-¿Pa-aulo?- tartamudeé al decir su nombre.-¿______?- preguntó él.
No podía creer que lo tenía frente a mí, no pensé que lo volvería a ver, y menos en una cafetería. Me lo quedé mirando entre sorprendida y en shock.
-Veo que al final decidiste no meterte al curso de italiano- comentó. ¿Después de todos estos años eso es lo que me dice?, ¿Es en serio?.
Le di una última mirada y comencé a caminar fuera del restaurante. Lo escuche gritar mi nombre, pero no me detuve.
-Oye- dijo agarrando mi brazo.
-Soltame- dije moviéndome para que me soltara. Afortunadamente las calles estaban casi vacías.
-No puedo creer que te esté viendo otra vez- dijo con una medió sonrisa.
-Soltame- dije y logre soltarme de su agarre, pero él volvió a agarrarme.
-¿Qué te pasa?- preguntó confundido.
-Quiero que me soltes- hablé.
-_______ soy yo, Paulo, ¿Cómo que te suelte?, ¿Sabes hace cuánto no nos vemos?, Te he extrañado como no te imaginas, no sé cómo soporte estar sin vos- dijo todo eso.
-Si, sé perfectamente hace cuanto no nos vemos, porque estuve esperándote desde que te fuiste- dije.
-Por...- quiso hablar pero yo lo interrumpí.
-Estuve esperando a que volvieras y no lo hiciste, ah no cierto, si volviste, solo que no me buscaste nunca- solté y el abrió ligeramente los
labios.-Eso te lo puedo explicar- dijo.
-No necesito tus explicaciones- repliqué y comencé a caminar pero él me agarró del brazo.
Al agarrarme del brazo me giro para que lo mirara, y en eso sentí como me pegaba a su pecho y me rodeaba con sus brazos, fundiéndonos en un cálido abrazo. Ese abrazo que tanto necesitaba, ese abrazo que llevo esperando desde hace cinco años.
-Te extrañe tanto- me susurró al oído.
-No digas algo que sabes que no es cierto- dije.
-Si es cierto, te extrañe como loco, y aún sigo sin creer que te tengo frente a mí- dijo y los ojos le brillaron.
-Deberías irte con tu novia- hablé después de unos segundos en silencio.
-________ lo lamento, te puedo explicar- dijo rápidamente.
-No tenes que explicarme nada, uno nunca manda al corazón, los sentimientos cambian, ¿No?- dije tratando de restarle importancia, pero me dolía.
-Es que mis sentimientos no han cambiado en lo absoluto- contestó y yo abrí mis ojos un poco más de lo normal.
-No...- me interrumpió.
-Dejame explicarte, porfavor- insistió.
-Esta bien- acepte y suspiré.
-¿Entramos al restaurante?- me preguntó y yo asentí.
Caminamos en silencio hacia la entrada del restaurante. Cuando llegamos entramos y nos sentamos en una mesa para dos. Paulo pidió algo de comer y yo solo pedí una botella con agua.
-¿Cómo está todo por allá por Argentina?- me preguntó.
-Bien- respondí simplemente.
-¿Tus padres se encuentran bien?- cuestionó.
-Si, están bien- asentí.
-¿Y...?- iba a hacer otra pregunta pero yo lo interrumpí.
-Mira, no quiero sonar odiosa pero, ¿Podes explicarme rápido?, tengo un poco de sueño y me quiero ir- hablé.
-Claro- contestó.
-¿Aja?- cuestioné enarcando una ceja.
-Mira, cuando yo fui a Argentina fue porque me habían llamado de la AFA porque querían que jugara en la selección. Y cuando fui, obvio que pase a saludar, y cuando iba a ir a tu casa para darte una sorpresa me encontré a Antonella, hablamos un rato y cuando le dije que tenía que ir a buscarte ella me dijo que...- se detuvo un momento- Que vos tenias novio, y qu-ue era David, y el mismo me lo dijo también- completó tartamudeando.
-¿Qué?- pregunté sorprendida por lo que acababa de escuchar.
-Por eso no te fui a visitar y termine de novio con Antonella, porque vos rompiste la promesa primero, yo solo me hice novio de Antonella por querer "vengarme"- explicó.
-Yo nunca rompí la promesa- hablé.
-Si lo hiciste, vos...- lo interrumpí.
-Paulo eso es mentira, yo no he tenido novio desde que te fuiste, eso se lo podes preguntar a cualquiera- dije encogiéndome de hombros.
-Pero, Antonella...- comenzó a hablar pero se detuvo.
-Es una pelotuda- murmuré enojada.
-____, lo lamento, no sé porque les creí- empezó a hablar- Yo aún te sigo queriendo y...- lo interrumpí.
-No- dije negando con la cabeza- Vos estás con Antonella, y no voy a dañar su relación.
-_______ solo somos novios porque creí que vos tenias novio, Antonella ni siquiera me gusta- dijo frunciendo el ceño.
-Me dolió que no me felicitaras- dije cambiando de tema.
-¿Y cómo lo iba a hacer si cambiaste de número?- cuestionó.
-¿Qué?- pregunté confundida.
-Eso, Antonella me dijo que cámbiaste de numero y me dijo que ella se encargaba de felicitarte de mi parte- me explico y yo fui negando lentamente con la cabeza.
-Pues yo no he cambiado de número- contesté encogiéndome de hombros.
-¿En serio?- preguntó y yo asentí.
-Paulo, Antonella quiso separarnos... y lo logró- hablé.
-No lo logró, porque ahora estamos juntos- contestó encogiéndose de hombros y sonriendo.
-Sabes que no me refiero a ese "juntos"- dije seria.
-Yo hablaré con Antonella de eso, te lo prometo, pero ahora quiero saber cómo te ha ido en estos años- me pidió y yo asentí y esbocé una pequeña sonrisa.
-¿Qué queres saber?- pregunté recostándome en el espaldar de la silla.
-¿Cómo te ha ido?- me preguntó.
-Pues bien, ya me gradué- respondí encogiéndome de hombros.
-Que bueno, y ¿Qué haces por acá en Italia?- cuestionó.
-Mis padres me dieron el viaje que me prometieron cuando vos y yo se los pedimos- contesté.
-¿En serio?, yo pensé que ya se habían olvidado- contestó.
-Yo también- dije- ¿Es cierto que juegas en la Juventus ahora?- pregunté.
-Si, desde hace un mes- respondió.
-Oh, qué bien- fue lo único que dije.
-¿Te puedo hacer una última pregunta?- preguntó.
-La acabas de hacer- contesté burlona y el torció los ojos divertido. Qué lindo era.
-Que graciosa- dijo sarcásticamente- En serio- insistió.
-Claro, decime- dije.
-¿Me extrañaste?- preguntó agarrando mis manos por encima de la mesa.
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un nuevo capítulo por aquiiiiiiii!!.
Como dije en otra de mis novelas, si ganaba Colombia actualizaba todas mis novelas hoy y pues eso haré.
No sé en sus países, pero aquí son las 12 de la madrugada, así que actualizare las otras después.
Espero que les haya gustado el capítulo.
Voten y comenten.
-L💕
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Since Always -Paulo Dybala y tu-
FanfictionDe pequeños todo es color de rosas, ¿Cuándo se crece será igual?.