1/6/16
17:12
Hola tú.
El mismo que dejé ayer sentado mientras corría hasta que los pulmones no me daban a más, el mismo que inolvidable será para mi, al que le di todo y un poco más. Aunque admito que me faltó entregarte mi corazón, y sí a pesar de todo me duele todo lo que sucedió en especial por el hecho que dabas todo por mi y eso lo entendí.
Pero falto un poco más para hacerme perder, sí este es el amor, no lo sentí igual. Perdón por no luchar lo suficiente, pero siempre te dije que las cosas las hago sí de mi corazón lo nace, y no fue así. Perdón porque a fin de cuentas tu fuiste lo que tal vez siempre esperé pero lo que en realidad no quería. Y así es ésta Gabriela, la que no piensa muy bien en muchas cosas que vive para ella misma, ¿Suena egoísta? lo sé, y ¿Qué sí lo quiero ser? Cansada de ser lo que no soy en muchas ocasiones, de pasar por encima de mi tantas veces que ahora me convierto en lo que soy.
Tu eras tan imperfectamente perfecto, que sencillamente no eras para mi, la vida se encargara de darme la razón o no, solo quiero que la tuya te lleve a esa persona que fue hecha especialmente para ti, porque yo no lo soy.
Y me siento una mierda por el hecho de dejarte así y no sabes lo que mis ojos callan cuando estaba junto a ti, pero fue cuestión de tiempo para que se desahogaran sin ti. Y no es que no me importes porque me importas tanto que las lagrimas no me salen, el dolor se lleva por dentro y así va ha ser siempre.
Gracias por absolutamente todo, por llevarme al cielo y al infierno a la vez, crecí y aprendí muchas cosas junto a ti, tal vez nuestro tiempo no sea ahora y no sé sí lo será después, solo te pido que seas feliz y vivas tu vida sin mi.
Lejos de este desastre que debo arreglar antes de estar con alguien, perdón por todas las lagrimas y porque no también por los buenos recuerdos, que tal vez debieron ser mejores.
Y ahora hola tú, el mismo que siempre vuelve en todos mis dolores, porque eres la herida que siento que nunca podré cerrar, no sabes cuanto daría por un abrazo de esos que me aplastaban las costillas, que me dijeras que son cosas de la vida y que alguien mejor vendrá, quiero que quites las lagrimas de mi cara y me digas que tu eres el hombre de mi vida. Y son con estas cosas que me doy cuenta que esa "fortaleza" esa "valentía" no existen en mi, soy tan débil que hasta mi propia decisión me derrumba y una vez mas no me queda mas que olvidar y llorar para mi. No es justo para los demás y se que tampoco importante.
Ahora me pregunto si estos kilos demás van mas allá de antojos y chocolate, tal vez sean tantos sentimientos que no salen de mi alma y tantas lagrimas que he guardado por tanto tiempo que mi cuerpo no sabe que hacer con las mismas.
Me duele el alma una vez más y eso me remonta a cada memoria que desearía eliminar, pero aquí estoy de nuevo agobiándote con la mierda de mi vida y que más da, necesito que estés aquí ahora.
A ti, mi primer amor. Te dedico un dulce Adiós.
Y a ti, un hasta siempre.
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Soul Door
Short Story"A veces amarga, a veces divina, la vida es como una caja de bombones, nunca sabes qué te va a tocar."