CADA UNO SE SUICIDA COMO QUIERE

Relato

Grupo: Annie escúchanos.
Vane Fisher: Creo que es hora de cambiar el nombre del grupo.
Angie Querrey: Sip, Annie ya nos ha escuchado.
Grupo: Defensores eternos.
Pablo Rockwell: Menudo nombre..
Sam Raimi: Callate Pablo, no te quejes tanto y si no piensa tu en un nombre.
Grupo: Simplemente amigos.
Vane Fisher: ¿De verdad? Me niego.
Grupo: Defensores eternos.
Angie Querrey: Bueno, dejemoslo así, vale?
Sam Raimi: Os habéis dado cuenta de que Annie está leyendo los mensajes pero no escribe nada?

Estoy en la cama, riéndome por los comentarios de estos chicos. Son muy buenas personas pero no sé nada de ellos.
Grupo: Defensores eternos.
Annie: Está bien, me rindo, pero solo porque quiero saber más sobre vosotros.
Sam Raimi: Me llamo Sam Raimi, tengo 16 años, mi asignatura favorita es... literatura y mi color favorito es el negro.
Annie: Haber, vuestros nombres ya me los sé, vuestra edad también.
Pablo Rockwell: Mi asignatura favorita es biología y mi color favorito es el rojo.
Vane Fisher: Mi asignatura favorita es... supongo que plástica y mi color favorito es el azul. Angie Querrey: Mi asignatura favorita es Inglés y mi color favorito es el amarillo.
Annie: Está bien, se acepta pero sois muy poco expresivos.
Angie Querrey: Sam, has acabado ya tu "relato"?
Sam Raimi: La verdad es que si, pero me da vergüenza enviarlo.
Angie Querrey: Venga no seas tonta, envíalo, seguro que está genial.
Sam Raimi: Si eso no lo niego, pero es que os vais a burlar. Te lo envío a ti por privado y me dices que tal.
3 minutos después.
Angie Querrey: guau, no sabía que escribías tan bien!!!
Sam Raimi Ni yo!!! Ni se te ocurra enviarlo.
Angie Querrey: Está bien, hazlo tú.
Sam Raimi: Bah, lo voy a enviar, total, no pierdo nada.

-¡Annie! - la voz de Gabriel llamandome me saca de mis pensamientos - ¡Ven a comer!
-¡Espérame 2 minutos, ya voy! - quiero leer el relato de Sam, tiene muy buena pinta.

Recuerdos de papel.
Hasta donde me hizo llegar mi propia cobardía. Una destrucción inesperada. Si hubiese tenido el valor suficiente para hacerte saber mi sentir, quizá ninguno de los dos estaríamos inmersos en esta nostalgia. Por permanecer en silencio, llegamos tarde. Por hablar, tenemos inmensas posibilidades de perder lo que mas nos hace falta. Porque, aquel recuerdo que tomamos como tesoro y que una vez escondimos en el fondo de la memoria, desapareció, o ya no podemos ignorarlo sin abrir la misma herida una y otra vez. ¿Cuantos mas de mis llantos deberán tener tu nombre. Cada lágrima cae prendida en fuego sobre las manos, sobre la almohada... y arde. Un débil gimoteo
se escucha, permitiendo desahogarse en silencio hasta uno quedarse dormido, con todas las sombras tratando como pueden de reconfortar aquel ya abatido sentimiento. ¿Quien ganó a la oscuridad malvada? Siendo así la salvación para muchos corazones rotos... resquebrajados... pisoteados. Aún así, por cada una de tus heridas, te brindaré los trozos de esperanza que me queden para que puedas continuar caminando, con la cabeza bien alta y con una enorme sonrisa. No poder tenerte a mi lado no significa que no sea feliz. De hecho, me basta con ver el mismo brillo en ti como el de la primera vez que lograste estar alegre sin necesidad de una falsa careta sonriente. Verte así, destrozada, es incluso peor para mi que para ti. Puede que sea una frase muy vista o repetida... pero es la verdad. Te cortaron las alas. Las mías están algo rotas y desgastadas, pero te las doy. Te quebraron la risa. La mía no sé si funcione, pero es toda tuya. Te rompieron el corazón. Por favor, toma todas las partes del mío que necesites para arreglarlo. Te herirán. Se aprovecharan de tu bondad. Pero yo te arroparé. Me quedaré aquí, a esperarte, con los brazos abiertos y dispuestos a consolarte. Mi corazón te marcó fidelidad sin mi consentimiento. Ahora él paga las consecuencias... pero me lleva con sigo. Realmente, no comprendo como unas simples palabras pueden hacer que me ahogue en mi propio mar de recuerdos. Aquella mirada tuya que inconscientemente, jugó con mi persona. Siempre miraste el mundo con decisión, pisando fuerte y firmemente. Siempre te supiste el camino. Yo, me limité a seguirte, rogando el poder tomar tu mano por el trayecto.

N/A
Quiero dejar claro con esta nota de autora, que yo NO soy la dueña de este segmento titulado "Recuerdos de papel" tampoco fue sacado de internet, su dueña es una amiga muy importante para mi y no sería de buen gusto que me llevara yo su merito a costa de su esfuerzo.
Gracias por el apoyo.