MONSTRUOS INTERNOS (Jonghyun y tú)

15: TAEMIN NECESITA COMER

-- En el presente -

Sí, Onew había sido el primero en explicarle cómo funcionaba el mudo espiritual. Llegó a su cuarto, tumbándose en su cama, tomó su celular, viendo que ya eran casi las 3 de la madrugada. Me recosté viendo mi techo, pensando que quizá la vida se volvería más tranquila ahora que lo que había vivido en toda mi vida.

Por la mañana me levanté y me cambié, ya que traía la misma ropa de ayer. Bajé, y de pronto llegó a mi nariz el olor de huevo. Así que me dirigí a la cocina-comedor, encontrando a TN preparando el desayuno para los 6. Creo que es un poco difícil para ella estar sola con 5 chicos, pero lo compensaré alejándola de los otros 4.

Ella es sólo mía.

- Eso huele delicioso.

La abracé por la espalada, asustándola, pero inmediatamente me sonrió. Esa sonrisa me hizo sentirme tan bien sobre mi mismo que no pude evitar besarla. Aunque se sorprendió e intentó alejarse, la sostuve de una de sus manos, mientras que con la otra sostuve su cara, juntándola conmigo.

- La vas a ahogar, Jjong.

Onew entró a la cocina, sentándose en la barra, recargándose sobre una mano.

- Esa no es la idea.
- Entonces, déjala respirar. - Solté a TN, aun sosteniendo su mano. - Te consigues novia y ya piensas en sofocarla. Espérate a los 5 meses o algo así.
- ¿Lo dice el experto en citas?
- Me envidiarías.
- De acuerdo chicos, cálmense, no me siento muy cómoda con la plática de matarme, acabamos de superar a alguien que ya lo pensó, prefiero no pensar que ustedes lo piensan.
- Jonghyun podría hacerlo.
- Pero lo haría con amor, Onew.

Key entró, semidesnudo, tallándose los ojos, seguido por Taemin, quién jalaba a Minho del brazo.

-Tae, en serio, estoy ciego, pero conozco mi casa.
- Técnicamente-
- Sí, sí, ya lo sé, es tu casa Jjong, pero todos vivimos aquí.
- Sí, prácticamente esto nos pertenece.
- No te emociones, Key.

De pronto TN soltó una risilla, mientras servía la comida.

- ¿Qué es tan divertido?
- Qué cualquiera que los viera y no supiera nada de ustedes, pensaría que son casi normales.
- ¿Casi?
- Sí Tae, sólo 5 amigos, peleando. Es divertido.
- Pero dijiste "casi", ¿eso qué quiso decir?
- Qué nadie habla como Onew acerca de la chica de otro.
- Bueno, no todos son geniales como yo.

Me divertía tanto estar con todos ellos, que lo había olvidado, por lo menos hasta que Tae se empezó a atragantar, abriendo su boca hasta el borde de sus cortadas.

Taemin no ha comido. Debo traerle comida.

Minho le acercó un vaso de agua, mientras que Key levantaba su cabeza para que pudiera respirar. Onew batía lentamente sus alas frente a él para que respirara, y TN trataba de tranquilizarlo.

- Respira Tae, concéntrate en respirar. Abre tu garganta.
- Tranquilo Tae, Minho está tratando de darte agua.

Me acerqué a Tae, viéndolo directo a los ojos, que le estaban llorando, cerrándoselos por un momento, echándole parte del agua a la cara, mientras me concentraba en tocar parte de sus heridas.

En ese momento mi energía empezó a fluir, bajando un poco su hambre, al transmitirle parte del alma que había consumido antes.

Ventajas de ser un Shinigami;las muertes, accidentales o provocadas, me alimentaban automáticamente por lo que el alma que me alimentaba era como grasa acumulada, y me podía dar el lujo de no sentir hambre tan fuerte, así que también podía dar un poco de esa energía.

Taemin empezó a respirar más tranquilo y a calmarse, abrió sus ojos lentamente, volteándome a ver.

- Jonghyun, necesito comer.