Una Historia Que Contar

Cap. 8 "VIDEO"...

Han pasado dos meses desde que se empezó el juicio, y Carlos consiguió lo que quería: LA VERDAD.
Los tres hombres estaban un poco aliviados, pero en realidad uno de ellos no puede dejar esto como "finalizado"...Aún le faltan respuestas sin encontrar...
Leonardo no podía conciliar el sueño, jamás le dijo al detective que él había hecho unos pequeños vídeos en donde Katie se mostraba alterada por su enfermedad...
Pov's Leonardo:
Ah pasado tanto tiempo, no puedo quitarme aquel rostro que clamaba ayuda, aquella chica que no tenia mas que su soledad.
Aun recuerdo el primer día que estuve con ella, yo iba entrando a la habitación del hospital en donde se encontraba, y ahí estaba Katie. Dormida, tenía el rostro como el de un ángel pero al bajar mi mirada me encontré con unos brazos maltratados, llenos de cicatrices.
Las piernas estaban peor, tenían moretones por todos lados, en el cuello tenía una línea roja, esto era fácil... se quería quitar la vida no sólo una vez, si no cientos de veces más.
Cuando Katie se recuperaba en la estancia del hospital se me ocurrió hacerle un par de vídeos para así poder ayudarla un poco más, y creó que funciono. Se que ella por las circunstancias que tuvo ya no pudo mas e hizo lo que mas temía...quitarse la vida.
En su consultorio tenía unas cajas de cartón, dentro de ellas se encontraban cientos de discos. En estos discos se encontraba toda la verdad de la chica, durante años los guardó para poder llegarla a entender, y no sólo esta vez él los volverá a ver, si no que también Mario.
Inmediatamente hizo una llamada hacía la oficina de Mario, para citarlo en el consultorio y mostrarle la verdad de todo esto.
Llamada:
Mario: ¿Quien habla?
Leonardo: Soy Leonardo, necesito que vengas a mi consultorio, hay algo que tengo que mostrarte.
Mario: ¿Como que?
Leonardo: Algo de Katie Wiley.
( Inmediatamente Mario colgó y se fue rumbo al consultorio de Leonardo.
Al fin, todo esta marchando conforme lo predicado. Ojalá y que con esto pueda resolver el caso)
Horas después:
Mario llego con Leonardo para ver aquellos vídeos que estaban guardados y ahora salen a la luz.
Primer vídeo: Leonardo y Katie se encontraban en un cuarto blanco, se encontraban sentados cada uno en el extremo de la mesa.
Leonardo: ¿Sabes por que estas aquí?
Katie: No, sólo quiero irme...
Leonardo: Tranquila, no va a pasar nada. Sólo quiero que me respondas algunas preguntas, ¿vale?
Katie: Pero yo no lo conozco, no se que hago aquí.
Leonardo: No te alteres.
Deja me presento, me llamo Leonardo Ramirez.
Katie: Mucho gusto doctor Ramirez
Leonardo: Bien, empecemos.
¿Por qué escondes tus brazos a la vista de las demás personas?
Katie: Porque no quiero que vean.
Leonardo: ¿Y que es eso que no quieres que vean?
Katie: Mis ...cor...tes...
Leonardo: Remangate tu suéter
Katie: No puedo
Leonardo: Nadie se va a enterar.
Katie: De acuerdo.
Entonces en ese momento Katie se remango su suéter hasta los codos.
No pudo evitar caer unas cuantas lágrimas.
Ella odiaba mostrar el error que cometió dos años atrás.
Katie: ¡No puedo mas! ¡Basta! Por favor.
Leonardo: Calmate, todo va a estar bien.
Kaite: ¡No! ¡No lo esta, siempre esas malditas voces no me dejan tranquila!
Leonardo la agarra de los hombros ya que vio que Katie se estaba arañando los brazos hasta sacarse sangre. A Leonardo no le quedo mas de otra que cogerla de ambos brazos hasta que se calmara.
Y así pasaron unos diez minutos en esa posición hasta que Katie se calmo.
Katie: No se que me pasa, no quiero seguir así.
Ellos me controlan, ellos...(Deja de hablar, por un momento se ve ida.
Se nota como si estuviese mirando hacía la nada)
Leonardo: ¿Katie te encuentras bien? Respóndeme
Katie: Ellos...están aquí...y no puedo hacer nada...Ellos saben mis miedos.
(En efecto, Katie sufre de esquizofrenia)
Leonardo: ¿Y ellos se encuentran aquí con nosotros?
Katie: Si, uno de ellos se encuentra en la esquina de aquella pared burlándose de mi.
Se va acercando poco a poco...¡NO PUEDO MAS!
¡DEJAME! ¡NO QUIERO VOLVER A HACERLO!
Leonardo estaba realmente preocupado por ella. Quería ayudarla, pero ella simplemente no cooperaba.
Leonardo no tuvo otra opción más que sedarla con unos calmantes que guardaba en algunos casos de emergencia como estos.
(Hasta aquí acaba el primer vídeo)
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Mario: Lamento todo lo que la chica tuvo que sufrir.
Leonardo: Lo se, a veces me pregunto que hubiese pasado si no la hubiera conocido.
Al menos con migo fue realmente feliz, ya que no tuvo que aparentar algo que no era.
Finalizando el día duro, Mario se fue por primera vez tranquilo ya que hoy supo una gran verdad, Katie fue FELIZ en sus últimos meses de vida gracias a un psicólogo que término siendo parte de su familia, alguien que si supo apreciarla y quererla...