Capítulo 13

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Despierto y me encuentro estirada sobre un lugar blando y cómodo. Trato de levantarme pero estoy tan adolorida que no puedo. Me siento algo mareada, a pesar de que en el lugar en el que estoy sólo entra una leve luz por las rendijas de la persiana que no llegan a iluminar más que a una puerta. Oigo gritos.

- Vete -es la voz de Beth- si de verdad la quieres vete.

- No la he engañado -Christian- esa foto la tomé hace tiempo, cuando me acosté con una mujer algo loca, para evitar que se entrometiese en mi vida. Está casada. A esa tía me la follé por lo menos hace un año y no sé quién ni cómo coño han conseguido la foto.

- Mira Christian no te voy a mentir-oigo la voz de una mujer que no soy capaz de reconocer-, Katherine no está bien.

- No le he puesto los cuernos -grita él furioso. Me encojo, adolorida en lo que parece ser una cama- necesito hablar con ella Elionor. No he amado a nadie en mi puta existencia, no quiero perder a la única mujer que me ha dado ganas de vivir, la única que me ha mostrado la belleza que esconde el mundo. Es la razón por la que me levanto por las mañanas.

- Ella lo sigue creyendo, la foto le ha legado en... un momento complicado -dice Matthew.

- ¿Un momento complicado? -pregunta él- Quiero verla.

- No puedes -le dice autoritaria la tal Elionor- Christian si de verdad la quieres baja la voz, está descansando.

- ¿Descansando de qué, está embarazada? -pregunta.

- No, no te preocupes, en la caja de su ropa también están sus píldoras anticonceptivas -le dice Beth.

- ¿Qué está pasando? -pregunta Jaguar desesperado. Mi corazón se encoje ante su tono de voz.

- Mira... -le dice una nueva voz de hombre.

- ¿Qué tengo que ver Jonathan? -pregunta desesperado- decírmelo ya, dejad de andaros con rodeos.

- Christian -Elionor- le han dado una paliza -se hace el silencio- tiene la cabeza abierta por la zona de la calva, por así decirlo. Su cara no tiene un buen aspecto, está amoratada y llena de rasguños, tiene el labio abierto, aunque parece que no va a necesitar puntos. Lleva aquí una hora durmiendo. Ha llegado inconsciente por un dolor en las costillas que si mi tacto no me falla...

- Tiene como mínimo cuatro rotas -dice Matthew- y varios moratones en el resto del tronco. Eli le ha hecho fotografías.

- ¿Qué? -pregunta seco Christian a la vez que yo lo murmuro.

- Le teníamos que limpiar las heridas. Las fotos son pruebas para poner la demanda -dice la voz desconocida de hombre.

- Quiero verla, por favor -se hace el silencio- Elionor, necesito verla. Quiero ayudar a mi Cachorrita -dice suplicante.

- Christian...

- ¿Quieres ayudarla? -oigo a Elizabeth.

- Sí -susurra ¿devastado? ¿Por qué está así si no me ama? Lo que ha dicho antes es mentira, no puedo creerle y menos con la fotografía en mis manos pienso internamente.

- Tienes que hacer algo que no te va a gustar. Los padrastros de Katherine son unos hijos de perra, pero tienen mucho dinero. Esta no es la primera vez que la maltratan físicamente, por que como ya te habrás dado cuenta también lo hacen psicológicamente, nada más tienes que ver que lleva toda su vida en un sótano sin más muebles que una cama.

El Jaguar de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora