This love is killing me. [Tercera parte] (Eunhae + otros)

Capítulo 6. "No quiero ser como ella" (Faith)

Capítulo 6. "No quiero ser como ella" (Faith)

Tenía la completa atención de Nathan y lo sabía. De algún modo, sentía su mirada a lo lejos, mientras yo estaba sentada sobre la tabla, flotando sobre el agua. Entonces, mi amigo Pol, el que estaba algo colado por mi hermana, se acercó con su tabla y se paró a mi lado, sujetándose a mi pierna.

Me llevaba genial con él, bueno, con todos la verdad, siempre me cuidaban y al mismo tiempo me hacían sentir una más, era agradable pese a que eran mayores que yo. Era la más joven.

-¿Puedes conseguirme una cita con Hope?-inquirió.

Rodé los ojos y negué.

-No pienso obligarla a nada.

-Venga, porfa... No es obligarla, es convencerla. Sabes que soy un buen tío, no voy a hacerle nada malo.-puso carita de niño bueno.

-Ni de broma, precisamente porque te conozco.

-¡Eh!-se quejó.

Se me escapó una carcajada y él empezó a hacerme cosquillas, haciéndome tambalear, perdiendo el equilibrio.

-¡Para! ¡Para!-grité entre risas.

-¡Cita! ¡Cita!¡Cita!-repitió.

Al final terminé cayendo al agua, pero tiré de su brazo, arrastrándolo conmigo. Ninguno de los dos podíamos parar de reír e intentó hacerme un par de aguadillas, pero si alguna cualidad tenía yo era que nadaba muy deprisa, volaba más que nadar. Por ello, tras subir de nuevo a mi tabla, me estiré y remé con todas mis fuerzas, alejándome de él y dirigiéndome hacia la orilla, donde unos brazos tiraron de mí antes que pudiese alzar la vista, y choqué contra un pecho duro y bien trabajado. El pecho de Nathan.

Me sorprendí de verdad y lo miré estupefacta. Él empezó a tocarme los brazos, lo hombros, la cara... Era como si comprobase que estuviese entera.

-¿Qué pasa?-me puse nerviosa.

-¿Estás bien? ¿Te has hecho daño? ¡Está loco! ¿Cómo te tira de la tabla?-gruñó mirando hacia lo lejos, donde Pol volvía a surfear.

-Estoy bien, solo jugábamos.

-¿Jugabais?-me miraba cabreado.

-Sí... Bueno, me pedía una cita.-dije sin especificar para quién.

-¿Una ci...ta?-me soltó y dio un paso atrás.

Al ver su reacción supe que aquella oportunidad era mía y que debía aprovecharla. Así que proseguí con mi media verdad. Ok, mi mentira mejor dicho.

-Sí. Me pedía una cita.

-¿Y qué le has dicho?

-Que me lo pensaría.-me encogí de hombros- ¿Qué opinas? ¿Le digo que sí? ¿O que no?

Me solté el pelo de la coleta y luego lo escurrí. Él solo me observó sin pronunciar palabra hasta que me giré y ladeé la cabeza.

-¿Me ayudas? Baja la cremallera por favor.-pedí.

Asintió y la bajó lentamente. ¿Demasiado lento? Entonces sentí el roce de sus dedos por la piel de mi espalda, un roce muy suave, muy leve como para saber si había sido intencionado o sin querer. Pero que provocó en mi piel una descarga eléctrica que me llegó hasta la punta de los dedos.

-¿No vas a responder?-me giré, quitándome el neopreno de la parte superior del cuerpo y dejándolo por la cintura.

-Es algo que tú debes decidir. No tengo ni voz ni voto...-comentó flojito.