Capítulo 11

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|| Capítulo 11 ||

Nada había allí, solo un desierto desolado sin señales de vida.

–Me timaron. –me quejé en voz alta.

Para ir a ese lugar había decidido ponerme mi uniforme Chūnin (sí, ascendí a Chūnin un año antes de conocer a Naruto).

Preparé todo, como si de una misión de rango altísimo se tratase.

Pero no pareció ser más que una broma.

Al darme la vuelta, mi pie chocó contra algo. Algo duro y frío.

Una caja metálica.

Eso no estaba antes ahí. No recordaba haberla visto al llegar.

¿Pero cómo alguien había podido colocarla justo detrás de mí sin que me diera cuenta?

–Da igual, me la quedo. No vine hasta aquí para nada. –murmuré agachándome.

De camino regreso a Konoha, inspeccioné el pequeño objeto. No había nada que pudiera darme una pista de dónde o a quién pertenecía. Simplemente metal oxidado. ¿Pero su interior? La sacudí y el sonido de algo chocar dentro me hiso sonreír. La abrí.

–Oh... –suspiré decepcionada–. Una... una Shuriken vieja.

No tuve tiempo para observarla más detalladamente, pues me encontré con algo que no esperaba.

Konoha. Mi aldea. Mi hogar...

Estaba totalmente destruida. Y solo... solo habían sido quince minutos de que me marché.

Esa nota me había salvado de un posible recuerdo horrible.

Aun agradezco a aquella persona, me salvó de la muerte.

Aiko de la Hoja || Naruto || Libro #1 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora