Mejores Amigos

Parte 8

Todo iba genial en mi vida pues ahora tenía a mi hermano mayor, que me cuidara, que me aconsejara, mi amor por el iba creciendo cada día más.

Llegó el invierno mi época favorita, me encanta ir al instituto mojándome en el camino, como Eduardo vivía cerca de mi casa aveces nos juntábamos en el camino, pues ese día como estaba lloviendo yo llevaba mi paraguas y él vino y me lo quito y se fue corriendo para que lo alcanzará, por tratar de quitárselo me moje toda y llegué empapada al colegio. Aunque antes de llegar me devolvió el paraguas para que no le dijeran nada a él. En el receso también me mojé por que me empujó al patio donde las tuberías del techo hacían que el agua cayera en chorros, todo iba genial, todo iba ¡PERFECTO! Pensé que nada podría arruinarlo.

Días antes de entregar los promedios, mi maestro me llamó y me dijo: " ¿Que no entendiste lo que hablamos aquel día?
-Sí
-Entonces porque él te va a dejar y atraer ¿No te distanciaste de él?
-No puedo, es mi amigo-le dije-
-Pues me temo que tendré que llamar a tu padre
-Esta bien- dije desanimada.

DÍA DE ENTREGA DE LOS PROMEDIOS

Mi padre fue sin saber lo que mi maestro estaba por decirle, no se de que modo se lo dijo pero lo disgustó tanto que me regaño enfrente de todos y luego se fue enfadado, yo me fui corriendo al baño y me puse a llorar , por el regaño, por la injusticia - pues me prohibió hablarle a Ed-, y por enojo, le conté todo a Eduardo, y me dijo:

-No te preocupes, que me digan lo que me digan yo de ti no me alejaré jamás.
-Pero no conoces a mi padre- le dije-, es capaz de hacerte daño y no quiero ni imaginar lo que podría suceder.
- No tengas miedo, solo tendremos un poco más de precaución para que el maestro no nos vea.
-Esta bien- dije- pensando en lo injusta que es la vida, pues tenía que esconderme para poder abrazar a mi mejor amigo.

Los días pasaron y no había cambiado mucho, Eduardo seguía encaminandome a mi casa, nos seguíamos hablando igual excepto en frente del profesor, yo me sentía aliviada por dos cosas: Por que no cambio mi relación con Ed y Por que mi padre no se dio cuenta que me seguía viendo con él.

Estábamos a mitad del año escolar y Ed y yo habíamos afianzado mucho nuestros lazos, por una extraña razón con él podía ser yo misma, como ya dije anteriormente él era la única persona con la que prefería hablar de frente, si hablábamos por mensaje no sentía lo mismo, me ponía incómoda, así que no lo hacía mucho.

Yo pensaba - " A pesar de los baches en el camino, seguimos siendo amigos!"-

No dejaba de soñar con Eduardo, soñaba que creciamos y cada quién hacía su vida pero seguíamos siendo muy unidos, y que mis hijos lo llamaban Tío Ed, esos sueños simbolizaban lo mucho que lo quería y lo que esperaba para nuestro futuro. Siempre espere que esos sueños se cumplieran y espero que así suceda, me haría muy feliz que nuestra amistad duré por un muy largo largo tiempo.