Una Historia Que Contar

Cap. 13 "Pastillas de la felicidad"

Pov's Leonardo: Ya han pasado dos meses desde que apareció aquella chica en mi consultorio, que prácticamente no la puedo sacar de mi cabeza.
Pov's Katie:
Ya han pasado dos meses desde que conocí a aquel doctor en su consultorio.
Aquel doctor que me hizo recordar mi pasado espantoso, el que siempre quiero olvidar pero no puedo gracias a aquellas marcas que me hice.
Esas estúpidas marcas siempre me perseguirán para toda la vida.
Siempre tengo que usar mangas largas o taparmelas con maquillaje para que los demás no las puedan ver.
Pov's Leonardo:
Cuando le pregunte del porque se había hecho esos cortes, empezó a llorar descontroladamente, escondiendo su rostro entre sus manos.
Le pase papel para que se limpiara el rostro. Después de que se calmara un poco, me dijo del porque de los cortes en su brazo.
Pov's Katie: (No pude mas y se lo tuve que decir.)
Hice aquellos cortes porque me siento sola, en mi escuela mis compañeros se apartan de mi cuando intento acercarme a ellos. Se burlan de mi.
Los maestros me preguntan del porque estoy siempre sola, y les digo que me gusta estar sola, pero en realidad como me gustaría gritarle al mundo que me siento sola. Que necesito personas a mi lado, que la maldita soledad me esta consumiendo por dentro todos los días de mi vida.
Que a veces pienso que todo esto va a cambiar, pero en realidad es todo lo contrario.
No me gusta estar sola, es horrible. Es horrible que hablen a tus espaldas, que se burlen de ti en vez de preguntarte que es lo que tienes.
Pero la verdad es que todos son una maldita basura, que solo te utilizan y te hablan cuando les convienen.
Pov's Leonardo: ¿Ya has intentado hablar con alguien a cerca de esto?
Pov's Katie: No, ¿para que?
Para que después te tachen de maldita loca.
A veces pienso que esto no sirve, ya no importa nada. Que importa si muero hoy o mañana, nada importa en esta vida.
Pov's Leonardo: Eso es todo por hoy, dile a tu madre a tu madre que entre por favor.
Nos vemos en la próxima cita.
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Narrador: Ya han pasado dos semanas, y nuevamente Katie regreso al consultorio.
Leonardo le había recetado unas (pastillas*) para su depresión. Y al parecer a Katie le funcionaron de maravilla.
Todo el tiempo estaba feliz, estaba activa; y eso a su madre le sacaba una enorme sonrisa.
Katie ya no se sentía presionada, aquellas pastillas color blanco la hacían sentir relajada, la hacían sentir feliz.
*Aquel medicamento que Leonardo le había recetado a la chica se llama Fluoxetina.
Ese medicamento sirve para ayudar a personas con depresión.