Ven entrégame tu amor.

Capitulo 31

Horacio: -cuando aun me estaba recomponiendo, Andrea vuelve a soltarme otra cachetada igual de fuerte, me insulto y me dijo "como te atreviste hacerle esto a Samuel", reí de manera cínica, parece que ya se entero de lo que le mande hacer a su obrero mugroso

Andrea: y todavía te ríes, eres un patán –estaba tan llena de furia, que cuando lo veo que se está riendo, me enojo aun más queriéndolo golpear

Horacio: mi amor me puedes explicar qué te pasa, porque me pegas de esa manera –eso y más te mereces por rechazarme Andrea y eso que apenas está empezando este juego

Andrea: NO ME DIJAS MI AMOR-grite tan fuerte que la verdad no me importo si nos escuchaban- no soy nada tuyo entiéndelo y por una vez se hombre en tu vida ya acepta lo que hiciste

Horacio: PUES SI YO MANDE A GOLPEAR A ESE IDIOTA –si quería gritar pues yo también sabía hacerlo muy bien-es lo que querías escuchar pues ahí esta yo mande a golpear a ese obrero de cuarta, lástima que no estaba ahí para ver como lo dejaban inconsciente. Y si, si lo eres que no se te olvide que eres ¡MI ESPOSA! Andrea que no se te olvide nunca

Andrea: eres tan cobarde que hacia lo tenias que hacer. Lamentablemente no olvido, no sabes cuánto me arrepiento de haber tomado esa decisión. Ahora lo estoy pagando muy caro

Horacio: me importa un bledo si ahora te arrepientes o no –me fui acercando a esta ella- tú eres mi mujer

Andrea: no. No soy tu mujer Horacio solamente nos une un papel. –Dije alejándome de él- dime Horacio porque lo hiciste, solo porque me negué ir contigo a ese viaje

Horacio: -volví avanzar hacia ella, ella iba retrocediendo hasta que topo con la puerta, en eso la encerré con mis brazos para evitarle el paso- que bien me conoces mi amor, obviamente hice eso para que te decidieras ir conmigo a ese viaje. Así que siempre si te animas a ir conmigo o que tendré que hacer para demostrarte que me muero porque vayas conmigo

Andrea: -vi como avanzaba hacia a mí, yo camine hacia tras pero ya no pude porque tope con la puerta, alzo sus brazos pasándolos, poniéndolos uno a cada lado mío, el muy sínico que, que tendría que hacer para que aceptara ir a ese viaje con él, aunque ya sabía a lo que se refería con eso. Sabía que era capaz de volver hacerle daño a Samuel, y eso jamás me lo perdonaría- no tendrás que hacer nada Horacio, iré contigo a ese viaje –solo vi como se le formaba un gran sonrisa en su rostro

Horacio: muy buena elección querida –tome su barbilla y me acerque a darle un beso rápido- todo hubiera sido tan distinto si hubieras aceptado desde el principio

Andrea: ­-me limpie los labios después del beso que me dio, sorpresivamente- si pero eres tan poco hombre que tuviste que mandar a golpear a Samuel –dije mientras lo empujaba no aguantaba ni un segundo tenerlo cerca

Horacio: nadie tienes pruebas de eso, mi amor. No hay que me relacione con la golpiza que le dieron al estúpido de tu amante. Y no creo que seas tan tonta de irme a denunciar por eso verdad, que dirían las amistades de tu madre cuando se enteren que sostienes un romance fuera de tu matrimonio -me volví acercar al escritorio recargándome en el

Andrea: -aunque me cueste aceptarlo el muy idiota tiene razón no puedo permitir que esto llegue a oídos de mi madre- eres un desgraciado –dije para después salir de ahí

Horacio: -solo reí mas fuerte- amorcito que no se te olvide que salimos este viernes de viaje, no me quiero arriesgar a que cambies de opinión –dije antes de verla salir- no te pudo haber salido mejor Horacio, tienes al imbécil de Samuel todo golpeado y Andrea acepto ir contigo a ese viaje, ahora que se que tu punto débil es el idiota de Samuel no dudare en usarlo para cumplas lo que yo quiero Andreita

Pasaron varios días ya era martes, solo tres días más y me iría de viaje con el estúpido de Horacio, le preguntaba a donde iríamos pero solo me decía que no tenia porque enterarme ya que era una sorpresa y no quería que nada lo arruinara. Ya no pude ir a ver a Samuel, solo me enteraba por Irina que se iba recuperando de a poco y que visito al doctor para descartar que el golpe en la cabeza no fuera nada grave me dio tanto gusto saber que se encuentra bien. Baje a desayunar, Horacio como los últimos días salía muy temprano y volvía demasiado tarde, pero mejor para mi entra más lejos lo tuviera mejor

Cayetana: buenos días hijas, como estas

Andrea: bien mami, hola hermanas

S-I: buenos días hermana

Andrea: -solo estábamos nosotras se me hizo raro no ver al abuelo- y el abuelo mamá

Cayetana: salió al jardín a leer un poco, pero bueno quiero aprovechar para decirles que hoy tendremos una cena, como recordaran ya pronto será la carrera benéfica que hacemos, y esta noche vendrán los accionistas del hipódromo y algunos inversionistas. Así que las quiero más guapas de lo que ya están.

Irina: que bien ya hacía falta algo para distraerse después de tantos problemas

Sofía: en eso tienes razón güera, oye mamá y podemos invitar a nuestros hombres a la cena

Cayetana: por supuesto hija, ellos están más que invitados

Irina: y Samuel también puede venir –voltee a ver a Andrea de manera culpable – dijo él es el presidente del banco de Houston, sería bueno que estuviera aquí, o no Andrea

Andrea: -hay Irina, siempre haciendo tus comentarios de mas- este sí, no sería mala idea –dije tratando se sonar lo más calmada posible, aunque por dentro brincaba de la alegría por volverlo a ver

Cayetana: obvio hija, que Samuel esta más que invitado, sus hermanos estarán aquí y los más indicado seria que el también nos acompañara. Por cierto hija –dije volteando hacia Andrea- también para que le avises a Horacio de la cena últimamente ya no lo veo por aquí, pasa algo entre ustedes

Andrea: no mamá, todo está bien entre Horacio y yo, no te preocupes que yo misma me encargo de avisarle de la cena, pero bueno ahora me tengo que ir tengo que arreglar con Pablo unos asuntos –me despedí y salí hacia las caballerizas

Ya llevo varios días saliendo de la casa, desde antes que Andrea despertara la verdad, solo me lastimaba cada vez que nos poníamos a discutir ya que siempre el tema de discusión era Samuel Gallardo, sé que no me portado del todo bien con ella pero no puedo evitarlo y la única manera de no sentir si rechazo es tratándola de esa forma. Tome el coche y me dirigí hacia la ciudad empecé a caminar por lugar muy poco transitado, pase por enfrente de un hotel cuando oí que alguien gritaba "taxi taxi" voltee hacia un lado pero de repente sentí que alguien choco conmigo, enseguida me levante para ayudarla era una mujer

Horacio: disculpe no la vi, -dije mientras ayudaba a levantarla, pero cuando la vi no podía creerlo

###: Horacio ¿eres tú?