Dangerous Criminal Love •LarryStylinson•

CAPÍTULO 17

NIALL

Estoy preocupado, son las 4:30 y acabo de salir del consultorio con mi padre, vamos camino a mi casa. El doctor dice que está bien, dentro de lo que cabe; pero que si vuelve a tener un susto como el pasado no sabremos que pase, su corazón es muy débil.

Y no sé cómo impedirlo, bueno sí, pero no tengo cómo hacerlo, tengo que acabar con esta pesadilla que viene tras de mí desde hace un año...

He hablado con ellos, pero no me creen, no me creen que les voy a dar lo que quieren, muchas veces he pensado en pedir ayuda a Harry o a Mary, pero desisto porque ellos ya han hecho muchísimas cosas por mi, y esto sería meterlos en problemas, definitivamente no puedo. No sé que hacer, no quiero perder a mi padre, él es la única familia que me queda, y que me lo quiten no sé si lo soportaría, bueno... También está Greg, pero a él no lo veo tan seguido. Necesito conseguir ese dinero cueste lo que cueste.

Llegamos a mi casa y mi padre se fue a ver la televisión y yo subí a mi recámara para alistarme, tengo que estar presentable para Gemma.

Salí de la ducha y me vestí con unos pantalones de mezclilla azules, mis supra blancos, y una playera blanca, casual. Tome la secadora y me hice mi flequillo hacia arriba, vi el reloj y ya eran 5:36 hacia diez minutos al parque, ya era tarde, coloque loción en mi cuello, un poco en mi ropa y salí, le dije a mi papá que llegaría un poco tarde, tome un taxi, quería llegar antes que ella.

Cuando llegue aún faltaban diez minutos para las seis, me quedé en la entrada del parque para verla llegar, me senté en una banca y observaba la gente que se encontraba ahí, parejas tomadas de la mano, niños jugando en los columpios, ancianos alimentando a las palomas, sus vidas se veían felices, a simple vista, claro. Porque todos escondemos un secreto y el mío es muy feo, yo quisiera desaparecerlo y acabar con el de una vez por todas pero no puedo. Veía a la gente pasar y me sorprendí cuando mis ojos se percataron de algo.

— ¡Oh por Dios! — Achine mis ojos para lograr tener una mejor visión y sí, estaba en lo correcto, no lo podía creer. Mary y Alex sentados tomando café con las manos entrelazadas ¿Qué clase de brujería le hicieron a Mary? Ella lo odia, o al menos eso nos hizo creer, siempre lo rechaza ¿Y en serio están tomados de la mano riéndose y platicando como si nada? ¡Woah! Esto sí que es una sorpresa.

—¡Hola guapo! — Llegó Gemm y me dio un beso en la mejilla. — ¿Cómo estás? — Frunció el ceño. —¿Qué tanto miras?

— Hola Gemm, bien gracias. Mira. —Señale a la banca donde están mis amigos. —Es Mary, con... Alex.

— Oh, el novio de Mary es muy guapo. 

Voltee a verla arqueando una ceja. —¿Perdón? —Soltó una risita.

— ¿Qué? Soy sincera, es guapo. —Torcí los ojos. — ¿Es su novio?

— No lo sé, ella es muy rara, según yo, lo odia, es por eso que me sorprende, en la escuela siempre se la pasa rechazándolo.

— Ay Mary... Siempre dándose a desear. Pero dejemos de hablar de ellos. —Se levantó frente a mí y me extendió su mano. — Vamos por un frappe, ¿Sí? Pero yo pago. —Advirtió.

— Gemma... Sabes que no me gust...

— Gemma nada. –Me interrumpió. — Yo te invite, yo pago. –Miró su mano. —¿Vas a tomarla y venir conmigo? 

—Tu ganas. —No podía negarle nada.

Caminamos tomados de la mano hasta la cafetería que estaba al centro del parque, se sentía tan bien estar a su lado, íbamos en silencio, pero no era incómodo.