La puerta de mi oficina se abre y me percato de la presencia de Kella. Sonríe esplendida y antes de que me bese la detengo, Alzo el teléfono y llamo a la secretaria.
- Cancela toda mi agenda del día de hoy. Gracias.- Cuelgo y vuelvo mi mirada hacia Kella. Su entrecejo se encuentra fruncido.- Toma asiento, por favor.- Le indico con mi mano derecha el sofá pequeño color chocolate.
- Noto por completo tu seriedad. ¿Qué es lo urgente que tienes que decirme?.- Se cruza de piernas y sonríe con seguridad.
- Necesito…
De momento mi móvil suena, el identificador indica que Charlotte me esta llamando. Pequeña Tonta, Apuesto a que solo quiere informarme que debo llevar la caja de Donas de chocolate y Vainilla. Mocosa tonta. Apago mi teléfono, levanto mi vista y veo a Kella nuevamente.
- ¿Y Bien?- Arquea una ceja. Carraspeo.
- Necesito que esto pare.
- ¿Podrías especificarte?- Su ceño se frunce aun mas
- Necesito que te hagas a la idea que esto no es una relación seria. Dime que lo tenias en mente, ¿Lo tenias?.- Encarno una ceja, la observo y suelta una risilla por lo bajo y frunzo el ceño. Estupida ¡Cree que Bromeo!
- Louis…- Dice y segundo después da otra risilla. La observo ofendido o un tanto molesto por su estupida risa de vieja cacatúa.- Tú…- Dice y de momento se pone de pie, da unos cuantos pasos y se acerca a mi. Observo sus ojos color azul un tanto oscuros. Se acerca hacia mis labios y al notarlos cercas doblo mi rostro en dirección contraria.
- Esto nunca ha sido serio y nunca lo será. ¿Lo tenias en mente?- Sus palabras contenían victoria.
La miro al retirarse de encima y sonrió al verla frente a mi nuevamente.
- Por supuesto. Nunca fuiste nada más que solo sexo.
- ¡Ouch!- Finge estar dolida y se carcajea.- Pero en si, ¿Por que has cambiado de parecer?.- Nuevamente encarna una ceja
- Las razones son pocas, pero son las mas importantes…
- ¿Una mujer es tu razón poca pero importante?... Vamos, tan solo dime de quien trata. Además de sexo puedo brindar confianza.
- No es un secreto que me este matando por una mujer. Pensé que Brent te había ido con el chisme.
- Para nada. Brent nunca habla de la vida de los demás. ¿Necesitas ayuda femenina?
- No, para nada, Ya he tenido suficiente por el momento. No me saco a mi tía de encima.- Suelto una risa brusca y Kella parece estar sorprendida de ello.
- ¿Es linda?
- Es la mujer más hermosa que hay sobre la tierra. Ella es…
Entra mi padre sin tocar. Tanto Kella como yo lo observamos. Mi padre luce serio ante nosotros. Cierra la puerta y alza su mano sosteniendo su móvil.
- ¿Por qué has entrado de ese modo?- Le pregunto y al verlo serio me pongo de pie, tomo su hombro.- ¿Qué te pasa?- Pregunto nuevamente.
- Me llamo tu madre, Tienes que ir al hospital, Ahora. _____________... Se ha desmayado esta mañana.- Mi cuerpo se colapsa en ese instante. Mi pecho se acelera. Observo a mi padre atarantado.
- ¿Cómo diablos?- De momento reacciono, corro por mi saco. Papa me seguía por cada uno de los pasillos. ¿Qué demonios?, Mi pulso se acelera cada vez que doy un paso en dirección a mi auto.
