La Chica Que Escapa Y El Chico Que Miente

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—Supongo que tú mientes para proteger a la gente y yo me alejo de ellos. - Josh iba a abrir la boca, pero se dio cuenta que no podía decir que estaba equivocada, yo tenía razón, así que se quedo callado un momento.

—¿En serio no te molesta que salga con tu hermana?

—¿Por qué me molestaría? Ella parece que está feliz, es lo único que importa.

—Si, puede que ella esté feliz, pero... ¿Tú cómo estás?

—Estoy bien Josh, no tienes que preocuparte por mi.

—Maya, por más que le digas a alguien que deje de preocuparse la otra persona no va a hacerlo, ese es el efecto que causas en la personas.

—El efecto. - dije en tono de burla —Okey, si no te molesta podrías decirme de que hablas.

—Eres tú.

—¿Yo?

—Si, tu causas un efecto en las personas.

—Eso se llama ser una molestia, no es ningún efecto.

—El efecto Maya Hart; Maya, no eres una molestia para nadie.

<<Mi padre no opina lo mismo>> pensé.

—Josh, puede que por momentos llegue a ser un verdadero fastidio.

—Lo sé.

—Se supone que ese es el momento en que dices que no.

—No...

—Gracias.

—Maya, en verdad aveces llegas a ser un fastidio.

—Oh, que lindo, gracias por tu hermoso comentario, voy a guardarlo por siempre y cuando tenga mi ego en los más alto lo sacaré para desanimarme.

—Que tierna.

—Siempre. - dije sarcástica.

—Maya, no lo tomes a mal.

—¿Por qué debería tomarlo mal? A todo el mundo le EN-CAN-TA que les digan que son un fastidio, de hecho me siento halagada.

—Maya, todos son un fastidio.

—Lo dice un fastidioso.

—¡Exacto!

—Josh, estaba insultándote.

—Lo sé.

—¿Entonces?

—Todos son un fastidio, yo también lo soy.

—Ah, ya. Todo está más claro ahora. - Josh rodó los ojos, pero sabía que en el fondo estaba riéndose. —Y dime ¿Cómo es el efecto Maya Hart?

—Bueno, primero empezamos con esos ojos tuyos...

—¿Mis ojos? ¿Qué tienen de malo?

—Absolutamente nada, aunque demuestran muchas cosas, aveces pueden matarte con la mirada, y aveces pueden ser tan inocentes y dulces que no puedes decir que no.

—Oh, claro. - dije siguiendole la corriente.

—Después tus labios, que antes no querían hablar pero terminaron haciéndolo, y dicen cosas inimaginables.

—Los dices como si me pasara diciendo vulgaridades. Deberías dejar de describir mi efecto.

—¿Por?

—Porque lo dices como si me conocieras.

—Yo te conozco Maya.

—No Josh, no lo haces. Mira fue divertido verte, pero es tiempo de que digamos adiós.

—No hay nada peor que la palabra adiós.

—¿Prefieres un hasta nunca?

—No me malentiendas, adiós es una palabra muy grande.

—A-d-i-o-s - deletreo —No es tan larga.

—No en un sentido literal, hablo de su significado.

—¿Por qué?

—Cuando te dicen "hasta nunca" sabes que esa persona no te quiere volver a ver, sabes que posiblemente si se encuentran el otro te ignorará o se sentirá incómodo, ¿Pero adiós? No sabes cuando volverás a ver a la otra persona ni cómo .

—Tienes razón. - nos quedamos callados y yo decidí seguir adelante ya que no faltaba micho para llegar a mi casa.

—¡Lo hago! - gritó Josh, esta vez voltee a verlo, parecía que quería decirme algo, pero hoy fue un día bastante largo, necesitaba un descanso.

Seguí caminando y escuche los pasos de Josh, estaba corriendo, por alguna razón yo empecé a correr también, no quería seguir hablando porque siempre hace que me enoje y después cambio mi estado demasiados rápido. Ese es el efecto Josh Matthews "puede que me odies en un momento, pero al otro voy a hacer que te derritas con mi sonrisa, bueno, aunque no logre hacer eso voy a hacerte reír o te sacaré una sonrisa".

Torpe, ya lo había superado, en serio, ya lo supere, pero pasar demasiado tiempo con él parecía que me afectaba.

—¡Maya, espera! - no dije nada solo seguí corriendo hasta llegar, cuando lo hice me demore un poco abriendo la puerta, pero alcance a entrar, sin embargo no alcance a cerrar.

—Si te conozco.

—Josh, ya puedes irte.

—En serio lo hago.

—No necesitas probar nada.

—¿Me crees?

—No, realmente no me interesa. - yo trataba de cerrar la puerta pero el pie y el hecho de que la mitad de él estuviera casi en la entrada del apartamento no me permitían hacerlo.

—Tú eres Maya Hart, tu mejor amiga es mi sobrina Riley, estuviste enamorada de mi, sin embargo yo te rechazaba, tuviste un accidente, preferible huir y te encontraste conmigo, primero no confiabas en mi pero de alguna manera me gané tu confianza, te enamoraste de mi y rompí tu corazón, empecé a salir con tu hermana - que no sabia que era un familiar tuyo - y ahora estoy aquí explicando que si te conozco.

—Eso no prueba nada.

—Puede que para ti no lo sea, pero yo tengo mi conciencia limpia. - abrí la puerta y di un paso hacia él.

—¿Entonces que haces aquí?

Memories (2° temporada de Amnesia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora