You Could Be Mine

Ya no puedo soportarlo más. He desperdiciado tiempo y dinero que nunca volveré a recuperar. Debo dejar de llevarme por una simple cara bonita, el sexo y demás, pues cada vez que bajo la guardia una chica nueva aparece.

***

Me encuentro en su departamento, pues hoy, más que otros días, tengo ganas de ella.
Estoy abrazándole por detrás, besando su cuello perfumado de vainilla, combinado con el amargo olor de tabaco. Es algo dulce, tierno, con verdadero amor por primera vez en nuestras vidas. No es algo que ella lo haga por conseguir caprichos, no, ahora lo hace en verdad, y lo sé porque sus gemidos son dulces y suaves, no forzados como en ocasiones anteriores. Aunque, joder, aún así me gustaba cómo sus gritos de placer se escuchaban por toda la casa, llamándome, pidiéndome más y más... Para después aprovecharse de mi para que le compre algo.

Pero tú pones mi mente aliviada...

Se recuesta en la cama, en frente mío, sus mejillas estallaban en carmín, despeinada, demacrada aún en ropa interior. Yo estaba de pie, sin camisa, con el pantalón aún puesto, sudoroso y hundido en el libido sexual de ese momento. Desabrocho mi pantalón, se siente ajustado.

Abre las piernas ligeramente, lista para terminar todo de una vez. Me molesta un poco verla con su ropa interior aún, no puedo apreciarla bien, admirar su belleza femenina que me ha vuelto loco. Opto por quitarle ese sujetador que tenía enjaulados sus lindos senos, perfectos, jóvenes. Después sus bragas, tan cálidas de encaje negro y un listón rosa, estaban húmedas.

Si no puedo tenerte ahora mismo...

Coloco mis labios encima de los de ella, mientras que la voy penetrando despacio, sin prisa.

-Izzy... -jadeaba- M-Me gustas m-mucho

-Tú a mí, igual amor...

Amor, hazlo lentamente, y vendremos juntos...

De un momento dulce pasó a uno cada vez más rápido, soltando un gemido espontáneo, jadeando los dos, adoptando en nuestros cuerpos una apariencia amorfa, moviendo cada extremidad como un tentáculo, llenos de placer...

Nos recostamos en la cama, uno abrazado junto al otro, ella recostada en mi pecho. Le acaricio el rostro, retirando algunos mechones de cabello que cubren esa preciosa imagen de Venus. Estuvo bien hoy, yo sé que ella me quiere, sólo necesitamos un poco de paciencia. Todo toma algo de paciencia. Sólo un poco de paciencia.

Es todo lo que necesitas.

***

Me dirijo junto con Michael (Duff) al departamento de Ángela, pues me había citado para algo importante.

-¿Qué crees que te diga?

-No lo sé, debo tener la mente abierta por cualquier cosa.

-¿Y si es lesbiana? ¿Y si está embarazada? Viejo, si la embarazas ya es tu problema. -hace una pausa y se pone pensativo - Aunque estaría bien, porque los bebés atraen más chicas.

-No te dejaré utilizar a mi hijo para tus planes depravados. -le di un golpecito en el hombro en broma, pues tener un hijo ahora es lo que menos quiero.
-Además, no creo que esté preñada, pues la última vez que lo hicimos fue en la bodega y lo interrumpí. Si no me crees, pregúntale a Slash lo que sucedió.