Al despertar, sentí un cuerpo junto al mío duro que me rodeaba abrí los ojos y el me observaba a mí y a nuestro bebé que dormía en su pecho donde mi cabeza descansaba, me senté en la cama, le quite a mi bebé de su pecho, mi niño ni se inmuto. Era ya de tarde tenía hambre, me miro y me beso dulce mente en los labios.
Le di una bofetada, el me miro y me abrazo con fuerza, y me volvió a besar y yo me transforme en lobo y le arranque la cabeza de un solo mordisco, luego me convertí en hombre y llore un buen rato, hasta que Cayo entro y ordeno que lo sacaran y que Carlisle lo ayudara, me abrazo un buen rato.
Paso otro día no quería oírlo pero era necesario para dejar en claro lo que a un siento por él, sé que aun en mi corazón hay amor por el maldito pero si pienso en perdonarlo lo are sufrir otra sesión de tortura por parte de Jane será bueno para que entienda que de aquí no me voy y que si quiere mi perdón le costar trabajo tal vez yo mismo le arranque de nuevo la cabeza o lo desmembré pieza por pieza para que aprenda, eso es muy doloroso y más cuando te vuelven a armar escomo si te convirtieran de nuevo el dolor te dura un mes más o menos jajá. Es una forma de torturar que mí querido tío abuelo Cayo – como sé autonombro – desarrollo para los traidores y luego los quemaba que el dolor físico no cura el alma del alguien que te dio todo y tú lo destruiste.
- Siento mucho interrumpir – dijo Gina apenada sacándome de mis cavilaciones – pero ya debes de tener hambre son las síes de la tarde y Aro no quiere que te pase algo lamento mucho lo de la chica pero estaba bien loca –se acercó no me dejo levantarme de la cama puso una bandeja con mi comida, en mi regazo mi bebé abrió los ojos siguiendo el olor se puso a sollozar tome su manita una imagen de su biberón en su boca me llego a mí cabeza.
- ¿tienes hambre verdad?, ya voy amorcito - le dije dándole un beso en la frente, me miro acomodándose en mis brazos.
- Yo voy por su comida tu come te debes de recuperar y
- tú y yo tenemos mucho de qué hablar señor Cullen – me dijo el me quede sin entender de verdad lo que dijo como que señor Cullen no, eso no puede ser. Se le veía mal traía una mueca de dolor y le costaba trabajo caminar sus ojos no tenían brillo y tenía unas ojeras que dios daba pena lo juro, mi corazón se encogió al verlo – yo no merezco tu perdón pero lo voy a conseguir te amo lo juro te he amado desde el primer día que te vi solo que muy idiota no me di cuenta de eso yo... yo sé que te hice mucho daño pero me ganare tu perdón como sea, solo quiero estar a su lado verlo crecer que me diga papá y que tú me digas que me amas tanto como yo
Tome un poco de pasta mi bebé comenzó con los balbuceos y lloriqueos le sonreí y seguí comiendo con un poco de pena, Edward llego con su biberón con su leche con un poco de sangre, se la di mientras yo comía, mi hijo comía con ahínco, lo mire feliz comiendo en mis brazos, solo lo mire era perfecto maravilloso era mi todo desde que oí su corazón por vez primera y luego al sentir sus pataditas ya era suyo y él mío solo mío y de nadie más y ahora viene su padre ¿ para qué? Para lastimarme más de lo que ya hizo no eso no por mi hijo soy capaz de todo. Hasta de irme de aquí de nunca más regresar al lado de él.
Se terminó su comida y comenzó a lanzar pataditas y moverse en mis brazos deje mi comida para atender a mí hijo...
- Dámelo para que comas – me ordenó Gina – oh que lindo bebé
- ¿Qué paso con ella? – le pregunte sin pronunciar su nombre – dime que no está muerta quiero hablar con ella, me tiene que aclarar algunas cosas y tú ya vete de mi cuarto y de mi vida ¿no es eso lo que tu querías? Pues ya lo tienes ¿no? ¿A qué demonios bienes eh que más quieres de mí si todo te lo di? Porque a mi hijo óyelo bien nunca lo tendrás, es mío solo mío tú me echaste de tu vida como perro ¿no? Billy es mío y tú ya no cabes en mí vida vete con tu homicida o lo que sea, ya no más Edward Cullen, el estúpido de Jacob Black ese que engañaste, usaste y tiraste cuando ya no te serbia, ese se murió ahí en esa cama donde cada noche esperaba a que tu cambiaras, a que recapacitaras. A que me amaras tanto como yo lo hacía, pero no eso no pasó ¿verdad? Te fuiste con ella, o más bien dicho el pobre lobo huérfano y sin familia porque mis hermanas me odian, fui como decirlo el premio de consolación para el pobre vampiro cuernudo.
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BELLO ROMANCE
VampireDespués de la muerte de su padre Jacob Black es llevado a vivir con el mejor amigo de sus padre, donde ambos se aran compañía, hasta que la hija de este llegue a vivir con su padre un año después que Jacob y con esto una rivalidad amorosa surgirá po...