Keeping Love Again

Pasado

Key había amanecido totalmente molido. No había podido dormir tras darle vueltas una y otra vez al asunto de Jonghyun. ¿Por qué lo había hecho? Él con todo el gusto del mundo se lo habría llevado con él o hubiera regresado cada que se le presentara la oportunidad...así fuera la solución que fuera, abría buscado una para seguir a su lado.

Se levantó de la cama y miró su teléfono. Había un mensaje de Woohyun invitándole a desayunar, pero realistamente, no tenía ganas de verle. Eran de esos días en los cuales te levantas sin ánimos de ver a nadie y sólo quieres una buena taza de café y perderte en tus pensamientos.

Key hizo exactamente eso y tras prepararse un buen café cargado, se puso a pensar en su pasado y en qué factores pudieron hacer que Jong tomara esa horrible decisión. Que estuviera buscando respuestas no significaba que iba a perdonarle tan fácil, ya que a fin de cuentas, un engaño era un engaño y él se había sentido morir con ello.

En ese tiempo, y sin elevar su ego, varios le pretendían, pero a todos los rechazó, ya que para él, siempre fue su Jong y nadie más. El único que le insistió bastante fue Woohyun hasta que le dejó en claro que jamás podría amar a alguien que no fuera Jong. ¿Sería acaso que...? No habría sido capaz... Se dijo Key con los ojos sumamente abiertos. Si había sido Woohyun, se iba a encargar de que supiera lo que era el infierno ya que él había estado ahí por un largo tiempo y apenas comenzaba a subir peldaños en busca de la salida de ese abismo de dolor y resentimiento.

Iba a mover todos los recuerdos del pasado, así le desgarrara por dentro revivir todos aquellos sucesos. Miró el alhajero por un periodo largo de tiempo. Se aproximó y lentamente abrió la lapa, removió el contenido y tomó el anillo que le había dado Jong. Sacó una delgada cadena y le colocó el anillo y se lo colgó en el cuello. Si después de buscar, no hallaba algo que le demostrara y le dejara claro qué era lo que había pasado hace tres años, iba a tirar el anillo y se casaría con Woohyun sin siquiera meditarlo.

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Taemin llegó a casa de Heechul. Debía admitir que era hermosa. Tenía un bello jardín al frente lleno de flores y pasto verde; Un lindo camino llevaba a la puerta de la casa. Tocó el timbre y Heechul salió de la casa, sonrió suavemente al mirarle, bajó la mirada y al ver al pequeño que le acompañaba, sus ojos se agrandaron y se tomó del marco de la puerta para evitar caer.

-Saluda a Heechul, Min-Kyung. Heechul, es mi hijo. Tiene tres años y en un par de meses más cumplirá los cuatro.

Heechul sin todavía asimilar a ese lindo niño que tenía frente a él, se agachó suavemente y con un poco de vacilación, levantó al niño en brazos y le abrazó.

-Eres igual de guapo que tus appas...

-¿En verdad?

-Claro pequeño. ¿Por qué no vas a ver las caricaturas en lo que tu appa y yo platicamos? Te prepararé unas palomitas para que las comas, ¿Te parece?

-¡sí!

Min-Kyung bajó de los brazos de Heechul

Y corrió hasta la televisión. Heechul le preparó las palomitas y un par de cafés para ellos. Ambos se acomodaron en una pequeña sala, que estaban detrás de dónde estaba Min-Kyung.

-Bien. Durante todo este tiempo no había estado en la ciudad. Después de ese suceso, yo...me tenía que ir, ya que tu padre me amenazó con que si yo hablaba al respecto haría mi vida un infierno, así como lo hizo contigo.

-Mi padre...

Ambos agacharon la mirada un momento, pensando en ese instante que les cambió la vida y les marcó.