Lujuria

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Encontraron un bar muy cerca de allí, ambos bajaron de la motocicleta acomodando sus revueltos cabellos oscuros y entraron al lugar. Se sentaron en la mesa mas alejada para poder hablar con tranquilidad, pidieron un par de cervezas y Kyu comenzó a hablar
 
 
 
-Yo…lamento mostrarme de esta forma frente a ti. Yo…no sé qué hacer y me avergüenza que me veas tan débil, Jun. Pero no tengo con quien más hablar- decía apenado el moreno
 
-No digas eso, Kyu. Tu estuviste cuando más te necesitaba y yo también quiero ayudarte. Quiero que confíes en mí. Por favor-
 
-Aunque quise negarlo estaba tan ilusionado, Jun. Pensé que sería distinto pero ellos no cambiaron nada. Nada. Esa obstinación en dirigir mi vida…creo que incluso es peor ahora-  Expresaba el mayor tomando un largo trago de esa botella queriendo que de esa forma desapareciera el nudo que se la había formado en la garganta.
 
-Kyu- pronuncio con pena el menor tomando el hombro ajeno y acariciándolo con delicadeza
 
-Debería acostumbrarme…- Dijo dejando escapar un largo suspiro.  –No importa, ya no interesa. No voy a dejar que me afecte-
 
-No te guardes las cosas, Kyu Jong- le regaño Hyung Jun - Si quieres llorar, si quieres gritar incluso si quieres romper cosas, no importa. Desahógate. Yo voy a acompañarte- expreso de la forma más sincera haciendo formar una tímida sonrisa en el rostro del mayor quien rompió en llanto luego, abrazando con fuerza al menor mientras le pedía disculpas repetidas veces por su comportamiento tan vergonzoso para él mismo.
 
Terminando sus bebidas se levantaron de sus asientos y salieron del lugar
 
-Te llevo a casa- dijo a Jun mientras le alcanzaba el casco
 
Estaciono la moto en la puerta del edificio del pelinegro y espero mientras bajaba de su lugar, acomodo el casco en la parte trasera y se despidieron con un gesto de sus manos.
 
-¡Jun!- exclamo el mayor cuando se dirigía a la puerta, lo tomo de la mano con firmeza haciendo que diera media vuelta para dejarlo frente a él. Aun encima de su motocicleta  tomo el pequeño rostro del menor descendiéndolo con lentitud para acercarlo a él y poder depositar en sus labios un suave e inmaculado beso.
 
-Gracias- pronuncio con una sonrisa para terminar de poner su caso y arrancar con rapidez alejándose del lugar dejando atrás a Jun sorprendido por la acción cometida.
 
 
 
 
 
 
 
Entro a su casa y tal como lo había dicho, no estaba en casa.
 
Se metió al baño para darse una ducha pero aun cuando tardo en hacerlo al salir Saeng no había llegado. Tomo su celular buscando algún mensaje de él pero nada, la casilla de mensajes estaba vacía. Arrojo el aparato con nervio a la cama y empezó a secarse el cabello.
 
Fue a la cocina sirviéndose un vaso de agua vaciándolo por completo y dejándolo sobre el lava platos. Caminaba a su habitación cuando escucho abrir la puerta y ser cerrada con torpeza.
 
-Maldición- mascullo Saeng
 
-Llegas tarde- dijo Hyun tomando por sorpresa al menor dándole un susto de muerte
 
-¡Hyun Joong! Me asustaste- le reclamo el más bajo siguiéndolo hacia su habitación, la de ambos hace ya un tiempo
 
-¿A dónde fuiste?- pregunto el castaño mientras acomodaba la ropa que había dejado tirada hace unos momentos
 
-Fui a cenar con Mi Young-
 
-Así que ahora los restaurantes cierran a las dos de la mañana- ironizo Hyun
 
-Es que caminamos un rato
 
-¿Tan tarde?- interrogaba
 
-Bueno es que…- intentaba explicar el más bajo hasta que cayó en cuenta que no tenía por qué hacerlo - ¡Espera! ¡Por que debería darte explicaciones, idiota!- dijo aumentando considerablemente el tono de voz irritando en sobremanera al mayor
 
