Imagino cuando me miras, profundamente como sueles hacer, con intrigo, con ganas, con deseo.
Con ese poder sobre mí que me puede lleva a la locura.
Quisiera que estas ganas nunca se vayan y que me cuentes tus secretos con tus ojos.
No quiero unos ojos azules, no quiero despertar y ver unos ojos verdes, no quiero que me miren unos ojos miel. Quiero el café de tus ojos que me de mi golpe de energía cada mañana.
No cualquier par de ojos marrones.
Mi amor nunca pensé que podría tener una adicción y menos a un par de ojos con un color tan ordinario a la simple vista pero que con profundidad llegan a marcar tu vida.
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Mi gran corazón.
RastgeleTener un corazón grande tiene sus defectos y privilegios, sientes todo muy profundo. Estos son algunos fragmentos que se me ocurren a través del día. Lo que pienso, lo que deseo y lo que quiero transmitir.
