To Fix You (iKON B.I / BTOB Sungjae )

VERDADES A MEDIAS.

Despegué mis labios de él después de tomar conciencia de lo que estaba haciendo, me alejé precipitadamente con los ojos abiertos como platos sin saber que decir, él me miraba fijamente sin decir nada, con muchas y la vez con ninguna expresión en su cara ¿Qué acababa de hacer?, toda mi cabeza daba vueltas sin saber si era por la cerveza o por lo que acababa de pasar, me paré lo más aprisa que pude, quise salir corriendo pero Hanbin tomó mi brazo.

-No te vayas... por favor Annie, no me dejes solo- su cara denotaba desesperación, una parte de mí me decía que me quedará pero otra estaba tan mareada que quería respirar otro aire que no fuera el que él estuviera respirando, estaba debatiendo que hacer cuando volvió a hablar:

-Perdón... sólo déjame llevarte a casa- se acercó a mí tambaleándose, perdió el equilibrio y lo sostuve antes de que cayera entonces la parte de mí que pedía que me fuera se calló.

-¡Mira cómo estás!, tú no vas a llevar a casa nadie, yo te voy a llevar ¿Dónde dejaste el carro?- alzó su mano en dirección a su carro, lo senté en el asiento trasero y me senté frente al volante, por un momento había olvidado que nunca había manejado un carro en mi vida, frustrada por mi incapacidad saqué a Hanbin como pude de él con un brazo rodeándolo por la cintura y mi otra mano tomando la suya que rodeaba mis hombros, estaba medio consciente, apenas podía caminar, saqué mi celular y la batería había muerto, ¿ahora cómo pediría un taxi?.

-Hanbin, dame tu celular- me lo dio, pero paré en seco cuando vi su fondo de pantalla, tenía una foto de Hayi y él, una selca en la que ambos se veían felices, Hanbin tenía un semblante tan suave que me costó reconocerlo al primer vistazo, nunca lo había visto así, con tan sólo ver la foto pude darme cuenta de que él le había dado por completo su corazón a ella, me incómodo mirar la foto, creo... que ver algo tan íntimo de él complicaba más las cosas, despejé mi cabeza y me concentré en lo que era importante ahora, debía llevarlo a su casa. Llamé a un taxi y le di la dirección de la casa de Hanbin pero este aun semiconsciente protestó:

-¡No a mi casa no!-

-Hanbin... ¿entonces a dónde quieres que te lleve?- Él se acercó al conductor y le susurró algo al oído, el conductor me miró esperando mi aprobación, yo sólo asentí, pensaba que quería ir a la casa de un amigo y quedarse allí evitando el regaño de sus padres por llegar en ese estado. Mientras conducía Hanbin dormía recargado en mi hombro y yo miraba por la ventana del auto mientras trataba de aclarar mis emociones, había un torbellino de ellas dentro de mí, pero un pensamiento era remanente en todo el tiempo que pasé en el taxi SUNGJAE, él venía a mi mente una y otra vez, ¿Qué acababa de hacer?, Lo había traicionado, lo había engañado, él acababa de irse en la mañana y...yo..., limpié mis ojos llenos de lágrimas, intentando resistir hasta llegar a mi apartamento, cuando el chofer se detuvo abrí la puerta y ayude a salir a Hanbin, no había entendido que pasaba cuando vi el edificio en el que vivía frente a mí, tardé unos segundos en comprender que él chico que apenas podía sostenerse de pie le había dado mi dirección al taxi, voltee en un intento por detener al coche, pero este ya se había ido, aun pensando en que hacer no me había dado cuenta que me encontraba sola y que Hanbin ya se encontraba dentro del edificio, corrí y logre alcanzarlo en el elevador.

-¿Qué piso?-

-¿Qué?-

-¿Qué piso?

-... ¡No Hanbin, no te quedarás conmigo!-

-Está bien... si no me quieres decir me buscaré en cada apartamento hasta encontrar el tuyo- lo creía capaz de hacerlo, y más en el estado en el que se encontraba, me di por vencida y decidí llevarlo conmigo, tal vez las chicas podrían ayudarme... Hani, la había olvidado por completo, mis nervios estaba a tope cuando entramos y todas la luces se encontraban apagadas, intentando hacer le menor ruido posible caminamos hasta mi cuarto, cuando al fin cerré la puerta de este sentí que mi alma salía de mi cuerpo, ambos nos sentamos al borde de la cama exhaustos por el día que habíamos tenido, sin decir nada, sólo pensando mientras mirábamos al suelo esperando que el otro hablara.

-¿Puedo dormir aquí?-

-Vaya, ¿ahora me estás pidiendo permiso?, después de cómo llegamos aquí, creí que esta era tu casa -

-Lo siento...-

-Ya para de decir eso, me estás hartando... iré a dormir a la sala-

Salí de la habitación con una cobija y una almohada, me recosté en el sofá y sin poder dormir empecé a recordar todo lo que había sucedido, desde esta mañana hasta ahora, e incluso más, empecé a recordar todas la veces que había estado con Sungjae esta semana, todas la veces que lo había besado y todo el tiempo que pasamos juntos, algo estaba mal, o tal vez no, no estaba segura, algo faltaba y no recordaba que era, tal vez era yo, la que acababa de cometer una estupidez, la que acababa de besar a su amigo sin ninguna razón real, ¿cierto?, no sentía nada por Hanbin, de eso estaba segura, nada más allá de la amistad, aunque a decir verdad él era algo más que un amigo, nuestros caminos de habían cruzado tantas veces que era inevitable pensar que todo estaba planeado por el destino, tantas veces, cuando más necesitaba a alguien él estaba allí y al parecer tambiél lo había estado yo para Hanbin, pero ¿amor? O simplemente una leve inclinación hacia él, era imposible, estaba enamorada de Sungjae, pasé semanas tratando de superarlo sin éxito y rindiéndome ante él una vez más, apostando todo para intentar que nuestra relación a distancia funcionara pero al primer obstáculo en el camino había caído, tan profundamente que ahora me encontraba en el sofá tratando de buscar una salida para él pero sabiendo que de esta no sería tan fácil de encontrar, ¿Qué debía hacer?, a unas cuantas horas de que saliera el sol y seguía sin un plan, me aterrorizaba que los primeros rayos del sol anunciarán el comienzo del día, porque eso significaba que tenía que dar la cara a todos los problemas que tenía, no podía concentrarme lo único que me venía a la mente era el beso, el beso producto de mis impulsos, ¿Por qué lo había hecho?, ni siquiera lo recordaba, sólo... la imagen de él luciendo tan dolido me encogía el corazón y ya no tenía más recuerdos después de eso más que el beso, pero... ¿Él me había correspondido?.