-¡¡Young Saeng, a mí no me grites que no soy tu noviecita!!- grito Hyun Joong tomándolo de las muñecas para gritarle de frente mientras lo arrojaba con furia sobre la cama  - ¡¡Me tienes harto con tus escenitas!! ¡¡Odio que me levanten la voz!! – Seguía gritándole mientras agitaba las manos ajenas
 
-Hy Hyun- pronuncio con temor Young Saeng notando el enojo que provoco en el mayor  –Lo lamento- agrego tratando de remediar su error haciendo reaccionar al castaño que soltó sus muñecas
 
-Disculpa, Saeng- dijo apoyando una mano sobre la cama y con la otra refregando su rostro  –En serio lamento haberme enojado- decía mientras apoyaba sus manos entre el cuello y hombro del más bajo dejando escapar un pesado suspiro para poder relajar la tensión que tenía en esos momentos sin percatarse de las mil reacciones que provoco en Saeng al sentir su aliento rozar su cuello.
 
-Hyun- pronuncio al sentirse estremecer por dentro levantando sutilmente su cabeza para acercarse a los carnosos labios ajenos y rogar un apasionado beso
 
Sorprendido aprisiono los labios del más bajo entre los suyos, recorriendo con su experimentada lengua cada parte de ese cálido y sabroso lugar, tomo su espalda entre sus grandes manos y lo acomodo en la cama entre sus piernas, se apoyó sobre él  sin detener la unión entre ambos empezó a acariciar la suave y abultada mejilla descendiendo hacia su  blanco cuello. Chupaba con poca delicadeza los labios impropios hasta sentir como el menor intentaba alejarlo por la falta de aire
 
-Hy…-  susurraba apenas el pelinegro  –Hyun…- repetía buscando que lo soltara pero rogando que no lo hiciera a la vez  –Por fav…- no lograba pronunciar palabra por lo ardiente que se tornó el beso, solo fue liberado cuando el mayor también sintió la necesidad de aire. Se miraron por unos segundos  buscando explicaciones en los ojos ajenos mientras tomaban bocanadas de aire, sin decir una palabra Hyun Joong se acercó nuevamente al rostro de Saeng y este lo tomo por el cuello haciendo que el beso se hiciera más profundo buscando más contacto, esperando que esa deliciosa lengua recorriera más profundamente cada parte de él.
 
Terminaron el beso siendo unidos únicamente por el hilo de saliva que comenzaba en la boca de Saeng y terminaba en la de Hyun, el mayor observaba fijamente al menor suplicando que no saliera huyendo cuando ya tan ilusionado se encontraba su cuerpo.
 
-Hyun… yo. Mi Young…- pronunciaba paulatinamente buscando que el mayor entendiera  la situación en que se encontraba  –Soy su novio- expresó reflejando en sus ojos el arrepentimiento y dolor que lo invadía en esos momentos.
 
-Yo no te estoy pidiendo que la dejes- confesó impactando a quien tenía entre sus brazos.
 
Se acercó nuevamente devorando con gula esos rosados labios que no hizo esperar para responder y tratar de alcanzar el ritmo frenético del castaño.
 
Con movimientos agiles empezó a desabrochar botón a botón la camisa que llevaba puesta y la deslizo por sus brazos junto a la chaqueta que traía encima. Se afirmó sobre las piernas del más bajo y desabrocho velozmente el pantalón y los rodo por las blancas piernas de Young Saeng dejándolo solo en ropa interior. Notando la lujuria en los pequeños y rasgados ojos como a su vez la vergüenza. Sintió cierta ternura por esa mirada pero el calor que recorría en esos momentos por su cuerpo le impidió detenerse a meditar sobre ese tipo de cosas. Se acostó encima de ese delicado cuerpo y empezó a lamer de él
 
-Hyuhmm- suspiraba ante las caricias que le proporcionaban esas enormes manos y esa caliente lengua.  Lamia su pecho y caderas con especial entusiasmo liberando en esos instantes las muchas veces que había querido hacerlo, quería sentir y recobrar todo el deseo que sentía carcomer su cuerpo cuando solo podía verlo. Deseaba disfrutar cada parte de él para recordarla perfectamente porque tratándose de Saeng tal vez esta sería la primera y última vez que permitía que lo tocara de esa forma. Lo conocía perfectamente y sabía que las posibilidades de volver a tenerlo bajo él eran prácticamente nulas. Atravesó su cuerpo dejando un rastro húmedo en cada parte que beso y se dirigió a sus muslos, acariciando sus piernas y mordisqueando la parte interna de ellas, arrancando gemidos sonoros de la boca del menor.
 
