Hermoso Entrevistador. (Larry Stylinson)

Siempre

Los días habían pasado un poco lento, y para Louis cada día era él mas difícil y desesperante, vivía con él miedo de perder a su mejor amigo en cualquier momento, no tenia cabeza para trabajar y Jack ya le había llamado la atención varias veces. Siempre estaba enojado con él, como Louis no quiso hacer aquella entrevista a Harry, ya lo trataba como un esclavo, lo hacia trabajar mas tiempo y un poco mas pesado de lo normal, pero eso a él ojiazul no le afectaba mucho, todas las noches su rizado de ojos verdes lo visitaba, lo abrazaba cuando lloraba, que era todos los días y dormía a su lado.

Él ojiazul veía en la pantalla aquellas fotografías de los famosos y les agregaba una nota tonta que se le ocurría, para su suerte hoy Jack se iría temprano y él podría largarse de esa oficina para ir a visitar a su amigo, que por cierto cada día estaba peor.

Le dolía, realmente le dolía fingir todos los días no saber nada de aquella enfermedad, habían veces que estaba con Liam y se levantaba para ir y abrazarlo de repente, su amigo siempre reía y le preguntaba a que se debía ese abrazo, pero Louis solo podía llorar y decirle que lo quería pasara lo que pasara. Liam faltaba algunos días al trabajo debido a la Leucemia, él ojiazul ya le había pedido que le dijera la razón, aunque ya la supiera, pero solo lograba que Liam se enojara y le dijera que lo dejara empaz.
También habían ocasiones donde llegaba con fiebre al trabajo, o con él color de su piel completamente blanco, siempre que llegaba así Louis se iba al baño y lloraba por horas, después regresaba a donde estaba su amigo y lo abrazaba sintiendo su fría piel. Pero tenia miedo,miedo de una cosa que él tío de Harry le había dicho. Toser sangre, no quería ver a su amigo hacer eso, aguantaba él cambio de su color, pero no podría verlo sacar todo lo que lo hace estar vivo, no podría ver como se va muriendo lentamente.

Miro él reloj y ya marcaban las 5:00, Jack se iría a las cuatro así que ya podía salir sin preocupaciones.
Tomo su celular, apago él portátil y salio de la oficina. La recepcionista lo veía con una sonrisa que él regreso, no le caía tan mal aquella chica después de todo.
Llego a la parada del autobús y espero a que este llegara.

Solo pasaron unos minutos y él autobús ya se encontraba ahí, subió hasta los lugares entre medios y se sentó a observar por la ventana él camino hacia la casa de Liam.
Por la trayectoria observó aquel parque donde una vez Liam lo llevo cuando su madre lo había golpeado. Recuerda que al día siguiente él lo llamo y al escuchar la voz triste y destrozada de Louis fue rápidamente a su casa, lo abrazo por un rato hasta que él ojiazul se tragara un poco de su dolor, luego lo llevo a ese parque donde hicieron una promesa de hermandad, aquella promesa que era "Estar a lado del otro pase lo que pase" y ahora al ver que esa promesa jamas se cumpliría tenia ganas de ir y rogarle a algún doctor que lo salvara, que lo dejara cumplir aquello que un día se prometieron.

Bajo una cuadra antes de la casa de Liam, quería pasar a aquella tienda de postres donde él y su amigo iban a comprar sus pastelillos favoritos. Paso a aquel negocio y se aserco a la joven que atendía.

- Buenas tardes, me podría dar un pay de Limón?-. Pregunto él ojiazul mientras sacaba él dinero de su bolsillo.

- Claro, un momento por favor!-. La chica abrió un pequeño refrigerador y saco aquel pay.

Se lo entrego al ojiazul y este lo pago, solo compraría ese, él no tenia ganas de comer nada, últimamente él apetito se le había ido.
Salio de aquella tienda y camino la distancia que le faltaba hacia la casa de Liam.
Cuando estuvo frente a aquella casa sus piernas comenzaron a temblar, aquella casa donde siempre iba a pasar un buen rato con su mejor amigo, donde iba a llorar, a reír, a pelear, a hacer locuras. Le dolía pensar que esa casa se iría con él recuerdo de Liam y todos aquellos bellos momentos.

Toco él timbre y después de unos segundos la madre de Liam abrió, su rostro no se veía nada bien. Tenia unas ojeras muy marcadas y en sus ojos se veía esa tristeza que dolía, aquel dolor de madre, de una madre que se estaba muriendo en vida.