-¿Qué pasa?. -pregunta Riley preocupada.
James tomó aire y la miró a los ojos.
-Me gustas. -soltó el.
Riley se sorprendió al escuchar esas pequeñas palabras salir de los labios de James.
Ella no sabía que decir, no sabía si estar felíz o sólo actuar normal.
-James... Tu, tu también me gustas.-sonrió débil.
James sonrió al oírla.
-Pero... No quiero que todo esto se estrope.-Aclaró.
James la miró confundido.
-¿A que te refieres?.-pregunto aún confundido.
Riley bajo la mirada, para después subirla nuevamente, estaba nerviosa.
-Me refiero a que...-colocó su mechón detrás de su oreja.-A que somos muy buenos amigos, pero si somos algo más, todo se arruinara. -habló ella.
-Y porque se arruinara?.-pregunta el.
-¿Es que acaso no lo entiendes?.-pregunto con un tono más alto.
-No, te agradecería que me explicaras. -habló firme.
Riley suspiro.
-No quiero.... No quiero que me hagas daño. -dijo en un tono casi audible.
James la entendió, sabía a lo que se refería, pero también sabía que esta vez todo sería muy diferente.
-Riley yo no pienso hacerte daño.-afirmó.
Riley volteó los ojos.
-¿Y como estas tan seguro de eso?.-preguntó un poco molesta.-¿Cómo se que esta vez será diferente?.-pregunto una vez más.
James la miró.
-Confía en mi.
Riley sonrió sarcasticamente.
-Es que no lo entiendes.-dijo molesta.
-Lo único que entiendo es que no quieres nada conmigo!.-dijo molesto el también.
-No es que no quiera de acuerdo!.-gritó molesta.- Estoy enamorada de ti! ¡Que no lo vez!.-le gritó molesta.
-¡Yo también lo estoy Riley!.-gritó molesto el también.
Riley lo miró, ambos estaban molestos. Negó con la cabeza.
-Tu no estas enamorado de mi.-dijo esas palabras con un profundo dolor.-Yo sólo te atraigo, y lo cierto es que.... Te cansaras y me dejarás.-sus ojos estaban lagrimosos.
James la miró unos segundos, estaba molesto por todo esto.
-Entonces.... se acabó!.-dijo James.
A Riley le dolió tanto escuchar eso, nunca pensó que todo esto podía afectarle tanto.
-Yo no puedo ser ni amigo, de alguien que no confía en mi.- dijo mirando a Riley a los ojos.
A él también le había dolido y más de lo que pensaba.
-Entonces se acabó.-repitió Riley.
Una lágrima cayó en su mejilla.
James no soportaba verla así, bajo de la colina y subió al auto y con todo el dolor de su corazón se marchó dejando a Riley allí.
Las lágrimas ya habían salido completamente, Riley se sentía tan mal de no poder confiar en James.
《Es lo correcto, sabía que era lo correcto》