"Secreto del chico pródigo: Jokka solitario..."

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Ciel P.D.V:

"¡¿entonces pasaste la tarde con él en su cuarto?! Vaya que suertudo eres..." me dijo Dimitra entre cuchicheos mientras el profesor pasaba materia frente a la clase, todos estaban concentrados y en silencio...

Lunes... el mejor día de todos... yupi...

"Necesito terminar la materia Dimi, después te cuento... no es el momento de hablar de esto..."

"No sé por qué te importa tanto... digo... una pura mirada de reojo a toda la materia y es suficiente para tí recordarla completa..." protestó mientras volvía su mirada de vuelta al cuaderno un poco molesta.

"No abusaré de ello... no vale la pena... además quiero aprender no memorizar, que no es lo mismo..." dije en un hondo suspiro, es fácil hablar cuando no lo experimentas o no lo vives.

"Bien, bien... después hablamos cabeza de cámara..." respondió Dimitra tomando atención en su cuaderno.

Si, cabeza de cámara, es como siempre me ha llamado desde que somos pequeños cuando quiere fastidiarme o molestarme por algo. A veces también me toma de las orejas por la espalda y me aprieta una fingiendo que es el botón para sacar una foto y me pregunta que tan buena camarógrafa es...

No es mi culpa tener una buena memoria... bueno... nací con ello... y por otra parte para mí no es algo tan del otro mundo.

Cuando era pequeño mamá me decía que era capaz de recordar cualquier cosa que viese y reconstruirla en mis descripciones con varios detalles. Con el tiempo los doctores descubrieron que lo que poseía era una cualidad un poco rara ya que no era de un grupo muy grande de niños llamada memoria eidética, también conocida como memoria fotográfica (mal aplicado el término pues la mente no es una cámara). Y aunque solo viese una imagen por unos instantes era capaz de recordarla detalladamente. Ahora bien, en realidad la memoria eidética no es algo eterno según lo que me explicó el doctor cuando me revisó. Por lo tanto mamá y papá se empeñaron en ayudarme a practicar mi memoria durante los años para que al menos las ideas me duraran más tiempo. Me explicaron que era posible perder esta capacidad sobre todo al volverme adulto, ya que la construcción de las imágenes involucraría la representación verbal y visual, lo que dificulta la formación de las imágenes eidéticas. Hasta ahora mi capacidad ha permanecido obviamente con algunas mermas a través de los años. Pero aún poseo una memoria buena y con buena capacidad de descripción. No me importa sinceramente conservar está habilidad, a mis padres les hubiera gustado mucho, le llamaban "la memoria del niño pródigo". Y en mi escuela solían burlarse a escondidas de mí por esto. La única que encontraba genial esta capacidad era Dimitra. El resto sólo decía que era un mentiroso aunque se los probara muchas veces y también decían que era porque alucinaba y recordaba mentiras.

"Al final Dimi me demostró que sólo eres especial y reconocido para aquellas personas que te quieren y te reconocen con cariño..." a veces ni siquiera con admiración.

"Señor Barraud, dígame cuál es el animal marino más venenoso del mundo, su ubicación y su aspecto físico..." preguntó el profesor Theodore.

"Una pequeña medusa de las costas australianas con su umbrela en forma cuadrada y aproximadamente sesenta tentáculos de ochenta centímetros hasta tres metros de largo, se llama avispa de mar también conocida como Chironex Fleckeri, los tentáculos inyectan un veneno letal que producen shock y paro cardíaco. Cada tentáculo posee hasta cinco mil millones de aguijones microscópicos y tiene la particularidad de brillar en la oscuridad..." respondí pausadamente mientras miraba al señor Theodore y luego volvía a mi cuaderno.

"Correcto señor Barraud, hoy pues hablaremos sobre el filo Cnidaria, las Hydrozoas, Anthrozoas, Myxozoas, Polypodiozoas, Staurozoas, Scyphozoas y a las que les daremos más atención hoy: Cubozoas, donde encontraremos a la llamada Chironex Fleckeri o avispa de mar..."

No Me Sigas...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora