New Empire

Capítulo 11

El comunicador tenía mucha interferencia más sin embargo estaba seguro de que nadie más que nosotros y Henry podía escuchar nuestra conversación.

-¿En verdad los dejó libres? -Pregunto Henry cuando termine de contarle el relato.

-Si, dijo que era contra el tratado, pero lo convencimos de que ese trato no tenía por qué cumplirse.

-Bueno, tienen suerte de seguir vivos y...

-¡Podría decirnos de una vez como llegar sin ser vistos por la D. N. I.! -Interrumpió Colín que ya estaba cansado de nuestra platica y quería estar de regreso en tierra firme -No tardarán mucho en duplicar sus buques para la guerra y en ese momento sera muy tarde.

-No hay forma de que vuelvan a la montaña.

-¿Por qué no? -Preguntó Colín desesperado.

-Es muy arriesgado pasear un barco tan grande como el suyo sin ser vistos, pero tengo un plan.
-Y ¿Cual es?

-Quédense donde están, llegare en menos de una semana con suerte, seguiré sus coordenadas.

-Pero no podremos pasar mucho tiempo en este lugar.

-Tienen que hacerlo.

En ese momento un sonido agudo nos avisó que había terminado nuestra conversación con Henry.

-No durará mucho la comida.

-Tenemos que intentarlo -Conteste aturdido.

Subí hacía la proa y caminé sin rumbo, en poco tiempo me encontraba en la punta del barco, las nubes se habían despejado y el sol comenzaba a esconderse por el horizonte, todo era tranquilo cuando sentí un golpe debajo del Lealtad, baje la vista y me encontré con ella, la mire y no podía creerlo, era una ballena del doble de tamaño que el Lealtad, tenía consigo a su hija, poco a poco más ballenas aparecieron alrededor del barco, subían a la superficie y tomaban aire, eran enormes, nunca las había visto tan cerca, eran del tamaño suficiente para voltear el Lealtad si quisieran, su color era gris y sus dientes eran afilados y de unos dos metros cada uno, aunque se alimentaban de calamares y crustáceos en las profundidades del mar, eran peligrosos si se les molestaba.

-¿Linda vista no? -Pregunto Colín detrás de mi -Ver al mamífero más grande del mundo tan cerca de ti.

-Supongo que si.

-¿Confías en ese tal Henry?

-Lo suficiente.

-Espero que no te equivoques.

Permanecimos en silencio durante un rato, mirando como las ballenas se alejaban nadando hasta que Colín interrumpió aquel silencio.

-Sabes, extraño a Helen, ¿Tu no extrañas a Diane?

-Demasiado -Admití -Daría lo que fuera por estar cerca de ella.

-¿Si sabes que a Evan no le va bien con Lucy verdad? -Dijo con una ligera risa que cambió toda la atmósfera.

-No se a que se deba -Bromeé un poco -Si siempre ah sido tan serio.

-Lo último que supe fue que se atrevió a decirle que parecía que tenía sobrepeso -Dijo riendo aún más.

-Nunca sabe cuando serrar la boca -Conteste riendo.

Pasaron cinco días aburridos, no teníamos nada que hacer y la comida comenzaba a escasear, yo me encontraba reparando una falla en el holograma que mostraba el clima (Marcaba grados bajo cero en un día soleado y caluroso) cuando escuché a Colín gritar, corrí hacía donde el y ahí estaba, eran Henry y unos cuantos hombres sobre la proa del N. I. Costa.

-Perdón por la tardanza -Dijo Henry cuando su barco se encontraba a escasos metros del mío, la diferencia en el tamaño del Costa y el Lealtad era tan clara como la diferencia en el tamaño del Lealtad y de aquellas ballenas gigantes -Si la guerra ah comenzado, es peligroso para nosotros seguir trabajando para la D. N. I. así que decidimos irnos junto con el Costa.

-Llegas a tiempo -Conteste esperando ya partir de regreso a tierra firme -Así que ¿Cual es el camino?

-Ustedes solo sigan al Costa -dijo golpeando la barandilla -Los guiaremos a la base en la isla norte, en ese lugar tenemos la base mas grande de todas y allí, Diane y Helen los esperan.

-¿Llevaron a Helen a aquella isla? -Pregunto Colín con esperanza - ¿Por qué?

-Bueno -Dijo Henry quitándose su gorra de capitán -Después de su partida, la D. N. I. no quería dejar testigos eh intentaron asesinar a cualquier persona importante para ustedes, intentamos salvar a todos pero solo pudimos salvarlas a ellas y unas cuantas personas más que eran importantes para el resto de su tripulación, fue muy tarde para Lucy.

-¿Como es que conoces a... -Comenzó a preguntar Colín pero lo interrumpí.

-¿Como conseguiste que Diane viajara y dejara a su madre sola?

-Bueno -Comenzó a decir pero parecía apenado -Su mamá murió de un infarto la noche antes de irte, ella se enteró en cuanto llegó al hospital que fue donde la convencimos de que viniera y... -Hizo una pausa al ver mi rostro -Si no les molesta quiero llegar más temprano así que a navegar.

Se dirigió a su cabina y zarpó, no podía imaginar como se sentiría en estos momentos Diane, su madre había muerto igual que su amiga, y yo no podía hacer nada para animarla, me dí vuelta y me dirigí a la cabina.

-¿Como es que las conoce? -Escuche preguntar a Colín detrás de mi.

-Nos tiene vigilados.

Avanzamos con rumbo a la isla norte, la velocidad del Lealtad era muchas veces mayor a la de el Costa, era aburrido ir tras de ellos a menos de la mitad de la velocidad de la que podía viajar el Lealtad, sabíamos que sería un largo viaje.

Después de mucho tiempo de viaje, tratando de moderar el consumo de nuestros pocos alimentos, logramos ver la isla que nos había mencionado Henry, era muy grande, tenía su propia ciudad y en la costa de ella habían cientos de estandartes con la imagen de la resistencia de nuevo imperio.

-¿Como es que no notan todo esto los oficiales de la D. N. I.? -Pregunte cuando estuve caminando junto a Henry por la playa, ya todos habían desembarcado y nos seguían -Es muy grande al igual que esos estandartes, no podrían pasar desapercibidos.

-No lo hacen.

-Entiendo pero ¿Por qué sigue en pie la base y la D. N. I. no se da cuenta de nada?

-Dime... -Se detuvo frente a mi y me miro directamente a los ojos -¿A que distancia lograste ver la isla?

-A pocos metros antes de llegar pero...

-Y... -Me interrumpió Henry dándose la vuelta y retomando un camino -¿Apareció en el radar?

-Bueno.. -Conteste recordando que en el radar solo aparecía la imagen del Costa y del Lealtad -Tenemos fallas en el sistema del Lealtad.

-Bien -Dijo Henry guiándome hasta lo que parecía ser una lujosa cabaña seguida por muchas otras que estaban detrás de ella formando una hilera a la orilla del mar -Solo te diré que la tecnología aquí es mucho más avanzada -Me miro abriendo la puerta y entregándome unas llaves -La tuya es la siguiente, no hagas esperar más a tu novia.

Lo mire inexpresivo, el se dirigió a el resto de mi tripulación y les entregaba las llaves mientras les explicaba donde pasarían la noche, caminé hacía la puerta de la cabaña y me detuve frente a ella, apenas iba a colocar la llave cuando la puerta se abrió.