Las ppgz y los rrbz [EDITANDO]

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Miyako levantó sus manos en un intento porque el rubio no se le acercara más.

-¡Basta!-

Notó de inmediato como temblaba del miedo así que no siguió avanzando pero tampoco se alejó.

-¿Tanto miedo me tienes?- preguntó con una ceja alzada.

Solo recibió como respuesta la imagen de la rubia tratando de no dejar caer lágrimas de nuevo por su rostro, trataba de ser más fuerte pero era demasiado para ella.

Boomer suspiró.

-Perdona por asustarte, princesa- se alejó desinteresado-No estoy acostumbrado al rechazo por parte de las mujeres- susurró riendo.

Miyako lo siguió con la mirada confundida, notando como iba a recostarse sin hacer nada más.

Se quedó ahí sin saber que hacer.

-Sino vienes volveré a invadir tu espacio-

Ante el fuerte escalofrio que recorrió su columna solo atinó a ir al otro extremo de la cama, se acostó manteniendo la mayor distancia posible entre sus cuerpos, no tardó mucho en caer rendida.

[MIENTRAS...]

Butch se acercó a su hermano al verlo pensar.

-¿Qué ocurre?-

Brick lo miró.

-Normalmente las victimas sometidas a estos métodos tienden a asustarse mucho ante la sola idea de llegar a morir- pensó en la pelirroja- Pero esa chica parecía lista para recibir todo el proceso-

-Como si ya se lo hubieran practicado antes- terminó Butch.

Se dieron una última mirada entre ellos.

-Basado en todo lo que hemos descubierto hasta ahora solo tengo dos opciones en mente- habló Brick- Tu dime cual a tus ojos es más probable-

-Esta bien- asintió Butch.

-O fueron prisioneras del pueblo en el que vivían ya sea por algún malentendido o tal vez por su gran boca lo cual hizo que se les castigara con métodos poco ortodoxos-

Butch lo vio posible y a la vez no, mostraban claras señales con las marcas en su cuerpo de que habían sido sometidas a castigos horribles pero al mismo tiempo le parecía sospechoso que cada una parecía sufrir más por culpa de otros métodos.

La rubia claramente parecía tener miedo a espacios cerrados y lucía más temerosa a los hombres, la pelirroja no mostraba temor hasta ahora por nada pero a la hora de la comida había notado que parecía inspeccionar con discreción su comida por mucho que hubiera visto a su hermana prepararla, a veces parecía que no quería comer.

Por último la pelinegra, recordó notar varias cosas, era la que tenía más marcas en su cuerpo sobre todo en las muñecas, cuello, tobillos y espalda, la que parecía más desconfiada por cada detalle en particular, la que se mostraba más dura ante los ojos de los demás pero más vulnerable ante los suyos.

-La otra opción es que fueran esclavas de alguna de las familias reales- susurró mirando la ventana- Esclavas sexuales-

Butch levantó la cabeza.

-Eso explicaría muchas cosas, los castigos, la desconfianza, la falta de información- miró a su hermano- La gran hermosura que poseen esas chicas pudo haber sido un claro atrayente a poseer para la familia real-

-No me extrañaría de esa clase de mierdas- rió recordando a algunos- A veces creo que nos superan siendo la peor escoria-

-Entonces para ti la segunda opción es más certera-