Capítulo 32

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Narra Emma 

Esperaba a que esas dos personas se fueran de mi habitación para poder salir de mi escondite, tenía el pulso acelerado además que la desesperación de saber donde estaba Niall. Lo necesitaba. 

El pensar que mis padres tenían planeado matarme para que saliera de una vez de sus vidas, era algo retorcido, más cruel de lo que me pude imaginar. Pero no, no dejaría que lo hicieran. Antes no me importaría si lo hicieran, pero ahora tengo a mis amigos, la esperanza de un futuro y sobre todo la oportunidad de estar con quién amo. 

- Ya discutimos esto Paula ¿Qué otra opción ves? -preguntó con voz firme mi padre. ¿Qué otra opción? Tal vez dejarme en paz, aceptarme como soy y perdonar las estupideces que hice. 

- Tal vez un borrón y cuenta nueva -dijo mi madre con voz temblorosa. Era la primera vez que la veía tan frágil, no era esa mujer dura y sin sentimientos que conocía ¿Que le estaba pasando?

- No vengas con estupideces y sal de aquí, no me gusta ver este cuarto -dijo mi padre con asco. Sentí como el colchón volvía a la normalidad y los pasos acercándose a la puerta. En ese instante mi celular vibró haciendo un sonido que con suerte se escucharía. 

Traté de respirar con tranquilidad, pero vi como mi madre se detenía. En cuestión de segundos vi como asomaba su mirada abajo de la cama.

- Emma.... -murmuró en voz baja con sorpresa.  Pensé que gritaría a mi padre que estaba aquí, pero no hizo nada.

- Tu padre se encerró en su estudio, puedes salir por el cuarto de huespedes -dijo de nuevo en voz baja. Yo asentí, había algo diferente en ella y sentía que podía confiar en ella. Por raro que parezca.

- Trata que no se de cuenta, de lo contrario dudo que tú y el chico salgan sanos y salvos de aquí -susurró antes de que cruzara por la puerta. 

Vi mi celular y era un mensaje de Niall.

"Emma debes irte ya, hazlo pronto no te preocupes por mí, yo estoy bien"

Fruncí el ceño ¿Escapó antes que mis padres llegaran? 

"¿Donde estas?"

Se tardó en contestar y eso me hacia sospechar más que algo no iba bien.

"Estoy afuera esperando por Liam" 

Suspiré de alivio, salí de mi cuarto asegurando tener el diario y el celular. Mi madre solo estaba en silencio viendo por la ventana.

- Emma... yo me arrepiento de haberte hecho daño, nunca pensé que esto acabaría así -dijo, yo asentí no muy segura de que decir y salí.

Bajé rápidamente las escaleras asegurándome de no hacer ruido. Avancé hasta el cuarto de huéspedes, pero antes de salir por la ventana sentí algo que me decía que debía quedarme aquí, que no me fuera. Pero ignoré esto y corrí hasta la vaya, salí por el espacio y corrí lo más rápido que pude hasta que vi el auto de Liam aparcado unas calles más atrás.

- ¿Donde está Niall? -pregunté una vez que me subí, Liam se veía cansado y sudoroso. Él apunto a la parte trasera del coche y lo vi, pero no era lo que me esperaba.

Mis ojos se abrieron de par en par ¿Qué le habían hecho...?

Su ropa estaba sucia y embarrada de sangre, su cabello lleno de hojas y desordenado, la sonrisa que antes tenía fue reemplazad por una mirada seria, perdida en el vacío. Vi a Liam en el mismo estado, solo que él no tenía sangre. En cuanto vi devuelta a Niall, él no tenía ninguna herida. Esa sangre era de alguien más....

-Niall... -dije con poca voz. Él solo negó con la cabeza.

- Yo...no puedo con esto -dijo rompiendo a llorar. Sabía a qué se refería, yo tenía ese miedo de que muy pronto se cansaría de mí, de mis problemas, yo no lo merecía. Él era demasiado bueno para mí, yo solo era problemas, mientras que él era un ángel ¿Cómo puedo tener algo tan preciado si vivo con miedo de perderlo?

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