 
 
 
 
 
 
Lo estaba haciendo conocer un placer hasta el momento ignorado, nunca en su vida había escuchado salir de su boca tales sonidos, era vergonzoso que Hyun, su disque amigo le estuviera haciendo pisar suelos inexplorados con tan solo unos besos. Cuando sintió como lamia sus muslos y sus manos acercándose peligrosamente a su trasero sintió ganas de huir, sabía que Hyun no se conformaría con manosear su cuerpo, no conocía cuales eran los límites del mayor y la sola idea de entregarle su pulcra entrada lo llenaba de pánico pero la duda de saber cómo sería lo excitaba aún más, si con solo el rosar de sus manos lo hacía estremecer por completo no podía imaginar el nivel de excitación que le haría sentir al tener la carne de Hyun Joong dentro suyo.
 
Levanto su rostro con la poca fuerza que tenía para lograr divisar a Hyun Joong cuando se alzó de la cama. Lo vio abrir su armario y de uno de sus cajones sacar una pequeña botella que contenía un líquido desconocido para él pero que supuso de que se trataba, lo vio pararse en la punta de la cama y quitarse la toalla que tenía alrededor de su cintura dejando al descubierto la única parte del mayor que no conocía. El mayor lo tomo de los tobillos abriendo delicadamente sus piernas para dejarlo a su total disposición, se hinco sobre él y beso gentilmente su mejilla
 
-Saeng, mantén la calma, no dolerá mucho si estas tranquilo- le dijo claramente para luego abrir el envase que tenía entre sus manos y esparcirlo en una de ellas, tomo una cantidad considerable y la puso sobre su ya erecto miembro, con lo que quedo aun sobre ella, se dirigió a la pequeña entrada de Saeng y con lentitud metió sus dos dedos buscando apurar la dilatación del menor, un chillido escapo de lo más profundo de Saeng quien tenía cada parte de su rostro fruncida, sus manos estaban fuertemente cerradas entre las sabanas buscando amainar el dolor que lo invadía sin percatarse el momento en que Hyun los quito con velocidad y los remplazo por su grueso y palpitante miembro, entrando en él de una vez mientras sostenía sus piernas con sus manos a sus costados, se acercó al colorado rostro del menor y lo beso apasionadamente para hacerlo olvidar del dolor que sentía. Se separó y tomo con más firmeza los muslos de Saeng para empezar a embestirlo lentamente, llegando a lo más profundo de él y rosando a la primera la parte dulce del menor quien no tardo en largar gemido tras gemido sin pudor alguno. Hyun Joong apuro el ritmo de sus embestidas siendo más brusco dejando escapar de sus labios sonidos guturales por el placer que recorría con abundancia  cada extremo de su cuerpo.
 
 
 
-AHM HYUN ¡AAH!- Exclamo Saeng cuando libero su esencia sobre el cuerpo de ambos, cayendo rendido sobre la cama siendo aún embestido por el mayor.
 
Solo bastaron un par de minutos para que sintiera el líquido de Hyun Joong recorrer sus paredes y escurrirse por su trasero. No supo si lamentar o agradecer la perdida cuando el castaño salió de él recostándose a su lado.
 
Entre sueños sintió ser cubierto por las sabanas y como Hyun Joong lo sentaba con cuidado minutos después para darle lo que supuso escuchar era un analgésico y hacerle beber agua.
 
Aun sintiendo a su cuerpo despojado de cualquier tipo de fuerza al igual que su mente no pudo evitar sentirse la persona más miserable en esos instantes por haber engañado de tal forma a la muchacha que había pedido ser su novia hacia unos pocos meses, no sabía que haría una vez que el sol apareciera pero por el momento solo quería dormir y reposar su cuerpo después de haberse dejado llevar por una de las más hermosas sensaciones: La lujuria

Amores De Revista [MinJun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora