Capítulo 11

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Narra Liam

Otro día de trabajo, tuve que levantarme temprano en la mañana por una llamada de emergencia de parte de mis clientes más frecuentes... Los Joles. Su hija que si no me equivoco se llama Emma, ha sido un problema para ellos y una ganancia para mí desde que se escapó de casa por primera vez a los 12 años. Sus padres desde entonces me pagan para que la busque cada vez que se escapa, esta vez me contaron que fue diferente lo sucedido, aún así ya me dirigía a la casa de los Joles mientras tomaba un café para despertarme mejor. Pasé por la gran entrada sin problemas y toque a la puerta.

-Ya era hora -dijo la Sra. Joles, su aspecto indicaba que no había dormido en días y se veía estresada. Se hizo a un lado y me dejó pasar, entré a la amplia sala, ahí estaba sentado en uno de los sillones, el Sr. Joles en el mismo estado que su esposa. Me deje caer en uno de los sillones al frente suyo esperando a que hablaran.

-Ha estado desaparecida por casi una semana, creo -dijo, el Sr. Joles. La Sra. Joles se sentó al lado de su esposo, el aspecto de ambos era fatal y no entendía que los preocupaba tanto.

-Eso no es nada comparado con años anteriores -dije, en una ocasión me tomó un mes encontrarla, una semana desaparecida no era gran cosa.

- Esta vez es diferente, no sabemos nada de ella excepto que nos robó dinero días atrás -dijo la Sra. Joles.

-No le veo la diferencia, solo le seguiré el rastro, ¿Saben donde esta, cierto? -dije, sus padres siempre tenían una idea de donde estaba, eso me era de mucha ayuda.

-No lo sabemos, tuvimos una pelea, ella se fue sin sus pertenencias y luego fue que recibimos una orden de la corte -dijo con turbación la Sra. Joles

-¿Y que decía la orden? -dije con curiosidad, ella se escapaba normalmente por peleas con sus padres, no por huir de una orden.

-Eso es personal, solo quiero que la traigas lo antes posible para acá -dijo el Sr. Joles con la voz exasperada. 

-De acuerdo, yo y mis muchachos haremos lo posible por encontrarla ¿Tienen idea de donde este? -dije, los Joles al parecer no sabían nada de su hija, típico de familias ricas, se veían confundidos y no sabían que decir.

-Bueno... de pequeña a Emma le fascinaba Londres -dijo la Sra. Joles 

-¿Me esta diciendo que debo ir al otro lado del mundo solo porque usted se basa en algo que ocurrió hace años? -dije, la Sra. Joles bajó la mirada pensativa.

-Te pagaremos para que vayas allá, es posible que este ahí. Siempre fue su sueño ir allá y dudo mucho que este en este país -dijo el Sr. Joles. Yo asentí, me levanté dispuesto a irme y comunicarle todo a los demás.

-Antes de que te vayas, Liam, debes traerla de cualquier forma posible, antes del fin del mes debe estar aquí, si no lo logras te arrepentirás, si es necesario... secuéstrala -dijo el Sr. Joles antes de abrirme la puerta...

Narra Emma

No me acuerdo el momento en que me acosté, solo sé que desperté en mi cama y sin ganas de levantarme, quería quedarme en cama todo el día y ver películas viejas mientras comía un bote completo de helado. Estaba confundida, pero supongo que eso no era excusa para faltar un día de clases. Me levanté a regañadientes de la cama y me dirigí el baño, durante la ducha, reviví todo lo que pasó anoche, técnicamente había echado a Niall de mi apartamento cuando él no hizo nada malo contra mí, solo dió su opinión sobre mí aunque no sabía que yo era Emma Joles, debo admitir que sus palabras me dolieron un poco, pero no decía más que la triste realidad. Ni yo me veía un futuro si no cambiaba mi actitud.

Tardé más en la ducha de lo normal, me vestí cogiendo lo primero que vi, unos pantalones azules algo apretados y una camisa holgada que decía en grande "Fuck You" combinaba perfecto con mi estado de ánimo. Me até el cabello en una cloa sencilla y me puse los lentes falsos, de zapatos escogí unas converse negras, tomé un taxi y me fui a la escuela.

 Mi cara lo decía todo, nadie se atrevió a molestarme al menos no en mi cara, llegué hasta el salón justo a tiempo antes de que el profesor entrara, traté de prestar atención en clase, hice el mi mejor intento, pero acabe teniendo la mirada perdida en el vacío. No tardó en llegar el receso, me dirigí a la cafetería, no tenía apetito, pero sabía que Niall sí. En cuanto entrara le pediría perdón por lo de anoche. 

Escuche a mis espaldas unas cuantas burlas y supe que Niall había llegado, volteé a verlo y ahí estaba con ese pantalón negro que le quedaba grande, una camisa blanca y una capucha verde, su cabello estaba peinado hacia atrás, con sus grandes lentes de abuelito, una sensación de verguenza me invadió al recordar lo de anoche, pero tenía que arreglar esto. 

Niall había terminado de ordenar su comida, yo estaba sentada en una mesa alejada de todos esperando que Niall se sentara a mi lado para explicarle todo, pero no sucedió así se sentó en una mesa aún más apartada que la mía a espaldas de mí. No creo que pueda describir mi cara en este momento, sentía enojo, confusión, tristeza. ¿Qué paso con el "Nos vemos mañana Nathaly"? No tenía el valor suficiente para acercarme hasta su mesa y gritarle enfrente de todos que diablos hacia alejandose de mí, me resigné a mirarlo de espaldas. 

Él era la única cosa buena que me había pasado al llegar aquí y lo estoy perdiendo, solo porque soy una miedosa que no se atreve a enamorarse, y todavía sigo negando que me guste Niall en el poco tiempo que lo conozco. Al ver que no lograría nada estando ahí, me fui. Permanecí el resto del receso caminando por los desiertos pasillos del instituto y aunque no veía a nadie, me sentía observada. Trate de ignorar eso cuando siento unos brazos rodeándome con fuerza por detrás.

-¡Sueltenme estúpidos! -grité antes de que me golpearan para callarme...

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A ver me pasé horas haciendo este capítulo :s Espero que les guste jajaja. Aunque siento que no le escribo a nadie, osea veo que la gente lo lee, pero no sé parecen fantasmas :s 

Naa, pero bueno ¿Qué le pasa a Niall? ¿Emma saldrá viva de esta? Vere si mañana escribo el siguiente no me gusta tanto dejar con la intriga, aunque no sé

PretendingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora