Parte 14

1.2K 47 1
                                    

Ha pasado un mes desde que Ed se fue y todavía no se nada de él, las clases están por terminar, bueno en realidad un poco más de la mitad del año y mis promedios han bajado, claro como no lo harían si mi corazón pende de un hilo esperando noticias de Ed, mi madre no me ha regañado por mis notas pues sabe por lo que estoy pasando y además no son tan malas, pero claro a mi padre si le molestan -era obvio que su reacción sería lo opuesto a la de mi mamá, siempre le lleva la contraria- creo que si supiera porque mis promedios han bajado probablemente sería peor su reacción, y no quiero sus sermones en este momento, vivo alerta de cualquier señal de Eduardo o su madre.

Marissa ha estado a mi lado apoyandome así como también lo ha hecho Fede, la verdad es que nunca pensé que llegaría a ser mi amigo, me la pasaba tan distraída que no me daba cuenta de lo que pasaba a mi alrededor, un día sin fijarme salí de mis pensamientos y preste atención a lo que el maestro decia y note que entró un chico nuevo -alto, delgado, pelo negro liso y con flequillo, bien vestido ojos grandes marrones, y con una mirada pícara y a la vez gentil-
-Buenos días, mi nombre es Lucas Evans, fui transferido a este grado- dijo mirando al maestro.
-Pasé adelante, me mostraría sus papeles- dijo el maestro
-Claro-dijo el pelinegro dándole los papeles a el maestro y estrechando su otra mano.
-Bueno chicos, se qué es raro que a medio año vengan nuevos estudiantes pero estoy seguro que todos le darán la adecuada bienvenida a Lucas.
-"Luke"- corrigió el chico
-Bueno, Luke - dijo el maestro sin más remedio. Sientate al lado de Tania allá atrás le indicó el maestro señalándome.

El pelinegro se sentó en el asiento en que usualmente lo hacía Eduardo, eso me trajo recuerdos nostálgicos de lo que pasamos juntos Ed y yo, tantos fueron los recuerdos que una lágrima rodó por mi mejilla sin sentirlo, en ese momento sonó la campana y todos salieron, Marissa me invitó a salir pero negué con mi cabeza y me recoste en la mesa de mi asiento, Marissa se fue y me quedé sola, o al menos eso creí
- ¿Estas bien?- escuché una voz masculina.
- ¿Ehh? Si- asentí mirándolo y luego volviendo mi cabeza a su estado anterior.
- Soy Lucas, pero puedes decirme Luke dijo levantando mi mano y dándole un beso.
- Muchos gusto, soy Tania - dije mientras retrocedía mi mano.
- ¿Quieres salir a almorzar?.
- No, muchas gracias, quiero estar sola.
- Nadie quiere estar sola - dijo sentándose frente a mi.
- ¡Yo si!- dije un poco alterada ante la insistencia del chico en dejarme llorar sola.
- Lo siento solo quería ayudar- dijo ofendido.
- Lo lamento no fue mi intención hablarte de esa manera - le dije arrepentida.
- No te preocupes, ¿puedo saber que te tiene así?
- No! Es personal, no lo entenderías.
- Creo que podré entenderlo
- Lo siento no puedo -dije mientras me levantaba y corría hacia afuera.

Marisaa me encontró llorando en el baño y me levantó y me abrazó
- No llores más, él está bien.
- ¿¡Tú como lo sabes?!
- Sólo lo sé. - dijo segura.
- ¿Y porqué no se nada de él?
- Recuerda que dijo que se iría al campo, en el campo no hay mucha facilidad de comunicación.
- Pero hay maneras de comunicarse
- Si las hay estoy segura que tan pronto pueda él se comunicará contigo.
- Supongo que tienes razón - dije limpiando mi llanto.
- Eso, ahora vamos a la última clase y no llores más, recuerda que eres mucho más bonita que cuando lloras, pecosa - dijo citando a una frase que una vez Ed me dijo.

Eso me hizo sentir muy bien, abrace a Mari y nos fuimos a clases.

Mejores AmigosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora