Hueco En Mi Alma

simple diversión

Se levanto, se arreglo, pero no quiso salir de la habitación.

Haci se lo informaron los droides a su amo. Que en estos momentos Lady Vader se encuentra recluida en su habitación y que no tiene las intenciones de salir.

"Ya tendra apetito para el almuerzo aquella ingrata".

Como extraoficialmente se encontraba en su " luna de miel" . No tenia que trabajar. La Senadora no habia hido tampoco al almuerzo, no le intereso en lo absoluto, pero ella no se le quitaba de la cabeza, tratando de despejar su mente fue a conocer mejor el lugar. Ya que se supone que ese seria su hogar durante toda su vida. La lujosa mansion era una magnificencia, los muebles eran de algunos planetas ye extintos, habian obras de artes de personjes pintorescos como excentricos que habian plasmado sus emociones hacia esa obras, en la cual mas destacaba pinturas. La vista de cada balcon de la casa era hacia la decadente ciudad de Coursant, ella por un momento penso que para el podria ser un panorama casi celestial. Y sin duda cada habitacion, enorme. Aunque habian un tedioso y pesado ambiente en todo el lugar, se encontraba muy incomoda, era muy denso, perverso se podria decir. Y como no. Era la casa de un lord Sith.
Caminaba por uno de los numerosos pasillos y habitaciones hasta que dio con una enorme biblioteca. Quedo maravillada. Tenia obras de todos lo escritores, dramaturgos, novelistas, sátiros comediantes de la galaxia. Eran millones de libros. Pero hubo una sección que le llamo la atención. Varios estantes eran de una sola seccion de politica. Politica totalitaria, fascista, capitalista, imperial, feudal. Varios libro que tan solo leerlos le daba nauseas. Eso solo fomentaba a mas locos a tomar la galaxia. Tomo uno en particular y se sento en un amplio sillon blanco. Se dispuso a leerlo, estuvo absorta en el libro durante hora y media. Ese libro era muy crudo. Hablaba de la guerra como si fuera una arte, del dominio sobre los demas, infundar miedo, opresión, haci no habrial caos. Mano dura sobre todos y tu palabra sera ley. Decia. Cada ves tenia menos ganas de leerlos. Cuando una voz la sobresalto (adivinen) detras de ella.

-Veo que disfrutas mucho de la lectura de Graff Teese.

Se asusto. Siempre tenia esa costumbre de aparecerse como fantasma.

-¡por la fuerza! ¡quieres matarme de un susto!. Siempre me sobresaltas de improvisto. ¿que te pasa?.

-crei que se habia percatado de mi presencia. Estoy aqui desde hace media hora. Ademas disfruto quitar su tranquilidad.

No supo que fue lo que mas la sorprendio a Padme. Que el se encontraba mucho tiempo observandola o las ultimas lines que parecian ser una broma. notando un sentido del humor muy oscuro el suyo. No le dejaria que se saliese con la suya.

-a proposito Vader. Yo no estaba embelesada con los escritos de este enfermo. Lo unico que escribe es sobre tirania y crueldad hacia el pueblo gobernado. No me agrada en lo absoluto.

Lo miraba desafiante. El contraataco.

-no habla sobre tirania. El en todos sus escritos menciona que con un poco de firmeza, logramos equilibrar al mundo. Apaciguando el poder que los demas tienen con su rebeldia. Un poco de orden. Y referente a la crueldad, es solo para los que no lo acatan.

-¡eres un monstruo insensible!-escupio con odio.

-gracias, pero le recuerdo que usted es la esposa del monstruo insensible- se mofó de ella- me han dicho cosas peores. Ah!, espero que le haya gustado los escritos de Graff Teese. Esta noche El Imperio le tiene preparado una fiesta de homenaje.

Padme estaba impresionada. El esperaba que fuera a la fiesta de ese escritor maquiavelico?, ese tal Graff Teese. Tambien para estar rodeada de ese tipo de gente superficial, aduladores, hipocritas. O no!, era un error.

-perdon!-lo encaro- con que derecho crees que vas a venir a autorizarme a que vaya.

-es una orden.

-¡a mi tu no me ordenas!.

-mire senadora Amidala, no estoy para caprichos suyos. Ademas somos la pareja anfitriona, el Emperador no va a ir, se encuentra ocupado.

Su voz se mantenia baja y no estaba tan alterado a pesar que ella ya estaba al borde de la histeria.

-¡NO PIENSO IR!.-dijo dando un paso hacia adelante cruzando los brazos.

-Senadora esta charla con usted me parece tediosa. La veo en la noche. Tambien le comunico que usted dara el discurso para homenajearlo. Usted sabra dar un buen discurso como diplomatica y buena oradora que siempre fue.- dicho esto con su voz impersonal y mecanica se fue, dejando a una muy furiosa Padme.

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Tenia una sonrisa dentro de si mismo. Le era una nueva forma salir de la rutina. Discutir con la Senadora, simplemente desde el primer momento que le levanto la voz, el pudo matarla obstruyendole la garganta. Pero no, el encontraba muy divertida la forma en la que ella se enojaba. Sacarla de sus casillas y hacerla ver desmoronarse   al ver que su vida cambio. No tenia precio alguno. Comenzo todo con su matrimonio arreglado. El dia de su flamnate boda, ella queria morirse. Esa cara de pavor y miedo le causaba mucha gracia, auque en algún momento llego a sentir pena por ella. Pero desistio de eso al ver que era una mujer muy altanera. El ponerla la espalda contra la pared era gracioso y como ella gritaba. No era de una manera histerica, ni tampoco olvidaba su educacion (o miedo) como lo habia visto en otros politicos (la mayoria de los politicos que trato, terminaron discutiendo de una manera soez y vulgar y algunos olvidaban sus ideales y valores. Y claro todos acabaton muertos) pero esa Senadora hacia que sus dias no se vuelvan tan monotonos como siempre fueron. Era tan divertido ver como se encolerizaba esa cara tan angelical...un momento. Angelical. Tal vez si mente le estaba jugando una mala pasada. Solo le era divertido ver como sufre. Por que el emoerador no quiere verla muerta aun, si debe de ser solo eso. Su sufrimiento.