El despertar de Caleb |PAUSADA|

Parte IV: Secretos

Parte IV: Secretos

Caleb's POV

Nua abrió la puerta principal de un empujón y yo la cerré tras de mí, azotándola. Fui directamente hasta la habitación de mi madre, y al notar que mi hermana me seguía, supe que quería lo mismo que yo: respuestas. Durante mucho tiempo respetamos la decisión de Aria al no querer decirnos nada sobre su pasado, pero lo que pasó hacía unos minutos fue la gota que colmó el vaso.

Ella estaba sentada sobre su cama, apoyando sus codos sobre sus rodillas y sus manos a ambos lados de su cabeza. Ni siquiera se inmutó cuando nos vio invadir su cuarto como salvajes; sabía que lo haríamos. Y justo cuando iba a comenzar con el interrogatorio, Nua se adelantó.

—¿Nos puedes explicar qué significa todo eso, mamá? —entrecerró sus ojos—. Y esta vez no nos des largas.

Aria cerró los ojos un momento y levantó su rostro para mirarnos. Se sentía incómoda y tenía miedo, eso fue lo que sentí, y fruncí mi ceño en respuesta. ¿Por qué ese pánico a contar la verdad?

—Esta bien, os diré lo que pasó —alargó la palma de su mano en nuestra dirección y la mantuvo frente a nosotros, pidiéndonos un momento—, pero no me juzguéis cuando lo sepáis.

—No lo haremos —murmuré, y definitivamente yo no lo haría. Aria, pasara lo que pasara en el pasado, nos cuidó y amó con todas las dificultades.

—Es un poco largo.

—Tenemos tiempo

Nua se cruzó de brazos. Y tenía razón, este momento lo habíamos estado esperando desde hacía mucho tiempo.

—Esta casa era de vuestros abuelos —admitió, y mi hermana y yo cruzamos miradas de asombro—. Todo comenzó cuando empezaron a dar parte en las noticias nacionales sobre un asesino en serie. Le apodaron el 'Asesino fantasma', y jamás nadie se había cruzado con él y vivido para contarlo. Nadie excepto yo.

—¿Tú le viste? ¿Intentó asesinarte? —susurró Nua con incredulidad. Se veía el pánico en sus ojos y un brillo de curiosidad y emoción. Ciertamente, esto no me lo esperaba, ¿mi madre sobrevivió a un intento de asesinato de un famoso asesino?

Ella me observó a mí esta vez.

—Sí, aún sigo sin comprender el por qué no me mató esa noche, pero fui rescatada por la policía minutos después de que huyera. Sin embargo, él probablemente me siguió hasta aquí para acabar con lo que había empezado, y por segunda vez sobreviví a su ataque —suspiró y se levantó de la cama para ir hasta la gran ventana del dormitorio. Apoyó su cabeza contra el marco y contempló el exterior, donde ya comenzaba a oscurecer—. Varias cosas pasaron, demasiado tediosas para contarlas ahora, y tras la muerte de mis padres a manos de otro asesino más, me fugué con él para conseguir mi venganza. En ese tiempo fue en el que me dieron por desaparecida, por eso la mujer de antes se sorprendió de verme. Pensaban que estaba muerta.

—Espera, frena... ¡¿Qué?! —Nua se levantó de su improvisado sitio en la moqueta y abrió los ojos con asombro—. ¡¿Te fuiste con el hombre que intentó asesinarte dos veces?! ¿No tenías amigas o algún familiar cercano? ¡¿Por qué con él?!

Aria sonrió de medio lado durante unos segundos y nos miró.

—Porque sabía que no me haría daño, y porque de alguna forma, confiaba en él, y sabía que estaría más segura en sus manos que en cualquier otras.

Fruncí mi ceño y abrí nuevamente mi barrera para que fluyeran los sentimientos de mi madre. Decía la verdad.

—Continúa —dije.