Ilusión

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Key se impacientaba en su escritorio. Jugaba con el lápiz una y otra vez ¿a qué hora llegaría Jonghyun? Tenía tanto que decirle y de qué hablar. Tenía que explotar y aligerar el peso como le había dicho Heechul. Le había llamado pero no le contestaba el teléfono. ¿Le estaría evitando ahora él? No le sorprendería.

-Key, ¿todavía aquí? Ya terminaste la sesión de fotos de hoy, deberías haber ido a descansar, tú que todavía puedes hacerlo.- dijo Tae con un poco de ironía- yo debo de hacer todavía más cosas.

-Tae...necesito hablar con Jonghyun. Por eso no me he ido.

-¿Qué...ha pasado?

-Un amigo ha hablado conmigo y tienen razón; Debo de hablar con Jong para de una vez cerrar la herida en mi pecho y poder cerrar ese capítulo en mi vida.

Taemin bajó un poco la mirada. Key tenía mucha razón, él también debía hablar con Minho para cerrar el capítulo en sus vidas y poder seguir él con la suya tranquilamente.

Key no le quiso mencionar el nombre de Heechul ya que este le había pedido que no le comentara por el momento nada. A Heechul era a quién le correspondía hablar con Tae respecto a lo que había pasado entre Tae y Minho.

-Jong no ha venido hoy. Llamó a media tarde diciendo que no se sentía muy bien y que nos vería el día de mañana.

-Yo... no puedo esperar más. He esperado tres años para escucharle y ahora no quiero esperar un poco más.

-Entonces si ese es el caso, te daré su dirección, por algo soy el presidente

Le dijo Te con una sonrisa. Sabía que no era el mismo peso, pero que ambos padecían por un evento pasado en sus vidas. Tae le dio los datos a Key y le deseo lo mejor.

-Espero y le encuentres en casa y soluciones todo de una vez.

-Ya verás que eso es lo que lograré.

Le dijo con una suave sonrisa y se fue de ahí a buscar a Jonghyun.

Taemin debía de irse rápidamente, ya que un amigo de hace mucho le había venido a visitar. ¿Hace cuánto no le veía? Por lo que recordaba, fue hace mucho, cuando las cosas se pusieron "feas" él fue recogido por su padre y le prohibió acercársele. No hace mucho se había puesto en contacto con él, así que gracias a ello había vuelto a entablar contacto con un buen amigo del pasado.

Le había llamado hace un par de horas, y le había pedido verle en su casa. Pese a que se había negado al principio, sabía que tarde que temprano, alguien lo debía de saber, y si ya lo sabía Key, Heechul con mayor razón lo debía de saber. Le daba miedo que su mayor secreto guardado por casi tres años ahora saliera a la luz. Recordó su imagen fuerte y con ello en mente, ajustó su horario para poder retirarse antes a su casa, y así preparar todo para cuando llegara Heechul. Se despidió de todos y salió hacia la cochera de su edificio.

Se encontraba caminando hacia su auto cuando a lo lejos vio a Onew, estaba peleando entre cargar unas cajas o abrir su carro. La imagen le dio ternura y le hizo sacar una sonrisa, así que fue a ayudarle con ello.

-Déjame ayudarte- Le dijo con una suave sonrisa, cargando las cajas para que pudiera abrir la puerta trasera

-Oh...muchas gracias- le respondió en un tono amable y se dispuso a abrir la perta y colocar las cajas dentro- parecía que hacía malabares pero no podía dejarlas en el piso, ya que se podrían ensuciar y el trabajo de todo un día se hubiera perdido.

-Tienes mucha razón. ¿Ya vas a casa?

-Sí, quiero una buena taza de café y dormir un rato, tal vez...

Keeping Love AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora