Umbra Inter Umbras

Prólogo

— ¿Así que solo el odio más puro y las ganas de ver a alguien morir es lo único que logra el llamado a la hermandad? ¿Cierto? — El emperador hablaba seguro de sí mismo y con voz desafiante.

— ¡Esto no es posible! — Garleneinh gritaba tratando de liberarse — ¡El odio y la ira no se pueden fingir ante nuestros ojos! —

— Pero... ¿Qué pasaría si asesinas en persona uno a uno a todos los miembros de la familia de un chico solo para lograr que ustedes vengan? — Dijo con suma tranquilidad el emperador Harleyk III.

El emperador le pidió la espada a uno de los guardias, se la arrebató de las manos y volteándose en dirección a Garleneinh sonrió de forma irónica para seguir hablándole a su víctima.

— Te daré el honor de escuchar el nombre de quien te asesinó—Dijo el emperador alzando su espada en dirección a la cabeza de Garleneinh — Mi verdadero nombre es Jalth...—

Un silbido ensordecedor cubrió la habitación dejando al temido emperador con los ojos muy abiertos, una mirada perdida y la boca semiabierta sin emitir respiración alguna. Soltando la espada y dejándola caer a sus espaldas.

— ¿Co...cómo...? — La voz agonizante del emperador sorprendió a todos los presentes en la sala.

El temido emperador se comenzó a dividir en dos partes, con un corte diagonal perfecto, casi quirúrgico, que comenzaba desde el hombro derecho hasta la cadera izquierda, transformando la habitación del emperador en un escenario sádico y cruel; el suelo repleto con sus vísceras, acompañado de un brillante líquido rojo que se esparcía hacia todos lados. Garleneinh se puso de pie lo más rápido posible para huir del lugar, hasta que una mano le tocó el hombro con serena suavidad.

— Jamás descubras tus espaldas, chico — El extraño le acertó un fuerte golpe en la nuca con el mango de la espada, dejando inconsciente a Garleneinh de un solo golpe.

El temido emperador Harleyk III había muerto y Garleneinh había sido capturado... Una nueva era había comenzado.