Atrapado Entre Espíritus

7- Amigo imaginario

Cerró la puerta y me acerqué a la puerta para despedirme, pero cuando vi el reflejo de la ventana, lo que vi fue... fue... la cruda realidad.

Mi rostro se veía horrendo, destrozado, desangrado,  como si una jauría de perros me hubiera comido la cara, no puedo ni siquiera reconocer mi propia cara por dos razones, 1: no recuerdo como era mi rostro y 2: con la cara tan destrozada nadie me reconocería, ni mi madre podría hacerlo... si es que tengo alguna en algún lado, y ahora que me veo en el reflejo de la ventana puedo decir quien soy.

Soy el chico al que sacaron en una bolsa para cadáveres hace apenas un momento, al chico el cual vio todo el mundo con terror y asco, el chico al cual le sacaron buenas fotografías, el chico al cual yo mismo sentí repulsión, soy el chico al cual asesinaron brutalmente, soy... soy... un fantasma.

No puedo creer que acabo de ver como se llevaron mi cuerpo, pero... pero... ¡no es posible o si?!, puede ser que este alucinando o soñando o... que en realidad estoy muerto, y hasta el momento creó que la mas acertada es la tercer opción.

Veo atrás de mi reflejó y veo una vez más al niño adorable que me sigue sonriendo, levanto mi mano y la muevo para despedirme, fingiendo que no estoy aterrado a morir...(debo de dejar de usar ese tipo de expresiones), el suelta un gran bostezo cuando lo hago y se recuesta en el asiento para dormir durante el viaje.

La patrulla avanza dejándome en ese lugar solo y aterrado, avanzo siguiendo la patrulla, esta da vuelta a la izquierda y se topa con un semáforo en rojo, pero lo mas peculiar era que a lado de la patrulla se encontraba la ambulancia donde habían subido mi cuerpo.

El semáforo se pone en verde y ambos vehículos avanzan pero la diferencia era que la patrulla gira a la derecha y la ambulancia hacia la izquierda. Dos rumbos, dos cosas valiosas, mi cuerpo y probablemente la única persona que puede verme en el mundo, la duda es: a cual debo seguir? Mi cuerpo o mi nuevo amiguito?.

Si sigo una, sabré a donde se dirige pero en una ciudad tan grande como volveré a encontrar la otra, solo puedo seguir una cosa, y mientras pienso en cual debo seguir, toman aun mas valor para mi.

Si sigo mi cuerpo tal vez logre descubrir que me paso, como fue que morí si es que no fue por toda la sangre de la cara, tal vez pueda oír quien me hizo esto y pueda encaminar al culpable de mi muerte por mi mismo camino pero...

Si decido seguir al pequeño, tal vez descubra porque puede verme, porque no se asusto al ver mi rostro y claro sobre todo, tal vez seria la única persona que llegue a poder hablar conmigo y evitar que caiga en la completa locura de la soledad.

Ambos siguen avanzando en sentido opuesto y yo no he decidido, mi cuerpo o el niño?, saber que me paso o saber porque puede verme?, conocer a mi asesinó o conocer a un nuevo amigo?, venganza y soledad o compañía y amistad?.

Aun no estoy seguro si es la decisión correcta pero comienzo a correr a la izquierda, siguiendo la ambulancia, si quiero saber que me paso necesitare estar junto a mi cuerpo y quiero que quien me haya hecho esto pagué por ello.

Cuando ya estoy a solo unos centímetros de la ambulancia, me detengo de golpe, tengo una sensación extraña, como una necesidad de voltear hacia atrás y volteó con lentitud y aun alcanzo a ver la patrulla, el niño esta viendo para atrás como si supiera que yo haría, tiene cara de tristeza y decepción, como si supiera que si seguía mi camino era probable que no lo volviera a ver por el resto de su vida, levanta la mano para despedirse de mi una vez mas, pero ahora con una tristeza y melancolía que le rompería el corazón a cualquiera.

Volteo al frente una vez más y veo a la ambulancia alejarse de mi, doy un respiro profundo y pienso lo mucho que me voy a arrepentir en el futuro y comienzo a cambiar mi dirección hacia la dirección contraria, hacia la patrulla, hacia un nuevo amigo, hacia un destino completamente distinto al que me guiaría la ambulancia.