▬FEAR-TECH: EVOLUCIÓN ▬PARTE 2.

CAPITULO IX "CAMBIAR AL MUNDO"

Desperté solo para hacer lo mismo que había estado haciendo los últimos días... 

meterme al baño, ducharme, cepillar mis perfectos dientes... arreglarme la barba... 

supe que estaba volviéndome loco cuando pensé en como se vería mi cabello color azul... hoy no tengo ganas de pelear con nadie, así que espero, Page no esté de molestona... 

salgo de la habitación aún con el cabello escurriendo, hace demasiado calor para mi gusto, y creo que mi temperatura aumenta cuando miro a Page en shorts negros cortos y una camiseta sport del mismo color... 

ufff... 

estaba demasiado seria, eso no me gustaba para nada, a lo mejor me había vendido ya con los terroristas y se estaba arrepintiendo como Judas...

- buenos días Marck...

me dice seria, hasta cierto punto indiferente, oye muñeca, me toca responder así a mi... no a ti....

- buenos... días... 

miraba por la ventana, nerviosa. 

- Page necesito ir a ver al Dr. Oregon al Centro... 

- de acuerdo.

dijo sin dejar de mirar a la ventana... 

¿ella dijo "de acuerdo"?

si, lo dijo...

- bien, comeré algo y después nos iremos...

- claro... 

odio sus respuestas cortas...

pongo los ojos en blanco...

ok! odio que me esté ignorando...

me dirijo al comedor y la miro, su mano tiembla... toda ella ligeramente tiembla...

escucho su corazón... está acelerada... 

- ¿Page?

- ¿si?

- ven... 

- desayuna tu... 

- ¿ya desayunaste tu?

- ya...

- no es cierto... 

escucho su estomago gruñir hasta acá... 

- ¿de cuando acá te importa?

auch, muerte a mi yo amable del año. 

suspiro... algo le pasa... 

ella no es así...

desayuno mis 3000 calorías sin quitarle la mirada de encima... ¿que le pasa? ¿se estará volviendo loca?

suspiro de nuevo... 

vuelvo a mi habitación una vez que he terminado, me visto con algo más formal y Oregon tiene razón, mis piernas se están poniendo tan anchas como si hubiera corrido un maratón... miro mis tobillos y frunzo el ceño... 

jamás me he puesto de pie, por más que me insistieron en que, con ortopédicos podría levantarme, jamás acepté ese tipo de terapias... 

pero mis tobillos parecen algo diferentes, doy el rutinario masaje a mis pies y piernas... me estiro... 

incluso los espasmos han desaparecido... 

vuelvo a la silla de ruedas con mucha facilidad y miro mis brazos... 

me miro en el espejo... 

mis músculos son demasiado grandes ahora... 

encojo los hombros y me digno a salir de la habitación...