No sabía qué hacer, cómo actuar y hasta se me olvidaba respirar. No puedo creer que Emma haya aparecido en Logma.
Tuve que contarle todo lo que sabía hasta ahora, la existencia de Prita y Logma con sus historias, los portales, La Quinta Dimensión, lo de "mi padre", todo, absolutamente todo lo que sabía.
Al principio no se mostró muy convencida pero a la final no le quedó otra opción...tenía que creerme. Hasta tuve que presentarle a Matthew y a Alex.
Luego de tanta explicación, Alex nos trajo de vuelta a casa. Me encuentro en mi cama acostada, pensando en lo que le diré y preguntaré a mi madre.
¿Qué debo decirle?
Me asusta pensar que ella no sabe nada, que solamente piensa que mi padre nos abandonó por que quiso, que no sabe de la existencia de Logma.
- Hablaré contigo, no te dejaré sola en esto -dijo Emma.
Ella está recostada a mi lado, preferimos dormir juntas por cualquier cosa. Emma estaba un poco molesta porque no dejé que le dijera a Sky sobre Logma, ahorita no era el momento aunque, lo admito, una parte de mi quiere contarle todo pero, no puedo por varias razones, una de ellas es que tal vez me crea una loca, otra es que quiera adentrarse más a este mundo y por ahora no quiero eso ya que ni siquiera se todo acerca de Logma.
- Gracias herma -dije orgullosa.
Después de tanto pensar, me di cuenta de que tenía sueño, Emma por supuesto que había cerrado sus ojos hace como cuarenta y cinco minutos.
Cerré mis ojos y me desentendí del mundo.
"Tu vida cambió, ya sabes muchas cosas acerca de lo que te rodea. Encuéntrame y te diré el por qué de todas tus preguntas. No confíes en nadie, promételo pequeña."
Me desperté acelerada, con sudor en mi frente y con esas palabras rondando en mi cabeza. El reloj marcaba las 3:26 a.m. "No confíes en nadie". Para ser sincera, la lista de las personas en que confío es corta, no comprendo por qué habré oído esas palabras. ¿Quién las habrá dicho? Emma está totalmente dormida, es imposible que haya sido ella, además, fue algo que soñé, obviamente alguien que está en la casa no las dijo, sino otra persona. Mi primer impulso fue pararme con mucho cuidado de la cama sin despertar a Emma, agarré mi teléfono y llamé a Matthew, se que suena raro pero confío plenamente en él, cuando estoy junto a él me siento en paz. Para ser sincera me atrae algo de él que no logro descifrar.
Moví mi cabeza quitando cualquier pensamiento de ese tipo.
- ¿Aló? -contestó Matt del otro lado.
- Hola Matt, soy Mia, perdón por despertarte -.
- Tranquila. ¿Qué pasa? -.
- Es que soñé algo raro y creo que tiene que ver con Logma -.
- Espérame en el parque, ya voy para allá -colgó.
Fui al baño todavía con cuidado, lavé mis dientes y me puse un suéter cómodo para salir.
Si salía por la puerta principal iba a hacer mucho ruido y la puerta trasera está cerrada con llave, así que amarré mi cabello a una coleta alta para que la acción empezara. Mi plan es bajar por la terraza, hay una tubería allí que me permitirá enrrollar las piernas y deslizarme lentamente. ¿Qué tan difícil puede ser? Vi a Sky y a Emma hacer esto miles de veces. Abrí cuidadosamente la puerta de la terraza, y entré de puntillas. Me sostuve con cuidado del tubo y enrrollé mis piernas. Cuando empiezo a deslizarme veo que una luz se enciende dentro de la casa. Mierda. Mi corazón dejó de latir por un nanosegundo. Con mis brazos cansdos por estar guindada al tubo, esperé a ver que pasaba y se apagó la luz, seguramente mi madre fue al baño o algo parecido. Un poco asustada todavía me terminé de deslizar más rápido de lo que pensé y caí sentada al suelo, gracias a Dios que no hice ruido pero, por desgracia, mis nalgas quedaron doliendo por un rato. Me paré y salí trotando hacia el parque, menos mal que estaba usando ropa cómoda porque de haber sido lo contrario ni siquiera me hubiese podido deslizar por el tubo.
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Descubriendo un Mundo
AventuraImagina que eres una adolescente normal, con una vida que amas, pero que en línea general es normal. Hasta que conoces a alguien, ese ser que sabes que llama tu atención pero que es tan extraño que ni te imaginas el secreto que esconde. Él era difer...