MONSTRUOS INTERNOS (Jonghyun y tú)

16: ¿CREES QUE SOY LINDO?

Iba de salida, porque debía ir a conseguirle comida a Taemin. Aunque tenemos un "distribuidor", jamás le agradé, así que no confía mucho en mí, y menos desde la muerte de mi padre, y debo ir a verlo directamente a su oficina.

Estaba sacando mi auto deportivo cuando TN salió de la casa, dirigiéndose al auto, subiéndose.

- ¿A dónde crees que vas, TN?
- Voy contigo.
- Oh, no lo creo.
- No lo creas, lo voy a hacer.
- No. Bájate.
- Jonghyun, no te pedí permiso. Voy contigo.
- ¿Por qué?
- Estoy viviendo con ustedes, y no puedo dejar que algo como lo de esta mañana pase de nuevo.

Nos quedando viendo fijamente, un poco desafiantes. Esto la iba a asustar, lo sé. Sólo suspiré.

- De acuerdo. – Encendí el auto. – Pero no digas que no te lo advertí.

Salimos del terreno de la mansión fácilmente, cosa que pareció sorprenderla. Conduje por la cuidad, pasando del lindo barrio, con todo blanco y limpio y que no levantaba sospechas. TN veía a través del cristal, un poco triste.

- ¿Te sientes mal por lo de esta mañana?
- Sólo- no quiero sentirme inútil.
- ¿Inútil? TN, nos estas recordando que seguimos vivos, creo que sin ti seríamos cascarones vacíos.
- Pero Taemin fue el primero que conocí cuando llegue. Claro, intento rebanar mi cara, pero le tengo un cariño especial.
- ¿Más que a mí? – Me sonrío cálidamente.
- No podía querer a nadie más de lo que te quiero a ti. – Le sonreí.
- TN, entiendo que te hayas asustado, pero quiero que entiendas esto, por primero vez nos vas a ver "comer", y no es algo agradable.
- Lo sé.
- Me refiero a qué va a ser más aterrador que tener a Taemin corriendo tras de ti.
- Lo entiendo, Jonghyun, relájate-
- No, esto no es una cuestión de "relájate". Es serio. Esto es un homicidio.
- ... Jonghyun, quiero que tú entiendas esto. He decidió quedarme aquí, con todos ustedes, y si no aprendo a vivir con esa parte que desconozco, el fracaso es mío, no tuyo.

Quiero creerle, en serio quiero. Y espero que no se vaya de mi lado porque sin ella, simplemente me volvería loco.

Llegamos al lugar que espera, era un edificio alto, una oficina. Salimos del auto y entramos al lugar, me acerqué a la recepcionista diciéndole que necesitaba ver al señor Park. No el mismo que el que trabaja para la familia de Onew.

El señor en cuestión era quién trabajaba para mi padre. No nos dijimos nada, sólo un intercambio de sobres, él mío con dinero, el suyo con una fotografía y un papel que decía "Está en camino". Asentimos y nos retiramos. Pero no pude evitar notar como volteaba a ver a TN, examinándola. Demonios, sólo porque lo necesito para alimentarnos.

Subimos al auto, y regresamos a la casa. Al llegar, TN estaba confundida.

- Espera, ¿eso fue todo?
- ¿Qué esperabas?
- No sé, algo más... ¿yakuza?
- Deja de ver doramas, dañan el cerebro. – Me reí de ella, revolviendo su cabello, pero ella seguía muy seria.
- Hablo en serio Jjong, ¿Qué hacemos?
- Taemin comerá en la noche, yo me quedaré esperando para limpiar el desastre, ¿en serio quieres ver qué pasa?
- Me quedaré contigo.

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Por la noche, TN estaba en mi cuarto, sentada en el balcón, recargada en mí. Le dije que no importaba si se dormía, pero realmente sólo no quería que viera. Pero ella se resistía, tomando mucho café para quedarse despierta.

Escuchamos el portón abrirse así que enfocamos nuestros sentidos en eso. La chica que entró era rubia, alta, y traía tacones. No una buena idea. Conforme fue entrando, Taemin empezó su labor. Ramas crujiendo, varias hojas rompiéndose. La chics lo vio, pero al traer su máscara no se asustó. La cara de Tae se veía tan pálida que reflejaba la luz de la luna en él, haciéndolo parecer como un fantasma, pero uno inocente.

- ¿Crees que soy lindo?

TN se reacomodo sobre mí. Esa fue la primera línea que le oyó decir a Taemin. La chica asintió, dejando que Taemin se retirara su máscara.

- ¿Y ahora?

El grito resonó por todo el terreno.

Intentó correr hacia la mansión, pero Taemin simplemente le pateó una de sus piernas rompiéndola cual rama, provocándole otro grito de dolor. La chica se arrastró por el suelo, mientras Tae sólo reía histéricamente.

Volvía a alcanzarla, pateándola tres veces más, una en el estómago y las otras en la cabeza. Sorprendentemente, seguía moviéndose. Taemin se colocó sobre ella, tomándola de las mejillas.

- Y ahora, ¿sigo siendo lindo?

Llevó su cuchillo hacia la boca de la chica, cortándola. Pronto, empezó a rebanar parte por parte la cara de la chica, hasta que sólo quedaron pedazos de músculos y un hueso mostrándose. Taemin tenía cara de éxtasis; acaba de satisfacer su hambre, y ahora estaba absorbiendo el alma que salía de los restos de la chica.

Volteé a ver a TN, quien veía fijamente la imagen.

- Bienvenida a casa, amor.