Una hermosa sonrisa pero unos horribles brazos.
Eso es lo que piensa la mayoría de la gente.
Eso es lo que piensa Leonardo, eso es lo que piensa Mario.
Katie tenía la habilidad de que las personas que conocía les hacia creer otra cosa.
Katie tenia miedo de que le volvieran a hacer daño, por eso ella casi siempre tenía una sonrisa para que no descubrieran su más grande secreto.
Sus brazos llenos de cortes antiguos y nuevos.
Tenía miedo de volver a ser criticada, de que se rieran de ella, de que le volvieran a poner apodos como: Brazos cortados, loca, suicida, gorda, antisocial, idiota, fea y demás.
Siempre que se miraba los brazos se pasaba la mano, arrepentida lloraba desconsoladamente. Queriendo volver al paso y decirse a si misma: ¡NO LO HAGAS, ESO ESTA MAL!
¡SI HAY GENTE QUE TE QUIERE, PERO POR FAVOR NO ARRUINES TUS BRAZOS CON MARCAS QUE JAMAS SE PODRÁN QUITAR!
No arruines tus brazos, ellos no tienen la culpa de la desgracia que a ti te toco vivir.
Te arrepentirás de haberlo hecho, jamas se van a quitar...
¡NUNCA EN TU VIDA, JAMÁS!
Recordando la primera vez que se paso la cuchilla por su blanco brazo, para terminar lleno de sangre y líneas feas.
La segunda vez, pero ahora en las piernas, esas marcas color vino jamas se quitaran.
Ya no podrá usar algo corto porque ahí están marcados para toda la vida......
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Una Historia Que Contar
RandomPrólogo Han pasado casi veinte años desde aquel incidente en el hospital mental "La Fuente". Un detective es asignado para el caso Wiley, su misión es encontrar las verdaderas causas de la "muerte" de la joven Katie Wiley Handerson, así tenga que p...