Diario de dos corazones

Es solo un sueño

Nora entró al camerino sin poder creer la amenaza de Noah, sabía que se lo merecía solo que no lo creía capaz. Ya con el vestido puesto se miró en el espejo y examinó cada parte de sí misma y no estaba conforme con lo que veía, alguien llamó a la puerta y ella se alejó del espejo...

Nora: Pase -Dijo y enseguida Andrés apareció en la habitación-

Andrés: ¿Cómo te encuentras? -Preguntó con su sonrisa siempre radiante-

Nora: Bien -Mintió y con descaro fingió una sonrisa-

No se encontraba bien, era muy doloroso y difícil para ella estar de pie en ese escenario respondiendo preguntas sobre su vida y el que Noah apareciera de la nada tampoco había ayudado, pero pensó que a Andrés no le interesaría nada así que ¿Para qué hablarlo?

Andrés: Sé que mientes, pero también sé que no quieres hablarlo -Dijo con una sonrisa de lado-

Nora: Gracias -Agradeció el hecho de que no la presionara-

Andrés iba a decir algo, pero entró la estilista y decidió callar, observaba a Nora, quien se veía realmente hermosa con ese vestido, ella lo miró a los ojos, acción que provocaba que aquel hombre se sintiera nervioso, aclaró su garganta...

Andrés: Sí te molesta mi presencia, puedo retirarme -Ofreció y Nora ladeó la cabeza-

Nora: No seas ridículo, quédate -Andrés asintió-

Se quedó en silencio observando como la estilista hacía su trabajo, cuando terminó Nora se levantó y se miró al espejo, Andrés esperó que la estilista dejara la habitación para acercarse a la chica y coloca su mano en el hombro de ésta...

Andrés: Nunca dudes de lo hermosa que eres -Le sonrió con calidez y Nora se giró mirándolo a los ojos-

Nora: Trataré -Respondió con cierta mueca de tristeza-

Se quedaron en silencio observándose mutuamente, ambos se admiraban, ella porque él es un hombre que considera un ejemplo a seguir, alguien bueno y la única persona que la ha ayudado en este momento difícil aunque la conoció solo hace unos meses, él la admiraba porque en ella veía una chica dulce, tímida, fuerte, bella, sencilla e inteligente, alguien que ha sufrido mucho, pero se ha mantenido firme, él sale de su trance cuando ella habla rompiendo el momento...

Nora: Creo que... Ya es hora de partir -Dice algo ida todavía-

Andrés: Mmm si, vamos -Le ofrece su brazo para que ella lo entrelace con el suyo-

Salen del lugar y se ven rodeados por una ola de paparazzys, Nora se asusta y aprieta con temor el brazo de Andrés, él nota el nerviosismo de la chica y le sonrió transmitiéndole toda la calma posible, pronto sintió como los tensos músculos de la chica se relajaron...

Reportera: ¿Están saliendo? -Preguntó con descaro y Nora abrió los ojos como platos, Andrés alzó una ceja-

Andrés: No somos nada hasta ahora -Respondió con una sonrisa posando para las fotos-

¿Acabó de decir hasta ahora? Frunció el ceño, pero se relajó pensando que estaba siendo paranoica

Reportera: Tenemos entendido que eres su jefe ¿Es cierto? -Preguntó y está vez Nora respondió-

Nora: Si, es cierto -Dijo de igual manera que Andrés hace un momento-

Reportera: ¿Estás conciente de que estás saliendo con uno de los hombres más importantes de México y tu jefe? -Nora frunció levemente el ceño-

Nora: Perdone que se lo diga de esta manera, pero creo que Andrés, mi jefe, acabó de responderle que no somos nada, pero si aún le queda la duda aclaro que solo somos amigos y no veo nada de malo en eso ¿O usted si, señora? -Dijo resaltando la palabra señora con la intención de hacerla ver vieja-