Doce:
El resfriado se había ido hace dos días, igual que yo. Había regresado a Los Ángeles para seguir con el álbum y Dylan estaba en Anaheim para otro partido.
-Eso suena deprimente-Steff entró a mi habitación con una caja de pizza en una mano y té frío en la otra.
-Estaba experimentado-dejé la guitarra en el suelo.
-Sonaba a funeral-dejo la caja de pizza en la cama y el té en la mesita de noche.
-Wow, no tienes idea de cuanto me motiva eso.
-¿Qué pasa por tu mente Marine?-Steff se sentó a mi lado en el suelo-Te notó distante.
Suspire y mire mis manos-Estoy pensando en volver-admití.
-¿Volver?-Steff sonaba sorprendido, sinceramente, yo también lo estaba.
-Llevó casi cinco años evitándolo, creo que es hora de afrontarlo-me encogí de hombros.
-¿Qué te hizo cambiar de idea?
-¿Sinceramente? No lo se-admití.
-¿Tal vez? No lo se ¿Tal vez alguien de ojos azules y cabello rubio tiene que ver?
-¿El idiota?-me reí y negué-Dios no.
-¿Le has contado?
-No estamos saliendo.
-No te pregunte si salían.
-No-respondí sería-No se lo contaría a cualquiera que pueda aprovechar la información y venderla a la prensa, no al menos con un secreto que he guardado por tanto tiempo.
-¿Y qué le contarías?
-Definitivamente no algo que pudiera hacerme ver vulnerable a su lado.
-De acuerdo-Steff se puso de pie-Saldré, la comida esta aquí-besó mi frente y salió de mi habitación.
Jugué con mi collar, después de que despertará aquella tarde, Dylan se había marchado y me había evitado hasta que me fui, no tenía idea de lo que tenía ese chico, pero era bastante raro a mi parecer.
Ian y Hunter me preguntaron repetidas veces si había dicho algo que lo hiciera enojar, mientras que yo me dedicaba a decirles que no.
Tomé el control de la televisión y puse el canal donde pasaban los deportes, era la primera vez que lo veía por voluntad propia. Me puse de pie y abrí la caja de pizza para sentarme en mi cama y ver el partido, el cuál ya llevaba diez minutos.
-Y se la pasa a Collins y se la pasa a Springs y ¡Anota!-grito el locutor-Que buenos partidos ha dado Dylan Springs esta temporada, el chico esta de regreso.
-Ni que lo digas Tom, parece que el descanso le dio energías renovadas y ahora es imparable.
-Podemos notar una gran diferencia con la temporada pasada, en esta se le ve más concentrado incluso podría decir que más feliz.
-Tienes razón Tom, las pequeñas sonrisas por parte del chico han regresado.
-Oh no Jason, al parecer el número siete de los patos intenta obtener una reacción por parte de Springs-la cámara enfocó como estrellaba a Dylan contra la barrera, pude notar como Dylan comenzaba a tensar los hombros-Esta es la segunda vez que hace eso.
-Es una buena técnica, intenta hacer que expulsen al numero nueve.
Deseé estar ahí para poder ver la expresión en la cara de Dylan o al menos poder hacer algo, me sentía impotente, no podían expulsarlo, estaba trabajando demasiado duro.
Hunter ayudó a Dylan a ponerse de pie y le murmuro algo, a lo que Dylan negó con la cabeza.
-¡La tensión comienza a notarse!
El coach le reclamó algo al arbitro a lo cual este negó y señalo a Dylan mientras se encogía de hombros.
Volvieron a ponerse en posición y en menos de cinco minutos, Dylan volvía a estar contra el hielo. Esta vez Ian lo ayudó a levantarse y le murmuro algo a lo que Dylan asintió, después Ian negó y volvió a decirle algo.
-Bueno, al menos el casco le protege el rostro. Porque estoy seguro de que muchas chicas quieren asesinar al número 7 ahora mismo.
El medio tiempo llegó y pude notar a Dylan realmente molesto, tal vez fue la manera en la que lanzó el casco o los hombros tensos o como comenzó a gritarle a Ian, pero estaba segura de que todo el mundo podía ver lo molesto que estaba.
-No luce muy feliz-concordaba con los locutores-Tal vez lo mejor sería darle un descanso o esto podría terminar en expulsión-negué como si Dylan pudiera verme y hacerme caso.
Mordí mis uñas cuando el segundo tiempo comenzó, Dylan no lucía menos relajado y eso me preocupaba.
-No lo arruines-susurre-No ahora-Dylan volvió al hielo y esta vez se levantó solo-Vamos Dylan no he estado en tus estúpidos partidos para que ahora mismo lo arruines.
-¿Marine?-me quedé callada cuando Steff entró a mi habitación y me miro confundido-¿Con quién hablas?
-Yo veía el partido-baje el volumen de la televisión.
-¿Tú? ¿Viendo deportes?
Me encogí de hombros-Se un poco.
Steff rió y se sentó a mi lado en la cama-¿Qué número tiene tu novio?
-El nueve y no es mi novio.
-Claro y tú siempre ves deportes por diversión, sigue diciéndote eso Marine.
Deje de ver el partido y mire a Steff-Supongo que intentó mantener mi distancia porque él merece algo mejor.
-¿Eso quiere decir que te gusta?
-Tampoco me resulta desagradable o indiferente-admití-Pero simplemente no está listo.
-¿Por qué no dejas que él lo decida?
-Porque lo único que hago bien aparte de la música es huir Steff, por eso.
-Ugh, ¿Sigues con esa idea?-Steff me miró cansado.
-No estaré mucho en Los Ángeles después de que terminé el álbum.
-¿Enserio Marine? No me molesta que vivas conmigo.
-Hawaii luce como un buen lugar para relajarse, nunca he ido a Hawaii ¿Tú si? En las fotos luce hermoso.
-Y después de Hawaii.
-No lo se, a donde el destino me lleve.
-Tú no crees en el destino.
Mire a la televisión y sonreí-Conozco a alguien que es un firme creyente.
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City Of Angels ✔️
Roman pour AdolescentsLos deportes y la música no van juntos. Cuando sus mundos se encuentran, todo cambiará. Ella necesita nueva música y él necesita llevar a su equipo a la victoria. ¿Será la música lo único que la mantendrá a su lado o podrá ser más que eso?