar todo por su limitación, Lauren estaba segura de que sería de ese tipo de personas si fuera ciega.

La morena escuchó el ruido del motor del auto ser prendido detrás de ellas, y después el ruido de las llantas moviendo las piedras, alejándose.

-¿A dónde va Álvaro? -Preguntó ella un poco perdida.

-No lo necesitaremos más por hoy. -Respondió Camila con un aire malicioso.- Llegamos. -Dijo deteniéndose. Lauren agradeció mentalmente por eso.- Puedes quitarte la venda.

Lauren deslizó la corbata fuera de su cabeza, su mirada atenta, desesperada y curiosa por saber en dónde estaba.

Ella estaba frente a una pequeña cabaña de madera, tendría comodidad por lo menos. Parecía acogedora y poco usada.

Camila subió las escaleras que llevaban hacia el pequeño balcón y abrió la puerta. Después se volvió esperando a Lauren.

-Esta cabaña es de la anciana Mel. Tengo que presentártela. -Dijo ella mientras Lauren subía, acercándose.- Años atrás, antes de que tú y yo naciéramos, era aquí a donde ella venía amar. Sus papás no aceptaban a la persona que ella amaba, así que huyó de casa y lo esperaba a él aquí, todas las noches. Ellos se acostaban sobre el pasto y planeaban cosas, hacían promesas teniendo como testigo las estrellas. Albert la amó por el tiempo que tuvo, ella aún sigue amándolo.

-Eso es lindo. -Dijo Lauren acercándose.- ¿Qué pasó con ellos? -Preguntó envuelta en la historia de amor.

Camila se volvió y abrió la puerta.

-Él murió de tuberculosis en la guerra. Y ella ha venido sola desde entonces. Construyó la cabaña después de su muerte, era el lugar al que ella venía cuando el luto la torturaba. - Respondió con pesar.

Lauren podía ver que Camila sentía pena de la anciana de la que hablaba.

-Ese no es un buen final para una historia de amor.

Camila suspiró.

-Tal vez no sea sobre el final feliz. Tal vez sea sobre la historia. -Respondió ella antes de entrar.

Lauren hesitó antes de realmente entrar. Estaba nerviosa y no sabía por qué. Ella caminó dentro de la cabaña, deparándose con un ambiente iluminado por velas. Había varias de ellas, todas en un tono rojo pasión. La cabaña olía a madera y velas románticas, una canción suave de Mary Lambert sonaba bajo. Todo tan acogedor que Lauren tuvo ganas de nunca más salir de ahí.

-Espero que Álvaro esté haciendo papel de bombero también esta noche. -Mencionó Lauren sin pensar.

Camila rió.

Ella vio hacia la cama confortable, el colchón se proyectaba a tan solo un paso del suelo. Arriba, en el techo, ella podía ver las estrellas pues tenía parte vidrio temperado móvil, podía ser abierto y cerrado dejando una abertura sobre el techo, permitiendo que la brisa de la noche entrara en el ambiente. Lauren nunca había visto un lugar tan perfecto. Cerca de la cabecera, en el suelo, había dos floreros que contenían bellas orquídeas. Eran sus flores preferidas.

Camila se viró hacia ella. Tenía una cajita de terciopelo en las manos. Ella sonrió y se la entregó a Lauren. La chica le envió una mirada de sorpresa. Y cuando Lauren tardó para esbozar alguna reacción, Camila llevó la mano en busca de la de ella para saber si ya la había abierto. Ella encontró la caja cerrada entre las manos de Lauren.