CAPÍTULO 3: El muro

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Alyssa en multimedia

Apoyo la cabeza en su duro torso y entierro mi nariz en el hueco de su cuello, oliendo su masculina fragancia. Él me aprieta la cintura y bosteza. Noto lentamente como mis párpados empiezan a pesar y me abandono al sueño...

Flashback

Los rayos de sol caen con sutileza sobre mi rostro, yo arrugo la nariz y abro los ojos lentamente.

Voy al baño y tras arreglarme bajo hacia la cocina para desayunar, pero cuando voy por las escaleras, oigo barullo en el salón, por lo que redirijo mi rumbo.

En la sala están mis primos, mis tías, mi madre y tres hombres que no conozco. Uno de ellos, rubio y de ojos grises, con una complexión atlética y con barba de unos días, se levanta al verme y me mira arreglándose el traje.

-¿Es ella?- pregunta a nadie en particular.

Mi madre se levanta de golpe y se coloca frente a mi en un solo segundo. Mira hacia el hombre con una expresión amenazante.

-Es mía, Zeus- mi madre destila veneno en las palabras.

-¿Zeus?- pregunto- ¿El Dios que lanza rayos?

-Entre otras cosas niña...- replica él.

-¡¡NO LE HABLES!!- grita mi madre.

- Tisifone, se acabaron los juegos... La necesitamos- me mira a los ojos- eres mi hija, me debes la vida.

-¿Cómo que soy tu hija?- le pregunto estupefacta.

Fin del Flashback

-¡¡¡¡DESPIERTA!!!!- grita alguien que se acaba de convertir en mi próxima víctima.

-¡¡¡¡TE VOY A MATAR!!!!- abro los ojos y enfoco la vista en la estúpida con su estúpida voz que se ha convertido en el doble de chillona- ¡¡¡DEJA DE GRITAR PUTA LOCA!!!

Ella me mira sonriendo y se tira en la cama al lado de Iron, que cabe recalcar que sigue desnudo, tapado hasta la cintura por la sábana y DURMIENDO, puto tronco...

Yo me levanto y gruño ante las risitas de Ari. Voy al baño donde lleno un cubo de agua fría y la tiro a la cama, cae toda sobre Iron, porque Ari se ha movido para luego volver al mismo lugar. Y...

SIGUE DORMIDO

De repente aparece Kai, que al vernos abre los ojos como platos, yo entonces caigo en mi desnudez.

- Aly... estás...

-Apunto de mataros como no os vayáis.- les fulmino con la mirada mientras me pongo la camiseta de Iron.

Kaidan ríe y se tira en la cama al otro lado de Iron, que cabe recalcar que SIGUE DESNUDO Y MALDITAMENTE DORMIDO. A ninguno de los mellizos parece importarles, la verdad es que después de vivir un siglo con ellos en la misma casa ya nos hemos visto desnudos más de una vez, y haciendo cosas más ridículas, así que no existe vergüenza entre nosotros.

De golpe aparece Claudio y nos mira aburrido, pero cuando analiza la situación se ruboriza.

- Yo sólo,... ya sabéis, venía.... a la cena y eso... es que...

-Tranquilo cielo, nadie va a violarte...- le tranquilizo acercándome a él.

-Aún- apunta Kai riendo y guiñándole un ojo.

Claudio enrojece a más no poder y se gira para escapar de esta habitación de locos.

-Tesoro, espera un segundo- le paro- tengo una duda existencial, y es que, a ver... ¿para que mierda nos diste esas llaves, si cualquier organismo con -35 neuronas puede entrar? 

Herederos de SangreWhere stories live. Discover now