Él

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Día 2

Hoy me desperté muy temprano, me levante de la cama y me fui directo a la cocina a preparar un desayuno para Andrea y los niños, cogí huevos, leche y harina para panqueques, claro esto era para los niños, para Andrea cogí verduras, mayonesa y un poco de pollo del refrigerador, le preparé su ensalada favorita acompañada con una taza de café caliente, cuando ellos llegaron al comedor el desayuno ya estaba servido, la cara de Andrea expresaba tanta felicidad que dentro de mi tenía un sentimiento que no sentía hace mucho, todos se sentaron a desayunar y platicar como una gran familia feliz, fue entonces cuando mi hijo Edgar entre platicas preguntó en donde me la pase la noche de ayer, que por qué no llegué temprano a casa, que su hermanita estaba triste esperándome, el comedor se llenó de silencio, Andrea se levantó de la mesa tomo su abrigo y le dijo a los niños que tomaran su mochila, ya era momento de ir a la escuela, en ese momento sentí que una gran oscuridad ocupaba todo mi espacio vital, me sentía mal, la soledad se encarnaba en mí, quedé estático mirando la mesa, los platos, todo dejado ahí a medio comer, sentía que todo mi mundo se me venía encima, la alarma de mi reloj sonó eran ya las 7:00 am tenía que ir al trabajo, agarré mi chaqueta, mis llaves y abordé mi auto y emprendí camino, estaba por la avenida 57 cuando mire por el retrovisor y la vi caminando, solitaria y tímidamente por la banqueta, hice sonar el claxon, ella volteo a ver y me sonrió, acerque el auto hacia donde ella estaba y le pregunté a donde iba, me respondió que iba a comprar unas cosas a un mercado que se encontraba a unas cuadras de ahí y que después iría a desayunar, me ofrecí a llevarla, al principio se negó, dijo que el mercadito estaba muy cerca, le insistí varias veces hasta que acepto, cuando llegamos, ella bajo y me agradeció con un beso en la mejilla , fue en ese momento cuando me di cuenta que existía algo más que atracción hacia ella, tartamudee un poco de nuevo y le dije que si quería que la acompañara, me miro graciosamente y sin pensarlo me dijo que si, pasamos casi una hora platicando, caminando y escogiendo lo que compraría, cuando al fin ya tenía todo lo que iba a comprar en su bolso, le ofrecí una invitación a desayunar, le dije que no aceptaría un no por respuesta, así que con un suspiro me dijo que estaba bien, que aceptaba mi , desayunamos en un Burger King, me dijo que le encantaban esas hamburguesas, de repente mire mi reloj, eran las 10 de mañana, hacia 2 horas que debí de entrar a la oficina, lo pase por alto, lo que importaba en ese momento era estar con ella, después de desayunar me pidió que la llevara a casa, lo hice, vive por casa de mi amigo Armando en la colonia residencial, que inquietante, casi toda una vida yendo a esa colonia y jamás la había visto, de nuevo al bajar del auto se despidió con un beso en la mejilla, sentía que viajaba en al espacio cuando eso pasaba, de repente una llamada de Andrea me sorprendió, me decía que en donde estaba, las llamadas del trabajo a mi casa llegaban más rápido que un rayo, me puse nervioso y le tuve que mentir diciéndole que estaba en el hospital porque me había dado un bajón de presión y me desmaye en media calle, rápido acelere el auto y llegue a casa, como siempre mi señora esposa no me dirigía ni una sola palabra, entre al baño y tome una ducha, estaba poniendo muy en claro mis ideas, no sabía que pasaba dentro de mí, por un lado estaba ese amor eterno que le prometí a mi esposa y que hasta ahora no he dejado de sentir, y por otro estaban los sentimientos que empezaban a surgir hacia esa bella joven.

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