Como Cenicienta (Louis Tomlinson)

-Capítulo 4-

Louis me iba a quitar el antifaz cuando... mi móvil comenzó a sonar. Louis asustado, apartó las manos de mi antifaz.

-No, ahora no...-decía yo, deseando que el tiempo se parara.

-¿Ocurre algo?

-Me-me tengo que ir. Lo siento mucho.

-¿Tienes una cita?-preguntó él.

-Algo así. Me lo he pasado genial, pero tengo que irme ya. Lo siento.

-Pero...-me fui corriendo a buscar a Niall en el interior, teníamos que irnos. Como me imaginaba, estaba junto a la comida.

-¡Niall! ¡Tenemos que irnos!-le grité, ya que con la música no se oía mucho.

-Pero tengo hambre...

-¡Ya! ¡Ahora me da igual que tengas hambre!-le grité.

-Está bien, vámonos. 

En ese momento, una de las profesoras estaba anunciando a los reyes del baile.

-Y los reyes son... el príncipe azul y ¡Cenicienta!-claramente Cenicienta era yo, pero me daba igual, tenía que irme.-Vaya, parece que Cenicienta se está yendo del baile...-y eso hicimos, fuimos corriendo al coche, de camino a la cafetería. 

En el baile...

Vi a la chicaPrinceton marcharse y decidí y ir tras de ella. Pero cuando salí ya se había marchado. Era inútil, nunca sabría quien era. Pero entonces vi una cosa en el suelo. Un móvil. Pero no uno cualquiera, el suyo. Se le habría caído al irse. Esto me dio esperanza y una idea para saber quien es Cenicienta. No pensaba perderla ahora que la había encontrado. Y menos ahora, que tengo muchísimas ganas de saber quien es. Lo averiguaré, estoy seguro.

Mientras, ____ y Niall...

-No me lo puedo creer ____, ¡Louis Tomlinson es tu príncipe!-me gritó Niall.

-Shh, baja la voz. Nadie se puede enterar.

-¿Y esa bobada a qué viene? 

-Porque vivo en un desván y soy camarera y él se cree que soy la Barbie Malibú. Esto nunca funcionaría.

-Pero eso nunca lo sabrás si no lo intentas...

-Bueno, no te preocupes, mañana se habrá olvidado de mí. Ahora conduce rápido, tenemos que llegar antes que Caroline.

Entré en la cafetería por una puerta trasera, a la que solo se salía a tirar la basura. Al entrar, vi a Caroline ya allí, Liam y los demás la estaban intentando distraer. Me puse una gorra escondiendo mi peinado y un delantal, me eché un poco de harina por la cara y me metí en la cocina.

-Cuando la pillé... Se va a enterar esa mocosa de ___...

-¡Comida lista!-Dije asomándome por la barra, dejando a todos más confusos que nunca.

-¿____? ¿Qué haces ahí?-me preguntó Caroline.

-Aprendo a cocinar.-se hizo unos segundos de silencio-¿qué tal el baile chicas?-Mis hermanastras me miraron enfadadas.

-Aquí hay gato encerrado...-dijo Caroline-niñas, nos vamos.-Caroline y las gemelas se fueron para casa, al salir por la puerta todos dimos un respiro.

-¿Cómo has hecho eso?-me preguntó Liam.

-Le he pedido a Niall que viniésemos a toda pastilla, casi se carga el coche y yo casi me mato al entrar con la basura, pero aquí estoy.

-Pues menos mal, Caroline iba a matarte. Bueno, a ti y a mí, por cubrirte.

-Gracias a todos. Se puede decir que hemos vivido un poco al límite hoy.-reímos-anda Liam, vámonos ya. 

A la mañana siguiente, ya en el instituto...

-No me puedo creer que no se lo dijeras-me decía Liam, ya que le acababa de contar toda la historia que le conté a Niall ayer.-¡Era tu oportunidad!

-Eso la dije yo, pero ya sabes como es ella, cabezota a más no poder, ¿me equivoco, ____?-me preguntó Niall. Odio cuando estos dos se ponen de acuerdo.

-No es justo, sois dos contra uno.-ellos me hicieron burla.-Parad ya. Además, seguro que él ya se ha olvidado de Cenicienta.-dije abriendo la puerta principal del instituto.-¡Ah!-di un gritito de sorpresa, ya que lo que ví ahí dentro no me lo esperaba. El instituto estaba lleno de cartelitos con la frase de ¿has visto a Cenicienta? Y el contorno del peinado que llevaba con un gran signo de ? en la cara misteriosa. Y cuando digo que estaba lleno, no exagero: en los corchos, taquillas, ventanas... ¿No se ha olvidado de mí? Como si hubiera pronunciado esta pregunta en voz alta, Niall me contestó.

-Vaya, definitivamente parece que se ha olvidado de ti-maldito karma. 

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-¿No te parece un poco excesivo todo esto por una chica que ni conoces?-preguntaba Harry.

-Tú no lo entiendes, Hazz. Esa chica es importante para mí, además, ella me escucha.-respondió Louis.

-Yo también te escu... ¡wow, menudo bombón!-dijo Harry, piropeando una chica que pasaba por ahí.

-Si, desde luego eres un gran amigo-le di un golpe en el brazo.

-Bueno, al menos tienes su móvil-me dijo Zayn.

-No paran de llegar mensajes diciendo te necesito, ven ahora mismo...

-¡Menuda leona!-dijeron mis amigos.

-Eso fue lo que pensé, hasta que llegó uno en el que ponía arreglar la tostadora y comprar lavadora nueva.

-¡Es una cachonda!-gritó Harry.

-¿Perdón?

-Sí, se quiere quedar contigo. Esa chica es mi ídola.

-Seguro, lo que tú digas big guy.-Harry puso cara molesta a Louis.

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-No te puedes esconder siempre, ____. Él se acabará enterando.

-Siempre no, solo hasta que se acabe el curso y no tenga que verle más, con eso es suficiente.

-Ay, mujeres-suspiró Niall.

En ese momento, Louis pasó por mi lado. Y aunque solo fuera por una milésima de segundo, su mirada se cruzó con la mía, dejándome atontada con sus ojos azules. Y digo atontada porque me di un golpe con una taquilla que estaba abierta.

-¡Au!

-¿Estás bien?-me preguntó Liam.

-Oh, claro que sí Liam. Perfectamente.-Ay, hombres.