una chilena en 5sos [corrigiendo capítulos]

capitulo nueve

Puta la conchesumare.

Tres simples y putas palabras que describen mi situación, ¿por qué? Llegué de la última. Weón, es como un kilómetro de patio delantero, y más encima el Luke conchesumare llegó de los primeros.

Frunzo el ceño ante su baile de aweonao'.

—Puro porque el aweonao' tiene las piernas más grandes que el cuello de una jirafa, vale pico. —Bufo cruzándome de brazos.

Lo cuatro me miraron, y les hago un hoyuo más picá que la mierda.

—Como sabio y humilde ganador —dice Luq, haciendo que ponga los ojos en blanco—, le concedió mi nueva habitación a mi nueva mejor amiga. —Alzo una ceja así terrile' prendia'—. Michael, estas son para ti.

Ya, coxino xuxetumare me ilusioné.

—Na', mentira. Toma Javi.

—¿Enserio? —Lo miro con una sonrisa.

—Nope.

—¡Já! —Se burla el negro, lo que respondo con una pata' en la pantorrilla. Ruedo los ojos cuando el weón se tira al piso gritando.

—Ya, basta de bromas; Javi, la habitación es tuya. —Salta sobre el keilum, quien sigue agarrándose la pierna como aweonao', y me abrazó por los hombros para llevarme a mis nuevas mejores amigas: las escaleras.

Algo me dice que vamos a pasar mucho tiempo juntas.

—¿Van a dejarme aquí? —chilló Calum Piñera.

Los cuatro nos detenemos y nos voltemos a mirarlo.

—Si —respondemos a la vez antes de subir como si nada. Lo oigo pararse a regañadientes y a los pocos segundos el culiao ya está junto a nosotros.

Terminamos de subir la weá interminable y me guían hasta una de las piezas que estaban más al fondo. La puerta está terrible piola y es exactamente igual a las otras, solo que esta tenía una cagá de J súper motiva' pinta' en el centro.

Ashton es quien abre la weá dejando ver una pieza tan putamente normal como todas las que existen en el mundo. Me arrastran adentro, y sólo en ese momento me doy cuenta que aquí están días mis weás menos la cama y mi ropa. Giro con cara de weona.

—¿Que no había que correr para ganarse está habitación?

Negaron con la cabeza.

—Solo queríamos correr, y confundirte, claro —explicó Maikol—. Ashton organizó las habitaciones mientras dormías con Luke ayer por la noche. —¿DORMÍA CON QUIEN MIERDA?—. En realidad mentimos en algunas cosas para sorprenderte, por ejemplo, las cosas llegaron a esta casa cerca de las tres o cuatro de la mañana, y junto a esos imbéciles que no quiero volver a ver en mi vida arreglamos todo esto.

—Y el arreglamos no incluye a Luke, por supuesto. —Rió Calum.

—Además, todas las habitaciones son iguales, solo que esta tiene... —aclaró Viñuela caminando a la venrana—, esto.

Abrió las cagas' de cortinas, y ahí había un balcón tres veces más pulento que el de mi casa en el Chilito. No, qué weá más pulenta. Voy a llorar semen de la emoción.

—Todo para nuestra nueva integrante de la familia.

AY PUTA QUE SON LINDOS LOS CONCHESUMARE OH.

—Yo... ay, weón, no sé qué decir —admito—. No muchas veces me han mostrado tanto cariño. —Inflo las mejillas, aquea' por lo cursi—. Vengan pa' ca'.